Participaci¨®n y derechos
IU apoya su programa en el protagonismo real de los ciudadanos
Izquierda Unida no ha querido en esta campa?a electoral dejar a un lado el no a la guerra de Irak, las movilizaciones por otra globalizaci¨®n, el rechazo al nuevo orden mundial o la huelga general. No s¨®lo sus l¨ªderes y candidatos se refieren cada d¨ªa a estos temas, sino que son el punto de partida del programa marco electoral para Andaluc¨ªa. Desde la misma presentaci¨®n del documento -donde se menciona la pol¨ªtica de George Bush y la Cumbre de Johannesburgo- hasta el ¨²ltimo de sus apartados, la cr¨ªtica a las pol¨ªticas neoliberales y la desigualdad social, as¨ª como la reivindicaci¨®n de los derechos humanos y ciudadanos constituyen los ejes b¨¢sicos.
IU defiende un nuevo modelo de ciudades que parte de la participaci¨®n de los vecinos en todos los ¨¢mbitos locales, y evitar de esta forma la concentraci¨®n del poder en los alcaldes y comisiones de gobierno. Los ciudadanos no son electores, tienen criterio y como medidas concretas IU propone realizar regularmente referendos y otro tipos de consultas, crear la figura del defensor del vecino, hacer presupuestos participativos que acerquen al ciudadano la decisi¨®n sobre las pol¨ªticas de inversi¨®n, participaci¨®n tambi¨¦n de las asociaciones (vecinos, consumidores, juveniles) en planes urban¨ªsticos, programas anuales de actuaci¨®n, equipamientos culturales, etc¨¦tera.
Para las ciudades de m¨¢s de 50.000 habitantes se hace una apuesta especial por los planes estrat¨¦gicos, que no s¨®lo consideren la dimensi¨®n f¨ªsica de un territorio -como los PGOU, que se preocupan de localizar usos de suelo y planificar infraestructuras-, sino que atiendan tambi¨¦n la complejidad socioecon¨®mica, en un proceso continuo de tomas de decisiones con la participaci¨®n de los vecinos.
- Comarcalizaci¨®n. El programa dedica un apartado a la divisi¨®n territorial de Andaluc¨ªa, como un instrumento para corregir los desequilibrios econ¨®micos. IU defiende una agrupaci¨®n voluntaria de los municipios, con criterios sociales y econ¨®micos, y no meramente administrativos, que asuman recursos y competencias de la Junta. Tambi¨¦n pide que las comarcas tengan participaci¨®n directa en el Parlamento andaluz. La coalici¨®n opina que ¨¦sta es una forma de luchar contra mancomunidades y consorcios, que muchas veces apoyan sus asociaciones ¨²nicamente en la captaci¨®n de fondos europeos y gesti¨®n de servicios, y por eso terminan conformando redes clientelares controladas pol¨ªticamente.
- Vivienda. Debe ser, seg¨²n IU, un bien al alcance de todos, como la educaci¨®n y la sanidad, y no un valor de cambio o una inversi¨®n. Como medidas de choque se propone programas de vivienda de VPO r¨¦gimen general y VPO r¨¦gimen especial que responda, al menos, al 50% de la demanda de cada municipio. Las condiciones de acceso no superar¨¢n, en ning¨²n caso, el 15% de los ingresos netos de la unidad familiar. Tambi¨¦n se quiere potenciar el acceso a la vivienda usada con planes de rehabilitaci¨®n, y crear bolsas de viviendas sociales en alquiler, equivalentes al 5% del parque residencial, en los pr¨®ximos 4 a?os. El desarrollo sostenible con energ¨ªas renovables y la disminuci¨®n del tr¨¢fico son otros vectores principales.
- Seguridad y derechos. Es, con diferencia, el cap¨ªtulo m¨¢s largo. Comienza con la premisa de que la inseguridad es fruto del desempleo, la pobreza, la xenofobia o las drogas, y que el modelo de seguridad de IU consiste en buscar un equilibrio entre el derecho a la seguridad y el derecho a la libertad, un binomio indivisible. Tras analizar pormenorizadamente la criminalidad, b¨¢sicamente IU propone actuar en sus causas y coordinar al m¨¢ximo las fuerzas de seguridad para avanzar hacia un modelo desmilitarizado con otros cuerpos de protecci¨®n y salvamento. Los tres ¨¢mbitos de actuaci¨®n son el Estado, las polic¨ªas auton¨®micas y las locales, que deber¨ªan ampliar competencias por su capacidad para la integraci¨®n social.
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