Aclaraci¨®n

En un art¨ªculo de la p¨¢gina 61 de su diario del 11 de marzo de 2003 se afirma que el negocio de producir electricidad quemando gas es prometedor y que lo respaldan las empresas, las administraciones y las asociaciones ecologistas. Esto ¨²ltimo es rigurosamente falso.

La producci¨®n de electricidad a partir del gas, incluso con tecnolog¨ªas de ciclo combinado, es rechazada de forma un¨¢nime por todas las organizaciones ecologistas significativas: desde los grandes colectivos internacionales como Greenpeace, pasando por otros de implantaci¨®n s¨®lo en nuestro pa¨ªs como Ecologistas en Acci¨®n (a la que represento) y concluyendo con decenas de colectivos locales. Buena prueba de ello es la notable oposici¨®n que enfrentan muchas de estas plantas: Arcos de la Frontera, Morata, Fuentidue?a, Catadau, Amorebieta, Martorell, Aceca, Plana del Vent... El hecho de que las emisiones de la generaci¨®n de electricidad con gas sean menores que las de otras formas de producir electricidad no la convierte en una fuente limpia, ni deseable. Las alternativas ecologistas de suministro el¨¦ctrico siguen pivotando sobre el ahorro, el uso eficiente de la energ¨ªa y las fuentes renovables.

Ser¨ªa deseable que, en las escas¨ªsimas veces que en las p¨¢ginas de econom¨ªa de su peri¨®dico se alude al ecologismo, se tuviera la delicadeza de buscar fuentes fiables. Se evitar¨ªa as¨ª proporcionar una falsa impresi¨®n a sus lectores.