Tambores de guerra
Gaizka Arostegi (Portugalete, 1965) publica su segunda novela tras la exitosa aparici¨®n de El agote, que seg¨²n fuentes de la editorial lleg¨® a la cuarta edici¨®n. En esta ocasi¨®n, en la novela El c¨¢lido Julio del treinta y seis, y sin salirse de la senda de la novela hist¨®rica, el autor se ha interesado por la historia de un corto per¨ªodo de tiempo, que se inicia el d¨ªa de la sublevaci¨®n, en un pueblo navarro.
La llegada de un grupo de artistas a un pueblo del sur de Navarra da comienzo a la novela que desde la voz del protagonista, que entonces s¨®lo n¨ªa trece a?os, cuenta las vivencias del pueblo en un momento de enorme crispaci¨®n social. El grupo "El gran teatro de la luna" sirve de n¨²cleo de los personajes de la acci¨®n.
Libran a Luc¨ªa, antigua amada de uno de los componentes del grupo, de las iras del potentado local, lo que les pone en contacto con el pueblo sencillo y su alcalde republicano, realizan su primera representaci¨®n y en el momento en que se desata la noticia las fuerzas militares y carlistas del pueblo toman diversas medidas de venganza: incendian el campamento, matan al artista homosexual del grupo, encarcelan al padre y al amigo del protagonista, existe una amenaza de fusilamiento, pero tambi¨¦n almas bondadosas que protegen a los pocos miembros de la troupe que quedan libres, y, al fin, el ni?o tendr¨¢ un protagonismo especial en la salvaci¨®n de su padre, mientras intuye que el resto de detenidos ser¨¢n fusilados.
Ambiente de guerra civil, ambiente de venganza y violencia, pero tambi¨¦n mirada de ni?o (quiz¨¢s la t¨¦cnica m¨¢s lograda de la novela, aunque la historia se cuenta desde un presente lejano, cuando ya es adulto), con su primer enamoramiento y su primera (y sorprendente) relaci¨®n sexual. No hace falta decir que la novela recuerda a La lengua de las mariposas, y que m¨¢s que un fresco hist¨®rico ha construido una novela de g¨¦nero melodram¨¢tico y sentimental, con sus maridos despechados, apariciones inesperadas (como la de la abuela), viejas historias de amor, enredos que se entrecruzan...
La prosa lineal, de frases breves puede facilitar la lectura de una novela que se basa en el enfrentamiento entre buenos y malos, lo que lleva a trazar a algunos de los personajes en trazo grueso.
Gaizka Arostegi: El c¨¢lido Julio del treinta y seis. Abra. Ttartalo. Donostia, 2003, 149 p¨¢ginas. 13 euros.
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