M¨¢s electores que en 17 capitales de provincia

Todos los alumnos, profesores y personal de la Universidad Complutense de Madrid podr¨¢n votar directamente a su candidato favorito a rector el pr¨®ximo jueves. Seis candidatos compiten por este cargo en la mayor universidad presencial espa?ola. Seg¨²n datos del curso pasado, cuenta con

80.200 estudiantes en facultades y escuelas universitarias, 6.900 en programas de doctorado y 1.000 en centros adscritos (los que tienen suscrito un acuerdo con esta universidad para que sus alumnos se titulen por ella). El 62% del total son mujeres. Este centro tiene adem¨¢s un personal compuesto por m¨¢s de 12.600 personas entre profesores y personal de administraci¨®n y servicios (PAS).

En la Complutense hay, por lo tanto, unos 100.700 electores, m¨¢s que en 17 capitales de provincia, seg¨²n el ¨²ltimo censo, tales como Girona y C¨¢ceres. La campa?a de la Complutense va a durar 11 d¨ªas lectivos. Cada candidato cuenta con 12.000 euros para su campa?a electoral, que financia el rectorado. Algunos van a usarlo para montar grandes pancartas; otro, para un autob¨²s electoral; hay quien se ha dedicado casi exclusivamente a pegar carteles por todas partes, y todos han iniciado un apretado recorrido por los 39 centros de la universidad extendidos por todo el campus para explicar su programas.

Aun as¨ª, la mayor parte de los estudiantes no conocen a los candidatos, los profesores y el PAS de los centros a los que pertenece alg¨²n aspirante tienen claro qui¨¦n es, pero sobre el perfil y el programa del resto se orientan de o¨ªdas. Porque lo que s¨ª ha ocurrido es que se han desatado todo tipo de rumores: sobre las tendencias y apoyos pol¨ªticos de los candidatos, sobre qu¨¦ sectores de la universidad tiene cada uno detr¨¢s y sobre la financiaci¨®n de la campa?a. La conclusi¨®n es una politizaci¨®n m¨¢s que clara.

Algunos sindicatos, como CC OO y UGT, e IU han apoyado abiertamente a uno de los aspirantes a rector, Carlos Berzosa. El PP y el PSOE no se han pronunciado hasta el momento, aunque tienen sus preferidos. Parece inevitable, pues, que este sistema electoral provoque que los comicios universitarios vayan perdiendo su car¨¢cter acad¨¦mico.

No faltan ejemplos. Miguel ?ngel Alario, entre otros, se queja de que la universidad haya convocado oposiciones y concursos de ascenso para el PAS coincidiendo con estas elecciones porque consideran que resta "independencia" de voto. Otros candidatos, como Jos¨¦ Iturmendi, Estos mismos candidatos, dicen adem¨¢s que el actual gerente de la universidad, Dionisio Ramos, est¨¢ apoyando la candidatura de Teodoro Gonz¨¢lez Ballesteros. Ramos aclara que esas oposiciones son anuales desde hace cuatro a?os y que siempre se realizan entre enero y julio. Y a?ade que - con independencia de que ¨¦l est¨¦ a favor, por amistad y confianza, de alg¨²n candidato- no ha "hecho campa?a por ninguno".

Pero hay un aspecto en el que todos los candidatos y el propio rectorado coinciden: la complejidad de poner en marcha un sistema electoral por sufragio universal directo ponderado para una universidad y la cantidad de medios que ser¨ªan necesarios (muy superiores a los que disponen) para tener la garant¨ªa de que los mensajes han llegado a todos los electores.