Nuevos informes revelan que Blair aprob¨® destapar a Kelly como fuente de la BBC

Anticip¨¢ndose a la expectativa creada por la comparecencia del primer ministro brit¨¢nico, Tony Blair, el pr¨®ximo jueves, y fiel a su promesa de mantener la investigaci¨®n de la muerte del experto en armas David Kelly lo m¨¢s transparente posible, el juez Brian Hutton ha divulgado este fin de semana en Internet 9.000 p¨¢ginas de documentos gubernamentales confidenciales. De ellos se desprende que Blair aprob¨® la estrategia de revelar la identidad de Kelly como fuente de la pol¨¦mica informaci¨®n de la BBC sobre la exageraci¨®n de la amenaza iraqu¨ª y que dej¨® su aplicaci¨®n al Ministerio de Defensa.

Una primera lectura de los cientos de minutas de reuniones, informes y correos electr¨®nicos relacionados con el caso Kelly, que han precisado de tres jornadas de trabajo para volcarlos en Internet, desvelan una operaci¨®n al m¨¢s alto nivel para amordazar al asesor del Ministerio de Defensa y ex inspector de armas de la ONU, que fue hallado muerto cerca de su casa el pasado 18 de julio. El Gobierno de Blair desconfiaba de la opini¨®n de Kelly en cuestiones relacionadas con la justificaci¨®n oficial de la guerra contra Irak -la inminencia de un ataque iraqu¨ª con armas de destrucci¨®n masiva-, y manifest¨® su preocupaci¨®n en su correspondencia interna.

En un informe de John Scarlett, presidente del Comit¨¦ de Intelegencia Conjunto, se dice que en una reuni¨®n celebrada en Downing Street con Blair y sus asesores el pasado 8 de julio hubo un acuerdo general de que el nombre de Kelly llegar¨ªa a ser p¨²blico de forma inevitable. En su nota, Scarlett escribe: "Estamos preparados para la cr¨ªtica por no haber sido claros sobre la existencia de una posible fuente. No queda mucho tiempo". Ese mismo d¨ªa, Blair, su director de comunicacion, Alastair Campbell y el principal asesor del primer ministro, Jonathan Powell, decidieron emitir una declaraci¨®n de prensa sobre los contactos con los medios de Kelly.

Las notas de Scarlett sobre la reuni¨®n contin¨²an: "?Si el nombre del Dr. K llega a ser p¨²blico, ser¨¢ criticado el Gobierno por ponerle bajo una enorme presi¨®n? PM repite que el MoD (Ministerio de Defensa] debe hacerse cargo y seguir sus procedimientos".

Resistencia a la polic¨ªa

Horas m¨¢s tarde, el Ministerio de Defensa hizo publica la prevista declaraci¨®n de prensa sin nombrar a Kelly, pero el ministerio confirm¨® su nombre a los periodistas 24 horas m¨¢s tarde. Otros documentos revelan las resistencia que opuso el Gobiernro brit¨¢nico a los intentos por parte de Scotland Yard de interrogar al cient¨ªfico. Detectives de Scotland Yard investigaban la filtraci¨®n de un documento confidencial a Andrew Gilligan, el mismo periodista de la BBC que bas¨® su reportaje sobre manipulaci¨®n pol¨ªtica del informe de Irak en las confidencias de Kelly. En esta ocasi¨®n, el documento apuntaba hacia la ausencia de pruebas sobre la presunta colaboraci¨®n de Al Qaeda con Sadam. La identificaci¨®n de Kelly como fuente de la BBC recondujo las sospechas de la polic¨ªa hacia el cient¨ªfico.

El ministerio de Defensa puso en marcha un plan para entorpecer las diligencias policiales en caso de que Kelly fuera detenido. En correos electr¨®nicos entre altos funcionarios ministeriales, incluido el director de personal Richard Hatfield, se pide "una valoraci¨®n del da?o y del impacto de una declaraci¨®n si Kelly fuera detenido". La conclusi¨®n se desprende en un correo electr¨®nico del 7 de julio: "Hatfield confirma que debemos resistir cualquier intento de la polic¨ªa de interrogar a Kelly o a cualquier persona que lo haya entrevistado", escribe John Cochrane, de la Unidad de Seguridad del Ministerio de Defensa.

Las nuevas revelaciones aumentan m¨¢s si cabe el inter¨¦s por los testimonios que prestar¨¢n esta semana Blair, Scarlett y el ministro de Deefnsa, Geoff Hoon. Blair acude al tribunal con la opini¨®n p¨²blica en contra. Seg¨²n un sondeo publicado ayer en The Sunday Telegragh, el 56% de los brit¨¢nicos culpa al Gobierno del aparente suicidio de Kelly. El 67% piensa que el Ejecutivo laborista minti¨® respecto a las armas de destrucci¨®n masiva de Irak y una mayor¨ªa sugiere que Hoon y Campbell deber¨ªan dimitir.