Straw desv¨ªa a Downing Street la responsabilidad del informe falso sobre las armas
El ministro brit¨¢nico de Exteriores, Jack Straw, se lav¨® ayer las manos y desvi¨® hacia el director de Comunicaci¨®n de Downing Street, Alaistair Campbell, la responsabilidad del llamado dodgy dossier, el informe falso sobre Irak divulgado por el Gobierno en enero y en el que se incluy¨® material acad¨¦mico obsoleto extra¨ªdo de Internet sin permiso de su autor, un estudiante.
Straw, que compareci¨® ante la Comisi¨®n de Exteriores de los Comunes que investiga el papel del Gobierno en los documentos en que se bas¨® para legitimar la guerra en Irak, defendi¨® en cambio el primer informe. Es en este primer informe, publicado en septiembre de 2002, donde aparece el dato de que Sadam Husein pod¨ªa lanzar en 45 minutos un ataque con armas de destrucci¨®n masiva. Straw defendi¨® la exactitud de este primer informe, cuya autor¨ªa ha sido reivindicada por los servicios secretos y cuya posible manipulaci¨®n ser¨ªa pol¨ªticamente mucho m¨¢s delicada que en el segundo informe.
El ministro rechaz¨® las acusaciones de que el Gobierno exager¨® el peligro representado por Sadam Husein y puntualiz¨® que nunca dijo que ¨¦ste constituyera una amenaza "inminente o inmediata", sino que se trataba de un peligro "en curso y serio". Tras la comparecencia de ayer, la presi¨®n pol¨ªtica se concentra en Alaistair Campbell, el hombre que ha dirigido la presentaci¨®n ante el p¨²blico de la carrera pol¨ªtica de Tony Blair desde 1994, y que tutel¨® la elaboraci¨®n del informe de enero pasado.
Campbell, que en el primer Gabinete de Blair ocup¨® el cargo de portavoz del Gobierno y desde la segunda legislatura fue elevado a director de Comunicaci¨®n, se neg¨® en principio a comparecer ante la Comisi¨®n de Exteriores, pero acept¨® presentarse al recibir el segundo requerimiento de los diputados.
Bochorno de la polic¨ªa
Jack Straw no fue el ¨²nico peso pesado del Gobierno de Blair que pas¨® ayer apuros en la C¨¢mara. El titular de Interior, David Blunkett, compareci¨® ante el pleno para dar cuenta del bochorno vivido por la polic¨ªa el s¨¢bado por la noche, cuando un intruso se col¨® en la fiesta de cumplea?os del pr¨ªncipe Guillermo en el castillo de Windsor. Blunkett admiti¨® que el intruso estuvo "inaceptablemente cerca" del pr¨ªncipe y se declar¨® "consternado" por el incidente.
La prensa brit¨¢nica se ha tomado con extraordinaria seriedad ese incidente, a pesar de que el intruso, un actor que parodia a Osama Bin Laden grotescamente vestido de mujer barbuda, no ten¨ªa intenciones violentas. Pero los medios destacan que, si se hubiera tratado de un terrorista suicida, podr¨ªa haber acabado en un instante con la vida de tres generaciones de la familia real brit¨¢nica. A la fiesta asist¨ªa la reina Isabel, su hijo y heredero, Carlos de Inglaterra, y los dos hijos de este, Guillermo y Enrique, acompa?ados de la casi totalidad de los Windsor y 300 invitados.
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