La Generalitat deja fuera del concurso de m¨®viles a su actual proveedor, Vodafone

La Administraci¨®n catalana, que con sus 6.500 m¨®viles figura entre los grandes clientes por los que los operadores batallan con u?as y dientes en el maduro mercado espa?ol de la telefon¨ªa m¨®vil, va a cambiar de proveedor. La Generalitat excluy¨® del concurso para adjudicar los servicios de telefon¨ªa m¨®vil, por valor de 17 millones de euros y desde ayer ya pol¨¦mico, a su proveedor Vodafone. A la oferta de Vodafone, que pierde a uno de sus principales clientes y del que ingresa cuatro millones al a?o, le faltaba, ante la extra?eza general, un mero certificado. Ya s¨®lo compiten Telef¨®nica y Auna.

Nadie pod¨ªa ayer explicarse las razones de la Generalitat, que quiso cumplir a rajatabla con las bases de su concurso, y, sobre todo, el may¨²sculo resbal¨®n jur¨ªdico de Vodafone, que le ha dejado sin uno de sus principales clientes en Espa?a por no haber renovado un certificado de Hacienda. Desde el aterrizaje de Francisco Rom¨¢n como consejero delegado el pasado 1 de abril, la compa?¨ªa ha iniciado una reorganizaci¨®n de la c¨²pula directiva con el fin de potenciar el departamento comercial. La propia Administraci¨®n catalana expres¨® "sorpresa" y rechaz¨® de plano, cualquier vinculaci¨®n entre la exclusi¨®n y el megaapag¨®n que Vodafone sufri¨® el pasado febrero y que dej¨® sin servicio varias horas a 8,7 millones de abonados.

Las bases del concurso de m¨®viles especificaban que era "motivo de exclusi¨®n" para una empresa presentarse con una oferta omitiendo el certificado que da la junta consultiva de contrataci¨®n de Hacienda, un papel requerido habitualmente en los concursos p¨²blicos y que clasifica a las empresas seg¨²n su tipo de actividad. En abril, justo despu¨¦s de que Rom¨¢n ascendiera al cargo de consejero delegado en sustituci¨®n de John de Wit, caduc¨® el certificado de Vodafone. Y no fue hasta mediados de junio cuando ¨¦sta lo solicit¨® de nuevo.

Vodafone eludi¨® plantear lo ocurrido ayer como un acto de discriminaci¨®n, pero subray¨® con el mismo ¨¦nfasis que este "problema formal" no merma de ning¨²n modo su "capacidad t¨¦cnica ni de servicio" y que, al margen de estudiar un posible recurso, quiere "explorar todas las v¨ªas para continuar trabajando con la Generalitat". Un portavoz de la compa?¨ªa remarc¨® que exist¨ªan discrepancias de interpretaci¨®n sobre cu¨¢ndo hay que tener el certificado de la discordia: si cuando se abren las plicas o en el momento de la adjudicaci¨®n, que se resolver¨¢ en tres semanas. En cualquier caso, era un mero tr¨¢mite.

La Generalitat es cliente de la antigua Airtel desde hace seis a?os. Ayer, el responsable del Centro de Telecomunicaciones, Manel Feu, asegur¨® que est¨¢ "satisfecha" del servicio de Vodafone, cuyo contrato le supone pagar unos precios un 30% por debajo de los del mercado. "No pod¨ªamos omitir que Vodafone no ten¨ªa el papel. Telef¨®nica y Auna podr¨ªan impugnar el concurso y ganar", explic¨®.

La Generalitat no es la ¨²nica de las administraciones, atractivas para los operadores porque gastan mucho y garantizan un contrato a largo plazo, que tienen como cliente a Vodafone. La empresa, que en Espa?a cuenta con m¨¢s de nueve millones de clientes, tambi¨¦n atiende a la Junta de Andaluc¨ªa y al Gobierno vasco, adem¨¢s de contar con una cartera de 150.000 compa?¨ªas. Los resultados del grupo, que en el ¨²ltimo ejercicio fiscal redujo un 39,2% las p¨¦rdidas hasta los 13.570 millones, no desglosa resultados por pa¨ªses. La filial espa?ola, con una cuota de mercado del 26,3%, s¨ª indica que sus ingresos crecieron un 16,3%.

Embrollo

Sin ganas de pronunciarse sobre el embrollo, Telef¨®nica M¨®viles y Auna, que en su reciente reorganizaci¨®n cre¨® una unidad espec¨ªfica para Grandes Clientes, se frotan las manos. Aunque el precio s¨®lo pesa un 30% en la valoraci¨®n, fuentes conocedoras de las ofertas estimaron que los precios de Auna est¨¢n en torno a un 5% por debajo de los de Telef¨®nica. El primer operador espa?ol, que con sus precios por los suelos se llev¨® en 2001 la conexi¨®n con banda ancha de los hospitales y escuelas dependientes de la Generalitat en otro concurso no menos pol¨¦mico, intervenci¨®n del regulador incluida, subray¨® su "gran inter¨¦s" por la Generalitat.

Auna, que hasta ahora ha mantenido una relaci¨®n fr¨ªa con el Gobierno catal¨¢n, dijo contemplar el concurso "con buenas opciones". El concurso, por cuatro a?os y valorado en 17 millones, obliga a las empresas a invertir para que se garantice la cobertura de la red b¨¢sica de Catalu?a.