Catalu?a alcanza a Europa en inmigraci¨®n
El n¨²mero de extranjeros no comunitarios se ha multiplicado por seis desde 1996 y ¨¦stos tienden a concentrarse en barrios degradados
Catalu?a ha alcanzado a Europa, al menos en cuanto a inmigraci¨®n se refiere. As¨ª lo demuestran las ¨²ltimas estad¨ªsticas del Gobierno central y la Generalitat, que demuestran que cerca del 5% de la poblaci¨®n catalana procede de alg¨²n pa¨ªs extranjero. Esta cifra, que en principio puede parecer discreta, denota una aut¨¦ntica revoluci¨®n cuando se mira desde otra perspectiva, y es que desde finales de los ochenta la proporci¨®n de extranjeros respecto a la poblaci¨®n catalana se ha multiplicado por cinco. Y una cifra m¨¢s: por cada extranjero no europeo que resid¨ªa en Catalu?a en 1996 hoy se cuentan seis.
En los ¨²ltimos cinco a?os la inmigraci¨®n ha dejado de ser un fen¨®meno de algunas ciudades m¨¢s industrializadas y de los invernaderos del Maresme, y ha pasado a ser una realidad tangible y visible en la mayor¨ªa de pueblos y ciudades. S¨®lo una de las 41 comarcas catalanas, la Terra Alta, tiene menos del 2% de extranjeros entre sus habitantes, algo que pocos habr¨ªan cre¨ªdo en 1996, cuando 34 comarcas no alcanzaban este ¨ªndice.
"Esto ya es casi un gueto. A muchos incluso les da reparo decir que viven en La Pau"
Ya es f¨¢cil encontrar municipios que alcanzan el 15% de poblaci¨®n inmigrada. En el Alt Empord¨¤, como en Barcelona ciudad, uno de cada 10 habitantes es inmigrante, algo que hasta hace cinco a?os s¨®lo pod¨ªa verse en algunas ciudades francesas, alemanas o del norte de Europa. Y todo ello sin grandes conflictos sociales. Sin embargo, la experiencia europea demuestra que la situaci¨®n puede estallar si no se atajan los problemas b¨¢sicos, como la falta de la vivienda, la degradaci¨®n de ciertos barrios y la escolarizaci¨®n de los ni?os.
De hecho, se est¨¢n creando peque?os guetos. Lo sabe bien Juana Mart¨ªn, responsable del programa de Inmigraci¨®n de C¨¢ritas Barcelona, quien califica de "insostenible" la actual situaci¨®n de muchos barrios: paro, falta de vivienda, hacinamiento, planificaci¨®n insuficiente y miseria, mucha miseria. ?ste es el panorama que se encuentran los trabajadores de C¨¢ritas, que el a?o pasado atendieron a cerca de 10.000 inmigrantes en el ¨¢rea metropolitana de Barcelona. "Las administraciones no hacen lo que se espera de ellas. Todas tienen planes de inmigraci¨®n, como el del Ayuntamiento de Barcelona, que es muy bonito sobre el papel, pero en la pr¨¢ctica se queda en nada", asegura Mart¨ªn.
La responsable de C¨¢ritas considera que el enfoque que est¨¢n dando las administraciones a los ¨²ltimos fen¨®menos migratorios es completamente err¨®neo. "Quieren llevarlo todo desde los servicios sociales, cuando la realidad de la mayor parte de los inmigrantes es muy diferente: no necesitan tanto estos servicios como asesoramiento y facilidades para trabajar", asegura. "La mayor parte de los inmigrantes trabajan y aportan riqueza, pese a que muchos de ellos tienen que hacerlo sin papeles. Me consta que muchos empresarios quieren regularizar a sus trabajadores extranjeros y que el Gobierno se lo pone imposible. ?C¨®mo se entiende esto?".
Coincide con ella ?ngel, un popular peluquero y l¨ªder vecinal del barrio de La Pau de Badalona. Este luchador, que ha invertido toda su vida en apasionadas luchas para mejorar su barrio, ve como ¨¦ste se est¨¢ desmoronando. Y no s¨®lo por la llegada de inmigrantes sin recursos. La Pau es uno de los 40 barrios catalanes que soportan importantes olas de inmigraci¨®n sin planificaci¨®n alguna, con viviendas degradadas y reductos de pobreza. La Miseria atrae m¨¢s miseria. "Mis clientes se est¨¢n marchando, ya no se encuentran a gusto en este barrio", lamenta ?ngel, quien tampoco quiere culpar a los inmigrantes de lo que est¨¢ pasando en La Pau. "Lo que pasa aqu¨ª es que estamos desamparados, el Ayuntamiento no hace lo que deber¨ªa y la asociaci¨®n de vecinos no lucha para solucionar los problemas de base de los pobres".
?Engrosar¨¢ alg¨²n d¨ªa La Pau una lista de barrios sin ley, de ciudades degradadas y sin posibilidad de rehabilitaci¨®n? Muchos de los habitantes as¨ª lo temen. ?ngel, por ejemplo, explica: "Esto ya es casi un gueto. A muchos incluso les da reparo decir que viven en La Pau: parece que ya est¨¦s marcado, y esto es mala se?al", argumenta.
Con tantos problemas, la Asociaci¨®n Movimiento Cuarto Mundo, una peque?a ONG que recibe 7.000 euros al a?o del Ayuntamiento de Badalona, intenta poner algo m¨¢s que parches. Rina, una mujer de origen chileno que impulsa esta asociaci¨®n, pone todo su empe?o en hacer que la miseria no se enquiste m¨¢s en el barrio. "Aqu¨ª se han invertido millones de euros de la Uni¨®n Europea, pero no ha servido para nada. Se han arreglado fachadas y puesto plantas en algunas calles, pero no se ha trabajado con los m¨¢s pobres, los que no tienen nada", explica. Rina asegura que el barrio "se est¨¢ cayendo" por la falta de empleo y de formaci¨®n de quienes all¨ª viven. "La gente tiene que trabajar en la econom¨ªa sumergida y, aunque tengan algo de dinero, no pueden invertirlo en mejorar sus casas porque dejar¨ªan de percibir las ayudas que tienen. As¨ª que acaban compr¨¢ndose un buen coche y mientras el barrio va decayendo".
450.000 personas sin voz ni voto
En Catalu?a viven 341.668 inmigrantes, seg¨²n el Ministerio de Interior; seg¨²n el ¨²ltimo censo, 310.307, y si se suman a ¨¦stos los que la Generalitat cree que residen en la comunidad aut¨®noma sin tener papeles, 450.000. Es casi imposible, por razones obvias, saber cu¨¢l es el n¨²mero de inmigrantes en situaci¨®n irregular, aunque la Generalitat considera que est¨¢ en torno a 120.000.
Pero hay una cosa que tienen en com¨²n los inmigrantes en situaci¨®n regular y los que viven sin papeles: no pueden votar, a menos que tengan la ciudadan¨ªa espa?ola, y por lo tanto no tendr¨¢n voz para decidir nada en sus municipios el pr¨®ximo 25 de mayo. Es la primera vez desde la llegada de la democracia que m¨¢s del 5% de la poblaci¨®n est¨¢ excluida del sistema de toma de decisiones.
La actual legislaci¨®n s¨®lo reconoce el derecho al sufragio activo y pasivo en las elecciones municipales a extranjeros cuando existe reciprocidad con su pa¨ªs de origen. En la pr¨¢ctica, ¨²nicamente permite el voto a residentes de determinados pa¨ªses europeos. Noruega, Dinamarca, Suecia, Holanda e Irlanda ya reconocen el derecho al voto a todos los inmigrantes en las elecciones municipales. Y desde 1995, unos 150 municipios catalanes han aprobado mociones en este sentido, as¨ª como la mayor parte de los partidos.
En Barcelona, Joan Clos (PSC) propone en su programa electoral que los inmigrantes que residen legalmente en Espa?a puedan votar al menos en las elecciones municipales, tal como ya consta en el actual programa de inmigraci¨®n municipal.
Xavier Trias (CiU) tambi¨¦n se pronuncia a favor. Considera que todos los inmigrantes que hayan residido legalmente en el pa¨ªs durante al menos dos a?os y hablen "correctamente" catal¨¢n o castellano deber¨ªan poder votar.
Esta propuesta fue duramente criticada por Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz, el candidato del PP, quien hasta el momento no ha mostrado ning¨²n inter¨¦s por conceder este derecho a los extranjeros no comunitarios residentes en la ciudad.
Esquerra Republicana aboga por que en Barcelona el derecho de voto se reconozca a "todos los ciudadanos sin importar su raza, sexo o procedencia".
Iniciativa per Catalunya Verds, que tambi¨¦n defiende el derecho de voto de todos los inmigrantes, ha llegado a proponer una consulta "simb¨®lica" para que el 25 de mayo los inmigrantes puedan dar su opini¨®n.
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