Las v¨ªctimas civiles

Las guerras modernas se caracterizan porque la mayor¨ªa de sus v¨ªctimas son civiles: aproximadamente el 90%. Sean cuales sean las razones que se esgriman para atacar Irak, sea el propio Consejo de Seguridad el que lo autorice o sea ¨¦sta una decisi¨®n unilateral de Estados Unidos, lo cierto es que morir¨¢n cientos, quiz¨¢s miles de personas; por supuesto, civiles. Es decir, hombres y mujeres ancianos, ni?os y ni?as, agricultores, tenderos, profesores... ?C¨®mo es posible aceptar tanto sufrimiento por intereses geopol¨ªticos y econ¨®micos?

Irak lleva soportando un embargo desde 1990 que ha supuesto, seg¨²n algunas fuentes, la muerte de entre 350.000 y 500.000 ni?os menores de cinco a?os como consecuencia directa de dicho embargo -desnutrici¨®n, falta de medicamentos y material m¨¦dico, por enfermedades derivadas de la presencia de munici¨®n compuesta por uranio empobrecido procedente de los bombardeos de la guerra del Golfo...-.

Se nos quiere decir que Sadam Husein es un dictador peligroso para la comunidad internacional, para los pa¨ªses vecinos de Irak. Bueno, puede que sea verdad: Husein atac¨® Ir¨¢n (estimulado por Estados Unidos, por cierto), invadi¨® Kuwait, lanz¨® misiles contra Israel y Jordania... Quiz¨¢ Husein sea un peligro, pero creo que su pueblo no debe pagar por ello.

Lo que pretende Estados Unidos es castigar a¨²n m¨¢s a un pa¨ªs que lleva sufriendo desde 1980, acumulando dolor sobre dolor. En ning¨²n momento hemos o¨ªdo a ninguno de los que defienden la guerra referirse a la poblaci¨®n civil. No, la excusa es acabar con Sadam Husein como sea, al precio que sea, al coste que sea.

Resulta muy dif¨ªcil ver a George Bush como un defensor de las libertades. No creo que nadie acabe de cre¨¦rselo. Entonces ?cu¨¢les son sus razones? ?Por qu¨¦ la destrucci¨®n de Sadam Husein se ha convertido en la prioridad de su gobierno? Se han enumerado varias causas: razones internas -pr¨®ximas elecciones en Estados Unidos-; razones externas -control de una de las zonas petrol¨ªferas m¨¢s ricas del mundo-; y razones personales -acabar lo que su padre no pudo hacer-.

Los niveles de salud de la poblaci¨®n de Irak son desastrosos si los comparamos con los que manten¨ªa el pa¨ªs antes del embargo, aun cuando acababa de salir de dos guerras. Estas dos d¨¦cadas de penurias han provocado el desmoronamiento del Sistema de Salud iraqu¨ª: destrucci¨®n f¨ªsica de las infraestructuras sanitarias, exilio de los profesionales de la salud, escasez de medicamentos y materiales tan b¨¢sicos como sondas... Incluso el agua ha dejado de ser potable en Bagdad por la imposibilidad de importar cloro, prohibido por Naciones Unidas por la posibilidad de usarlo con otros fines.

La mortalidad infantil ha subido desde 56 menores de un a?o fallecidos por cada mil ni?os en 1989, a 136.000 en 2000. La FAO, tan poco sospechosa, ha publicado que m¨¢s de 800.000 ni?os menores de cinco a?os padec¨ªan desnutrici¨®n cr¨®nica en el a?o 2000 y que el 70% de los fallecimientos de ni?os menores de cinco a?os se deb¨ªa a diarreas o infecciones respiratorias agudas. Las actuales tasas de vacunaci¨®n, muy bajas, han aumentado las muertes por enfermedades infecciosas, sarampi¨®n, meningitis, neumon¨ªas... Unicef reconoci¨® que Irak es el pa¨ªs que m¨¢s ha retrocedido en cuanto a supervivencia infantil en la ¨²ltima d¨¦cada.

Se dice que esta guerra se hace por la seguridad mundial. Sin embargo, con el coste que va a suponer, m¨¢s de 150.000 millones de d¨®lares, se podr¨ªa asegurar la salud mundial en muchos lugares del mundo. Se podr¨ªa tratar a los cuarenta millones de personas que viven con sida en todo el mundo -10.000 millones de d¨®lares-; se podr¨ªa, adem¨¢s, asegurar agua potable y saneamiento, 15.000 millones de d¨®lares, a la mayor parte de la poblaci¨®n mundial, y se garantizar¨ªan las necesidades b¨¢sicas de salud y alimentaci¨®n... Con ese dinero se podr¨ªan, en definitiva, evitar millones de muertes cada a?o. Eso s¨ª que ser¨ªa una guerra justa.

Un ataque de Estados Unidos y de los pa¨ªses que lo apoyan quiz¨¢ contribuya a que Sadam Husein deje de gobernar. Por cierto, ?alguien se acuerda de que la raz¨®n para atacar Afganist¨¢n era acabar con Osama Bin Laden? ?D¨®nde est¨¢ Bin Laden? Quiz¨¢ acaben con Sadam, pero lo que es seguro es que las condiciones sanitarias de la poblaci¨®n iraqu¨ª empeorar¨¢n y ser¨¢n peores a medio plazo. Probablemente las estructuras sufrir¨¢n graves da?os -centrales el¨¦ctricas, presas, puentes, carreteras, l¨ªneas telef¨®nicas, hospitales, escuelas, almacenes de alimentos...-, y esta situaci¨®n contribuir¨¢ a empeorar la situaci¨®n de la salud, si a ello a?adimos la probable huida o muerte de buena parte del personal sanitario y las tremendas consecuencias para la salud medioambiental que supondr¨¢n los probables y masivos incendios descontrolados de los pozos de petr¨®leo.

Supondr¨¢ la emisi¨®n de millones de toneladas de di¨®xido de carbono (en la guerra del Golfo se liberaron m¨¢s de 500 millones de toneladas de di¨®xido de carbono, que contaminaron el aire y llegaron hasta India).

Los desplazados y refugiados que produzca esta guerra -se habla de 1.500.000 y un mill¨®n, respectivamente, seguramente, y en su mayor¨ªa mujeres y ni?os- se ver¨¢n expuestos a graves riesgos en su salud: epidemias de meningitis y sarampi¨®n, la extensi¨®n de la tuberculosis y la falta de saneamiento y agua potable traer¨¢n como consecuencia epidemias de c¨®lera y de origen alimentario; esto provocar¨¢ miles de muertes y de sufrimiento humano, la falta de cobijo y el hacinamiento crea situaciones de vulnerabilidad para la violencia, violaciones y extensi¨®n de las enfermedades de transmisi¨®n sexual; en definitiva, la consecuencia de esta cat¨¢strofe humana y crisis humanitaria perdurar¨¢ durante a?os.

Con el tiempo quiz¨¢ se reconstruyan algunas estructuras y las organizaciones humanitarias podr¨¢n reemplazar en los primeros momentos algunas de las carencias del sistema sanitario, nutricional y educativo... Pero, como ya sucedi¨® en Irak en la anterior guerra, como sucedi¨® tambi¨¦n en Bosnia y en Kosovo, adem¨¢s de las consecuencias de salud para su futuro, los metales pesados y t¨®xicos procedentes de las municiones y bombas empleadas en el ataque, los restos de uranio empobrecido usado para perforar blindajes, permanecer¨¢n en los suelos, se filtrar¨¢n en las aguas y seguir¨¢n matando, como lo est¨¢n haciendo actualmente, a la poblaci¨®n iraqu¨ª, que seguir¨¢ siendo v¨ªctima incluso cuando Sadam ya s¨®lo sea un recuerdo.

Pilar Est¨¦banez es fundadora de M¨¦dicos del Mundo y m¨¦dica especialista en Salud P¨²blica y Medicina Humanitaria.