Marta est¨¢ como un tiro
La palentina, finalista en los 5.000 metros, deja atr¨¢s sus miedos en el momento justo
Lo ¨²ltimo que se sab¨ªa de Marta Dom¨ªnguez era preocupante. Desde luego, no invitaba a ninguna clase de optimismo, cosa rara en la palentina, que funciona como un reloj. Disput¨® el 1.500 de San Sebasti¨¢n con un resultado nefasto: 4m 16s, un registro que la remit¨ªa a su etapa juvenil. Acudi¨® poco despu¨¦s a la reuni¨®n de Z¨²rich y se retir¨®. No hab¨ªa noticias de la atleta que el pasado a?o gan¨® la final de los 5.000 metros en los Campeonatos de Europa de M¨²nich, de la atleta que jam¨¢s se rinde. Tampoco se ha rendido esta vez. En Par¨ªs convirti¨® los peores s¨ªntomas en una actuaci¨®n espectacular. Pas¨® a la final con tanta seguridad y soltura que nuevamente se puede especular con una medalla. Ella lo sabe, aunque no lo dice. Pero a Marta le suele delatar su sonrisa, que era la de una mujer euf¨®rica tras su semifinal. Y hay particularidades a?adidas: la rumana Gabriela Szabo dio una p¨¦sima imagen, la rusa Olga Yegorova no se clasific¨® para la final, la et¨ªope Adere no es invencible despu¨¦s de lo que mostr¨® en su prueba. El reto no es sencillo, pero es posible.
"O aguantas o te vas a casa, pens¨¦. Y yo no me voy a casa f¨¢cilmente"
"Mi entrenador [Mariano G¨®mez] me dijo que estaba bien. Y no se equivoca casi nunca", coment¨® tras la semifinal. Fue la cuarta, bati¨® su marca personal (14m 48,33s) y se guard¨® algo para la final. Admiti¨®, en todo caso, que estaba sorprendida por el resultado. "No esperaba encontrarme tan bien. Si hace una semana me dicen que puedo correr a este ritmo, no me lo habr¨ªa cre¨ªdo. Quiz¨¢ el problema residi¨® en el exceso de entrenamiento. Hab¨ªa que bajar un poco la carga y la cosa ha funcionado". A Marta le sal¨ªan todas las cuentas. Dijo que se hab¨ªa tapado un poco en los ¨²ltimos 400 metros, "porque siempre conviene guardar energ¨ªas para la final y no descubrirse antes de tiempo", y se encontr¨® con noticias mejores de lo esperado. Szabo y Adere no est¨¢n tan finas como de costumbre. Son accesibles.
"Al ritmo de la semifinal, puede pasar cualquier cosa", declar¨® la atleta espa?ola. Marta Dom¨ªnguez se siente repentinamente como el pasado a?o o quiz¨¢ mejor. Durante la carrera se enfrent¨® a ritmos muy altos. "O aguantas o te vas a casa, pens¨¦. Y yo no me voy a casa f¨¢cilmente", se?al¨®. De la carrera sac¨® conclusiones. La keniana Masai, una atleta que lleg¨® a la alta competici¨®n con m¨¢s de 30 a?os, ofreci¨® una impresi¨®n inmejorable. La et¨ªope Dibaba confirm¨® la tradici¨®n de un pa¨ªs que produce fondistas sin descansos. Y la china Sun Jinyie es una estrella en potencia. "Son supermujeres, pero en la carrera quiz¨¢ tengan su momento de debilidad y se conviertan simplemente en mujeres", dijo Marta. Con la confianza habitual, se declar¨® convencida de sus posibilidades. "No hablo de referencias. La referencia soy yo". Marta vuelve, por lo tanto, a ofrecer las expectativas que acostumbra. Es dura, tenaz y no tiene miedo a la gran competici¨®n. Ha dejado atr¨¢s sus miedos y lo ha hecho en el momento justo, en los Mundiales. Y cuando Marta Dom¨ªnguez alcanza su plenitud es quiz¨¢ la atleta m¨¢s fiable de Espa?a. Lo saben los aficionados, lo saben sus rivales y lo sabe ella.
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