La silenciosa espera del flaco

Hay jugadores del Deportivo con los que se distingue si son titulares o suplentes reparando s¨®lo en un detalle: la velocidad con que buscan los micr¨®fonos de la prensa. Cuando alguno lleva una temporada jugando poco, se deja caer por las inmediaciones de los periodistas con el discurso a punto: "No se cuenta conmigo, el m¨ªster no me ha dado explicaciones...". La lista de los que han usado ese m¨¦todo es interminable y ayer mismo la engros¨® Donato, molesto porque el entrenador, Javier Irureta, prefiera usar como central a H¨¦ctor, lateral derecho, en lugar de rendirse a su experiencia. Entre tanto elemento d¨ªscolo, Valer¨®n se dir¨ªa un extraterrestre. Favorito de la grada, de la prensa y hasta de buena parte de sus compa?eros, lleva dos meses sin ser titular en un partido de Liga. Y nadie le ha o¨ªdo ni musitar una queja.

Valer¨®n no ten¨ªa ganas de hablar ayer con los periodistas. Quiz¨¢ a¨²n dudase de si ser¨¢ titular hoy en el Camp Nou o puede que quisiera esquivar las previsibles preguntas sobre su larga ausencia en los equipos iniciales. Tampoco nadie esperaba de ¨¦l palabras gruesas. Protestar porque no juega ser¨ªa traicionarse a s¨ª mismo. Cuando una brutal entrada de Pe?a le fractur¨® el peron¨¦, en octubre pasado, el equipo sufri¨® una sacudida tan enorme que la prensa no cesaba de hablar del s¨ªndrome Valer¨®n. Era un diagn¨®stico palmario para todos menos para el interesado, quien comentaba a sus conocidos con cierta indignaci¨®n: "Le faltan al respeto a mis compa?eros. Pero si yo soy uno m¨¢s ...". El verano ¨²ltimo, s¨®lo unos d¨ªas antes de que se anunciasen los futbolistas elegidos para el Mundial de Corea y Jap¨®n, cuando todo el mundo le se?alaba como una de las grandes esperanzas de Espa?a, ¨¦l no daba nada por hecho: "No s¨¦ si ir¨¦. Hay jugadores muy buenos aqu¨ª".

Desde mediados de febrero tiene el alta m¨¦dica y se entrena con normalidad. Ha vuelto incluso a la selecci¨®n. Su talento sigue intacto. Sin embargo, Irureta, tan meticuloso con el estado f¨ªsico de sus futbolistas, se ha resistido a entregarle la titularidad. S¨®lo jug¨® de salida ante el Manchester en Riazor, un choque intrascendente porque el Depor ya estaba eliminado. En los dem¨¢s partidos, ha sido ¨²nicamente una soluci¨®n de recambio. En el partidillo de entrenamiento de ayer, Irureta mantuvo la inc¨®gnita de la alineaci¨®n para el Camp Nou. El equipo te¨®ricamente titular estaba compuesto por 12 futbolistas, lo que encerraba el dilema habitual de las ¨²ltimas semanas: Valer¨®n o Trist¨¢n. Esta vez parece que el asunto se resolver¨¢ a favor de El flaco. Irureta se resisti¨® a confirmarlo, aunque sus palabras dejaron la sensaci¨®n de que ya ha elegido. "Creo que ahora s¨ª est¨¢ en condiciones de jugar un partido completo. Ya lo hizo el d¨ªa del Manchester, un encuentro muy c¨®modo que no quiere decir nada. Tampoco puedo anticipar ahora cu¨¢l va a ser el ritmo del partido en Barcelona. Pero s¨ª, est¨¢ para jugar", dijo Irureta antes de reservarse una ¨²ltima cautela: "!Ojo!. Esto no quiere decir nada".

Aunque a ¨¦l le moleste tanto que se digan estas cosas, Valer¨®n, m¨¢s que un jugador, es un concepto del f¨²tbol. Tiene tal capacidad de contagio que la fisonom¨ªa del equipo depende de si ¨¦l est¨¢ o no. En su ausencia, Irureta se adapt¨® a jugar con dos delanteros naturales, una f¨®rmula que reforz¨® la pegada al precio de sacrificar la elaboraci¨®n. Cuando est¨¢ Valer¨®n, no hay lugar a la impaciencia con la pelota y el equipo acaba cosiendo el f¨²tbol puntillosamente. A tenor de lo dicho ayer, Irureta prefiere este m¨¦todo para el Camp Nou. "Quiero tener la pelota y hacer correr al Bar?a", asegur¨® el t¨¦cnico. Que los azulgrana se exten¨²en buscando a Valer¨®n.