Emilio Bot¨ªn no se plantea dimitir de la presidencia del SCH pese a la imputaci¨®n

El presidente del SCH, Emilio Bot¨ªn, no se plantea dimitir de su cargo a pesar de que est¨¢ a las puertas del juicio oral del caso de las cesiones de cr¨¦dito, lo que le imputa a ¨¦l y al consejero Rodrigo Echenique, junto a otros ex directivos de la entidad, por delito fiscal y falsedad documental. Fuentes del banco afirmaron que "no habr¨¢ dimisi¨®n temporal ni definitiva" porque la legislaci¨®n del Banco de Espa?a y la de Estados Unidos no lo exigen. Para el SCH, esta situaci¨®n supone la apertura de un nuevo frente judicial cuando todav¨ªa no est¨¢n cerrados los referentes a los pagos de Amus¨¢tegui y Corc¨®stegui.

El Santander Central Hispano se aferr¨® a la legislaci¨®n espa?ola y la normativa interna de la entidad para afirmar que "no habr¨¢ dimisiones". Emilio Bot¨ªn (Santander, 1934), adem¨¢s de presidente del SCH, es consejero de Bankinter y del Royal Bank of Scotland. Rodrigo Echenique (1946), que era consejero delegado del Banco Santander cuando se comercializaron las cesiones, es uno de los principales consejeros del banco, ya que pertenece a la comisi¨®n ejecutiva, principal ¨®rgano de gesti¨®n, as¨ª como a cuatro comisiones m¨¢s. Tambi¨¦n es consejero de NH Hoteles.

Diferentes fuentes comentaron ayer la posibilidad de una dimisi¨®n temporal de Emilio Bot¨ªn, que ceder¨ªa el puesto a su hermano Jaime Bot¨ªn (Santander, 1936), vicepresidente primero, hasta que se resuelva el caso. El banco descart¨® tajantemente esta posibilidad.

Los estatutos del consejo dicen que "en caso de ausencia, imposibilidad o enfermedad del presidente, sus funciones ser¨¢n desempe?adas por el vicepresidente, o el vicepresidente primero" (Jaime Bot¨ªn) "en el caso de que hubiera m¨¢s de uno".

Durante el periodo de copresidencia (de 1999 a 2002), Jaime Bot¨ªn era el ¨²nico que pod¨ªa asumir la presidencia del banco si algo le suced¨ªa a su hermano Emilio, por delante del ex copresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Amus¨¢tegui y del ex vicepresidente ?ngel Corc¨®stegui, lo que denota la confianza depositada en ¨¦l. Hasta el 20 de marzo de 2002, Jaime Bot¨ªn era presidente de Bankinter, entidad controlada por su familia, y pas¨® a ser asesor del consejo. Su puesto lo ocup¨® Juan Arena, que sigue en el cargo.

Reputaci¨®n

Tambi¨¦n el Estatuto del Consejero establece que ¨¦stos pondr¨¢n su cargo a disposici¨®n del consejo "en los casos que puedan afectar negativamente al funcionamiento del consejo o al cr¨¦dito y reputaci¨®n de la sociedad y, en particular, cuando se hallen incursos en alg¨²n supuesto de incompatibilidad o prohibici¨®n legalmente prevista".

La legislaci¨®n del Banco de Espa?a establece que "no se considerar¨¢ que hay falta de honorabilidad sobrevenida por la mera circunstancia de que, estando en el ejercicio de su cargo, un consejero sea inculpado o procesado por alguno de los delitos mencionados en el apartado 2 anterior".

Ese apartado 2 hace referencia a los que considera el Banco de Espa?a que no tienen la "honorabilidad" necesaria para poder fundar un banco. As¨ª, no son honorables "quienes tengan antecedentes penales o se encuentren procesados o se hubiera dictado auto de juicio o apertura oral por delitos de falsedad, contra la Hacienda P¨²blica, blanqueo de capitales, violaci¨®n de secretos y malversaci¨®n de caudales p¨²blicos".

En Estados Unidos, la legislaci¨®n tampoco exige la dimisi¨®n por el hecho de estar imputado. Lo cierto es que las leyes de Estados Unidos son de una gran complejidad y depende del tipo de irregularidad cometida para que sea la Reserva Federal (Fed), el Tesoro (similar a la Hacienda en Espa?a), la Securities Exchange Commission (SEC) o la Bolsa de Nueva York (NYSE), la que se ocupe del caso. En principio, los bancos son controlados por la Fed. Fuentes del NYSE consultadas ayer afirmaron que, en principio, "no har¨ªan nada contra el banco mientras cumpliera los requerimientos para estar cotizado y proporcionara toda la informaci¨®n a la que est¨¢ obligado", informa Ricardo M. de Rituerto.

Al margen de las dimisiones, la inquietud ayer en la alta direcci¨®n era palpable. La imputaci¨®n supone abrir un nuevo frente judicial, sin que el de las indemizaciones de Amus¨¢tegui y los cobros de Corc¨®steguie est¨¦n cerrados, as¨ª como un varapalo a la campa?a de Buen Gobierno que est¨¢ desarrollando el SCH en los ¨²ltimos meses. Esta actuaci¨®n se apoya en que el "principio rector de su actividad es la defensa de su integridad y reputaci¨®n y el cumplimiento estricto con la normativa legal y reglamentaria y con los est¨¢ndares ¨¦ticos aplicables en los mercados". Otras fuentes recuerdan que la sola imputaci¨®n les cost¨® el puesto a los consejeros del BBVA en el caso de las cuentas secretas de los para¨ªsos fiscales.