"Veo a Beloki ganando m¨¢s de un Tour"

La ca¨ªda de Beloki no es el primer incidente que sufre el ONCE-Eroski en el Tour, una carrera que nunca ha ganado el equipo de Manolo Saiz (Torrelavega, 1959) y en la que ha padecido ca¨ªdas, desfallecimientos y abandonos varios: Jalabert, Z¨¹lle, Igor... Lo suficiente como para pensar en gafes.

Pregunta. El historial del ONCE-Eroski en el Tour es tambi¨¦n un historial de desgracias, de ca¨ªdas...

Respuesta. Tampoco pienso en eso. Tambi¨¦n hemos hecho bien algunos Tours, sin problemas, pero es verdad que ha habido hechos hist¨®ricos que han marcado a nuestro equipo en el Tour. Jalabert, Z¨¹lle, Galdeano, Beloki... Son circunstancias que tambi¨¦n nos hacen m¨¢s fuertes, que el equipo se cohesione un poco m¨¢s.

"Todo el mundo tiene envidia de nuestro equipo, y por ello tienes que pagar un peaje"

"En Alpe d'Huez hubo 700.000 aficionados, para llenar siete Bernab¨¦us en siete Madrid-Bar?a"

P. Pero incluso, los momentos de alegr¨ªa, grandes Tours, como el del 95, se ven te?idos por el lado negativo. Entonces hasta se les acus¨® de antiespa?oles por poner en peligro el quinto Tour de Indurain. El a?o pasado, el maillot de Igor lo mancharon con las acusaciones de dopaje. En el 98, el ONCE fue el equipo espa?ol que m¨¢s se vio afectado por el caso Festina...

R. Todo el mundo tiene envidia de nuestro equipo. Saben que es el mejor organizado, el que mejor estructura tiene, tiene unos sponsors detr¨¢s con una fidelidad impresionante, saben que somos el sin¨®nimo de la modernidad y de la inquietud por hacer cosas nuevas... Y por todo ello pagas un peaje. En este mundillo de, hasta cierto punto, quiero pero no puedo, todas esas cosas hay que pagarlas.

P. ?Nunca ha pensado, entonces, en la existencia de un gafe?

R. No, que va. No creo, en un principio, en la mala suerte.

P. Pero se ver¨¢ afectado de un cierto fatalismo...

R. S¨ª, claro. Un fatalismo con la historia de la carrera, s¨ª. Mire, por ejemplo, este Tour de 2003, del Centenario. Somos el ¨²nico equipo que nos hemos preparado para hacer algo ¨²nico para el centenario. Hemos creado un maillot especial, una bicicleta muy especial... Lo hemos preparado todo bien, con toda la ilusi¨®n. Hemos venido al Tour muy tranquilos, el a?o que m¨¢s. Hasta hemos pasado de los hoteles malos. Quer¨ªamos mirar el Tour de una manera diferente para ver si as¨ª ten¨ªamos un intercambio de afectos que, por desgracia, no se ha producido. Pero creo que, de todas maneras, hemos ganado una batalla muy importante, la batalla de que por fin en Espa?a a Joseba Beloki, despu¨¦s de tres a?os, se le reconozca. Y eso lo he visto en la prensa, el reconocimiento de que somos un equipo especial. Nuestra historia est¨¢ marcada por ca¨ªdas y por desgracias, pero tambi¨¦n por hechos humanos importantes, como que Jacksche y Azevedo se pararan por la ca¨ªda de Beloki, dejando de lado sus aspiraciones.

P. ?Cu¨¢ndo los a?os Indurain, usted decidi¨® considerar al Tour un asunto secundario visto que no se pod¨ªa contra el navarro?

R. Digamos, mejor, que yo he tenido un privilegio importante. El equipo tiene 15 a?os de historia y los 15 a?os hemos estado en lo m¨¢s alto. Eso es muy dif¨ªcil. Y hemos sabido estar en lo m¨¢s alto en la ¨¦poca de Indurain ganando much¨ªsimas cosas y ganando cuatro Vueltas a Espa?a. En la ¨¦poca de Armstrong hemos subido dos veces al podio y le hemos plantado cara este a?o, y hemos ganado otras cosas. Y pocos equipos del mundo, aunque tengan much¨ªsima tradici¨®n, pueden decir que han estado 15 a?os al nivel m¨¢s alto del mundo. Y nosotros lo podemos decir. Y eso es un privilegio important¨ªsimo para una persona que quiere al ciclismo tanto como yo.

P. Pero su relaci¨®n con el Tour siempre ha sido un poco ambigua. Parece que no ha querido enamorarse mucho de ¨¦l...

R. Al Tour le respeto porque es la mejor carrera del mundo, y cuando miro las fotos me doy cuenta de que he vivido la gran transformaci¨®n del Tour. Y eso es una situaci¨®n de agradecer. Lo que pasa es que la gente, cuando les van bien las cosas en el Tour, dice que se enamoran del Tour. Pero yo digo que estoy enamorado del mundo del ciclismo, que es lo m¨¢s importante, pero no s¨®lo del Tour.

P. Este Tour ha tenido detalles que demuestran la diferencia entre el Tour y las dem¨¢s carreras: la etapa de Alpe d'Huez ha hecho m¨¢s por el ciclismo espa?ol que la Vuelta de Aitor, por ejemplo, y la ca¨ªda de Beloki, que ha sido noticia hasta en Pek¨ªn...

R. Eso nadie lo discute, ser¨ªa idiota no reconocerlo. El d¨ªa de la ca¨ªda, antes, ya hablaba con Beloki. 'Hubo 700.000 espectadores en Alpe d'Huez', le dije. 'Para llenar siete Bernab¨¦us', me dijo. 'No', le matic¨¦, 'para llenar siete Bernab¨¦us en siete Madrid-Bar?a'. Y eso, por desgracia, no se lo sabemos transmitir a los sponsors, viviendo directamente de ellos. En el Tour hay 23 finales de Liga de Campeones.

P. ?La figura de Beloki, un hombre Tour por naturaleza, cambi¨® vuestra filosof¨ªa respecto al Tour?

R. S¨ª, pero tambi¨¦n hemos trabajado para transformar a Beloki en un Jalabert, en un corredor m¨¢s agresivo. Se ve que hay un trabajo detr¨¢s de ¨¦l, y una influencia del equipo ONCE-Eroski y de Manuel Saiz. Y creo que de esas cosas debo sentirme muy orgulloso. Poco a poco hasta estaba empezando a querer a la Vuelta y hasta me hab¨ªa dicho que quer¨ªa este a?o el doblete Tour-Vuelta.

P. ?Y ahora?

R. El futuro del equipo pasa por el futuro de la ONCE, a quien estamos muy agradecidos por estos 15 a?os. Ha habido un cambio estructural en la empresa y creo, y as¨ª se lo pido, que deben pensar en el equipo con la cabeza, y no con el coraz¨®n. Y si est¨¢n de acuerdo en que el equipo debe seguir con su imagen, que sigan pensando en nosotros. Y si no, que sepan que siempre tenemos una admiraci¨®n impresionante por todo lo que han hecho por nosotros. Y si no formamos m¨¢s parte de su publicidad que nos permitan sentirnos parte de la ONCE como si fu¨¦ramos un ciego m¨¢s.

P. ?Su proyecto deportivo seguir¨ªa pasando por Beloki?

R. Por mi pensamiento no pasa otra cosa que Beloki, Galdeano, Contador, Davis, Rodr¨ªguez, Jacksche... todos los que tengo.

P. Merckx se parti¨® la cadera en 1970 y dijo que no hab¨ªa vuelto a ser el mismo en monta?a, aunque eso no le impidi¨® ganar cuatro Tours m¨¢s. ?Teme que Beloki no quede bien de la ca¨ªda?

R. ?Miedo? Tengo que hablar con ¨¦l cuando pase todo esto, pero tengo un convencimiento. Todas las grandes transformaciones de los ¨²ltimos a?os se han dado despu¨¦s de ca¨ªdas importantes. Jalabert tuvo una transformaci¨®n enorme despu¨¦s de Armenti¨¨res, Armstrong es otro tras el c¨¢ncer... Y a m¨ª me gustar¨ªa aprovechar esta ca¨ªda para, aun si cabe, transformar a Joseba en mucho mejor. Es un reto personal importante como el que se me plante¨® el a?o de Jalabert.

P. Trabajo fisiol¨®gico y trabajo psicol¨®gico...

R. El psicol¨®gico ya lo tenemos muy avanzado. Ya hab¨ªamos dado un paso muy importante. Ahora me preocupa m¨¢s el trabajo f¨ªsico, el trabajo invisible que nadie ve. Y eso hay que empezarlo ya mismo: la rehabilitaci¨®n es parte del trabajo de futuro. Y si conseguimos eso, veo a Beloki ganando no un Tour, sino alg¨²n Tour m¨¢s.

P. ?Con 30 a?os que cumple en agosto?

R. Treinta a?os no es mala edad actualmente. Hasta los 34 o 35 se puede estar en plenitud.

P. ?Ha estudiado la ca¨ªda? ?A qu¨¦ conclusi¨®n ha llegado?

R. Es una ca¨ªda de gran premio de motos, no de ciclismo. La rueda se le qued¨® trabada en el asfalto, en la brea l¨ªquida, y al intentar corregir, ¨¦l hace un movimiento muy brusco y sale disparado hacia el lado donde no debe caer.

P. ?Iba demasiado r¨¢pido para esa curva?

R. No, no. Fren¨® por instinto, y al pillar brea se cay¨®. En 100 veces que tome esa curva no le pasar¨¢.

P. Dicen algunos que como Oca?a en su ca¨ªda de Ment¨¦, quiz¨¢s Beloki llevaba un cuadro de geometr¨ªa corta, m¨¢s nervioso y ¨¢gil para las subidas, pero menos manejable en los descensos.

R. Quien piense eso poco sabe de bicicletas. Una bicicleta m¨¢s corta se domina mejor bajando. Yo soy muy estudioso de esas cosas y de la biomec¨¢nica y lo s¨¦.