Un viaje sin perspectivas de continuidad

El programa cient¨ªfico de la Agencia Europea del Espacio (ESA), pese a los apuros financieros end¨¦micos que padece, camina siempre en un marco estrat¨¦gico en el que los observatorios que se van situando en ¨®rbita se complementan, y los cient¨ªficos tienen una referencia acerca de qu¨¦ equipos pueden esperar en el futuro para sus investigaciones. En el caso de Marte no hay ning¨²n proyecto en marcha de la ESA para despu¨¦s de Mars Express, aunque s¨ª rondan ideas misiones en algunos pa¨ªses miembros, como Francia e Italia. En el ¨¢mbito planetario, Europa planea una misi¨®n a Venus y otra a Mercurio, as¨ª como colaboraciones con los viajes a Marte de otras agencias, pero no otra misi¨®n propia hacia ese destino.

Incluso para sacar adelante Mars Express y el m¨®dulo Beagle2 ha habido que hacer muchas c¨¢balas en el seno de la agencia europea, hasta el punto de que al final la ESA ha tenido que hacerse cargo de parte de la financiaci¨®n del m¨®dulo de descenso porque el equipo brit¨¢nico que se hab¨ªa responsabilizado ha sufrido estrecheces que casi derrumban el proyecto.

Frente a la excepcionalidad de esta misi¨®n marciana europea, la NASA aparc¨® en los a?os noventa los estudios de fara¨®nicos viajes tripulados a Marte que tanto gustaban a responsables pol¨ªticos y a investigadores entusiastas con escaso sentido del realismo financiero, y est¨¢ cumpliendo un plan de investigaci¨®n con robots en el planeta rojo a medio plazo, un programa modesto pero continuo. Pese a los recortes presupuestarios de la NASA, la inversi¨®n estadounidense en la aventura espacial es muy superior a la europea.

Desde 1997, cuando EE UU relanz¨® su programa de investigaci¨®n de Marte con naves autom¨¢ticas, las misiones de la NASA han salido puntualmente cada 26 meses en las ocasiones favorables de viaje desde la Tierra al planeta rojo. Ahora, dos veh¨ªculos todo terreno con un arsenal de experimentos geol¨®gicos y de b¨²squeda del rastro del agua, est¨¢n listos para el despegue. El primero saldr¨¢ al espacio el pr¨®ximo 8 de junio, el otro a finales del mismo mes o principios de julio. Llegar¨¢n a Marte en enero de 2004, poco despu¨¦s que Mars Express.

La NASA ya est¨¢ elaborando las siguientes misiones, en un programa que debe desembocar en la pr¨®xima d¨¦cada con un viaje de ida y vuelta -a¨²n no aprobado ni dise?ado- para traer a la Tierra muestras del planeta rojo.