Pistoletazo de salida

El Partido Popular inicia en esta semana su precampa?a electoral de cara a las municipales. Ser¨¢ a partir de la celebraci¨®n hoy de la Junta Directiva Nacional que estar¨¢ presidida por Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y en donde se analizar¨¢ el escenario pol¨ªtico en el que se desarrollar¨¢ esta decisiva etapa que ahora se afronta y que concluir¨¢ con los comicios del 25 de mayo. "Tu futuro, nuestro compromiso" ser¨¢ el lema central de una de una ofensiva pol¨ªtica que se visualizar¨¢ con la imagen de cada uno de los candidatos a las alcald¨ªas. Pero, atenci¨®n, porque aqu¨ª se podr¨¢ poner en evidencia la distancia que ahora ponen algunos de por medio con su partido o el sospechoso grado de compromiso que adquieren otros con determinadas empresas inmobiliarias y poderes locales concretos.

Ocurre ya en Andaluc¨ªa que hay alcaldes a los que parecen estorbarles las siglas de su propio partido, m¨¢xime ahora con la animadversi¨®n existente en la calle contra esta formaci¨®n a consecuencia de su apoyo al ataque anglo-norteamericano a Irak. As¨ª las cosas, prefieren minimizar el impacto visual del s¨ªmbolo partidista y acentuar, en cambio, su figura como eje central de esta precampa?a, tal y como ya se puede comprobar en la carteler¨ªa que se est¨¢ instalando en las calles de nuestros pueblos y ciudades. Pero peor huele la actitud de otros que no tienen remilgos de que su figura vaya acompa?ada del s¨ªmbolo de firmas inmobiliarias, que, sin duda, estar¨¢n deseosas de que estos candidatos ganen las elecciones municipales para que sus sue?os se hagan realidad a modo de compensaci¨®n por la generosa ayuda que prestan. Todo un esc¨¢ndalo. Lo grave no es ya que se produzcan estos hechos sino que no causen el m¨¢s m¨ªnimo rubor en los dirigentes populares que deber¨ªan preocuparse porque se guardasen las apariencias y se sigan unas m¨ªnimas pautas fijadas por el partido.

Mart¨ªnez se la juega

Nada de eso se produce en el seno del PP. No hay se?ales que indiquen la existencia de claras instrucciones para corregir estos errores, mientras que ya nos adentramos en el lanzamiento de la precampa?a. Aqu¨ª merece especial atenci¨®n la singular carrera que inicia la presidenta regional de esta formaci¨®n, Te¨®fila Mart¨ªnez. Apenas aparece imbuida en su papel de m¨¢xima responsable de su partido o como jefa de la oposici¨®n en Andaluc¨ªa. Est¨¢ metida de lleno en su tarea como alcaldesa de C¨¢diz y en su af¨¢n de revalidar su condici¨®n de ser la m¨¢s votada en Espa?a en las municipales. Se juega mucho en el envite. No en vano ella mismo recalc¨® en el pasado congreso regional que estas elecciones iban a ser el nudo gordiano de lo que ocurriera posteriormente en las andaluzas, a las que ella tambi¨¦n concurrir¨¢ para aspirar a la presidencia de la Junta.

De modo que todo lo que no sea conseguir, y hasta incluso mejorar, los resultados que ya obtuviera en las elecciones locales, corre el riesgo Mart¨ªnez de que sea interpretado como un fracaso suyo y un signo de su posible debilitamiento. Pero ese extremo est¨¢ a¨²n por ver, aunque lo cierto es que debe ser tanto lo que se juega que no hay quien la saque de su rinc¨®n gaditano desde donde, a duras penas, a golpe de ruedas de prensa, trata de meter cabeza el debate pol¨ªtico andaluz.

Pero la vida sigue y ah¨ª est¨¢ para comprobarlo la nueva reuni¨®n que mantendr¨¢n, este lunes, PSOE, IU y CC OO para valorar el calendario de la fusi¨®n de El Monte de Sevilla y Huelva y Caja San Fernando. Se trata, en definitiva, de una toma de contacto de los firmantes de un acuerdo anterior que posibilit¨®, en su momento, el desalojo de dichas entidades de sus anteriores presidentes, Isidoro Beneroso y Juan Manuel L¨®pez Benjumea, respectivamente. Nada hace pensar que ese pacto se vaya a romper pero, sin duda, se tendr¨¢ que analizar en detalle lo que sucede con este proceso de fusi¨®n en el que han surgido discrepancias por parte de Comisiones, organizaci¨®n que se muestra abiertamente en contra de los derroteros que est¨¢ adquiriendo dicha fusi¨®n. Hay otros en las cajas que, sin embargo, piensan que estas reticencias de dicho sindicato obedecen, simplemente, a que no quieren una uni¨®n que dar¨ªa paso a una nueva entidad en la que perder¨ªa parte del protagonismo que ahora tiene en El Monte.