"Por cada ni?o que llevamos a Espa?a, hay dos o tres que mueren"
Una veintena de ni?os que salvaron la vida gracias a una operaci¨®n en Espa?a se re¨²nen en Bagdad
"Hola, ?qu¨¦ tal?", saluda Sanaa con buen acento. Para esta ni?a iraqu¨ª de cinco a?os, las palabras en espa?ol son algo m¨¢s que una lecci¨®n bien aprendida. Representan la diferencia entre la vida y la muerte. Sanaa forma parte del centenar de ni?os iraqu¨ªes que viven gracias a una operaci¨®n de coraz¨®n realizada en Espa?a. Ayer, los miembros de las Brigadas contra la Guerra lograron reunir a una veintena de esos chavales. Fue una fiesta para todos.
La convocatoria se celebra en el hotel Cedro de la capital iraqu¨ª, donde tienen su base las Brigadas contra la Guerra. Ni?os y mayores llegan endomingados a la cita y exhiben grandes sonrisas. No es para menos. Para muchos, el viaje a Espa?a marc¨® la diferencia entre la vida y la muerte. Ahora, entre globos, caramelos y abrazos, se muestran radiantes, y eso que algunos a¨²n necesitan una segunda operaci¨®n.
"La mayor¨ªa han sido operados de cardiopat¨ªas provocadas por malas tabicaciones en el coraz¨®n que si no son atajadas antes de la adolescencia resultan mortales", explica Carlos Varea, responsable de la Campa?a Estatal por el Levantamiento de las Sanciones a Irak (CELSI) que organiza el programa y las Brigadas. "Cuando son peque?itos", a?ade Varea, "se les practica una cirug¨ªa paliativa y luego tienen que volver a pasar por el quir¨®fano".
No es el caso de Rukan, quien totalmente recuperado juega incansable con su hermano Mahmud bajo la mirada atenta de Maha, su madre. Rukan, como la mayor¨ªa de estos ni?os cian¨®ticos, a los que la sangre no se les oxigena lo suficiente, carec¨ªa de toda vitalidad antes de la operaci¨®n. Ahora es un terremoto. Buena se?al para un programa que empez¨® con una nota triste: la muerte del primer ni?o que se oper¨® en 1996. Desde entonces han sido 138 operaciones en 105 ni?os. "Por cada uno que llevamos a Espa?a, hay dos o tres que mueren. Tenemos una lista de espera de m¨¢s de 300", dice Varea.
M¨¦dicos iraqu¨ªes presentes en la reuni¨®n afirman que estas cardiopat¨ªas cong¨¦nitas est¨¢n "asociadas a las condiciones de desarrollo intrauterino, tensi¨®n de la madre durante el embarazo y carencias de todo tipo durante ese periodo clave de formaci¨®n del organismo". Casi erradicadas en los pa¨ªses desarrollados, estas patolog¨ªas han aumentado "de manera anormal" en Irak desde la guerra del Golfo (1991).
El programa cuenta con el apoyo del Ministerio de Sanidad espa?ol, con lo que el tratamiento hospitalario resulta gratuito. Los gastos de traslado de los ni?os y sus madres se han financiado con una asignaci¨®n del Principado de Asturias de 150.000 euros anuales y peque?as aportaciones de varios municipios de Madrid y Alicante.
Hanin Abdelkarim pertenece a un grupo intervenido de problemas oculares. "Ha sido operada en dos ocasiones en la cl¨ªnica Barraquer de Barcelona, pero ahora necesita una tercera operaci¨®n", conf¨ªa su padre a la vez que muestra los informes m¨¦dicos y el ojo derecho velado de la peque?a. Hanin, que tiene 12 a?os, dice no tener miedo a volver al quir¨®fano y est¨¢ encantada de mostrar sus conocimientos de espa?ol.
Mohamed Samir se muestra m¨¢s t¨ªmido. A sus ocho a?os, ya ha pasado dos operaciones de coraz¨®n y tiene s¨ªndrome de Down. "Nos dijeron que tras la operaci¨®n ganar¨ªa peso y tama?o, pero no ha sido as¨ª", declara preocupado su padre. Al parecer a¨²n le queda "un peque?o agujero" en el coraz¨®n y los m¨¦dicos advirtieron de que si aumentaba habr¨ªa que volver a intervenir. A Samir le gustar¨ªa que su hijo volviera a ser examinado en Espa?a. Pero de momento, la crisis pol¨ªtica lo impide. Las tres ¨²ltimas operaciones aprobadas han quedado en suspenso tras el cierre de la Embajada espa?ola en Irak.
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