"La arquitectura es percepci¨®n de la vida"
Tiene la fijeza nerviosa del p¨¢jaro. El arquitecto Jacques Herzog (Basilea, 1950) y su socio Pierre de Meuron, premio Pritzker 2001, est¨¢n en el cogollo del emp¨ªreo edificio contempor¨¢neo. Autores de la exitosa Tate Modern de Londres, y con encargos para los pr¨®ximos a?os tan espectaculares como el estadio ol¨ªmpico de Pek¨ªn para los Juegos de 2008, est¨¢n realizando tres obras en Espa?a: el edificio emblema del F¨°rum Universal de les Cultures Barcelona 2004; el Museo ?scar Dom¨ªnguez, un nuevo muelle y la reforma de la plaza de Espa?a en Santa Cruz de Tenerife, y la reconversi¨®n de la Central El¨¦ctrica del Mediod¨ªa de Madrid en un centro cultural de la Fundaci¨®n La Caixa. "Uno sabe qui¨¦n es por el hecho de estar en un lugar", argument¨® Jacques Herzog a este diario en una visita a la obra barcelonesa. "Concibo la arquitectura como percepci¨®n de la vida, como un saberse ah¨ª. Yo no tengo nada que probar, mostrar o afirmar sobre este mundo. Pero s¨ª puedo ayudar a percibir la realidad".
"La forma de un edificio la determina el azar, condicionado por el espacio y los usos"
"A veces un edificio tiene que funcionar como reclamo. Hay que convivir con el logotipo"
Defensor de la materialidad de la obra, cr¨ªtico con edificios virtuales que te alejan de ella, como el Guggenheim de Bilbao -"aunque s¨ª defiendo la virtualidad como construcci¨®n de un imaginario"-, Herzog tiene prisa por conocer el estado de las obras del edificio F¨°rum. Acompa?ado por sus colaboradores David Koch y Ascan Mergenthaler -trabajan para ¨¦l unos 170 arquitectos, entre sus oficinas de Basilea, M¨²nich, Londres y San Francisco-, invita al periodista a sumarse al paseo.
El edificio F¨°rum es un tri¨¢ngulo equilatero de 180 metros de lado suspendido de una estructura que se apoya sobre 17 pilares. El tri¨¢ngulo, que estar¨¢ recubierto por una l¨¢mina de agua de 30 cent¨ªmetros de profundidad, cobija una gran plaza p¨²blica, de 15.000 metros cuadrados, con una pendiente de un 6%, raz¨®n por la cual la altura del edificio es en uno de sus v¨¦rtices de 25 metros y en otro de apenas 12. De la estructura triangular cuelga adem¨¢s la cubierta transl¨²cida de un auditorio que queda semienterrado, con capacidad para 3.200 personas. Ah¨ª se realizar¨¢n los principales debates del F¨°rum 2004.
Pregunta. ?Por qu¨¦ ha escogido la forma de tri¨¢ngulo?
Respuesta. El espacio est¨¢ delimitado por una calle en diagonal [la Diagonal, precisamente], una ortogonal y el frente litoral. Es lo m¨¢s evidente, como un dibujo de escuela de un ni?o. Tan evidente que al principio lo encontr¨¢bamos banal. Hicimos muchos esbozos hasta que nos convencimos de que era la soluci¨®n m¨¢s inteligente. Pero si ves el edificio de cerca, no aprecias que es un tri¨¢ngulo, se adivina s¨®lo si lo recorres.
P. ?Ninguna referencia mas¨®nica?
R. En absoluto. Si acaso har¨ªa referencia a los tres ejes del F¨°rum [paz, sostenibilidad, di¨¢logo de culturas]. Pero es la situaci¨®n la que ha dictado la forma.
P. Sus ¨²ltimos proyectos para el estadio Allianz de M¨²nich o el ol¨ªmpico de Pek¨ªn son de formas redondas, como acolchadas. En Espa?a, tanto en el Caixaf¨°rum madrile?o como en el de Barcelona prefiere trabajar con prismas angulados. ?Hay razones geogr¨¢ficas en esa elecci¨®n?
R. ?Se refiere a soluciones nacionales? De ninguna manera. Si as¨ª fuera, hubi¨¦ramos hecho algo completamente diferente para Barcelona y para Madrid, pues nos consta que hay m¨¢s diferencias entre estas dos ciudades que entre M¨²nich y Pek¨ªn [r¨ªe]. Bromas al margen, lo que determina la forma de un edificio es el azar, condicionado por el territorio y el programa de usos del edificio. A lo largo de los a?os hemos elaborado una paleta de formas y nos servimos de toda ella en las diferentes obras que realizamos.
P. Tanto en Madrid como en Barcelona usted hace levitar a los edificios para dejar por debajo un espacio p¨²blico abierto.
R. Madrid y Barcelona corresponden a dos situaciones inversas, aunque las dos vienen determinadas por una fuerte demanda de espacio p¨²blico: en Madrid se trata de aliviar el abigarramiento de un casco antiguo; en Barcelona, de guarecerse ante un inmenso espacio abierto. Visto desde lejos, el edificio F¨°rum, como las torres que lo rodean
[la m¨¢s significada, el hotel alzado por ?scar Tusquets], es rid¨ªculo en una zona tan amplia. De hecho es un edificio sin fachada. A la hora de proyectarlo no nos ha influido tanto el programa de usos que tendr¨¢, sino la posibilidad de acoger a la vida ciudadana. En la plaza habr¨¢ un mercado y una capilla para bautizos y casamientos. La parte m¨¢s importante de esta obra no es la que se construye, sino el espacio dram¨¢tico que deja.
P. ?Dr¨¢matico, dice?
R. S¨ª. El edificio escenifica el encuentro de la ciudad con el mar. De ah¨ª la piel de mortero irregular, color azul a?il, muy mironiano, que lo recubrir¨¢. En el techo habr¨¢ una piscina con agua, en la que espero se detengan las aves migratorias. Por uno de los tragaluces del edificio el agua caer¨¢ a una fuente. Ah¨ª me inspir¨¦ en los patios interiores de la catedral de Barcelona, con fuentes y vegetaci¨®n abundante.
P. El programa de usos del edificio F¨°rum todav¨ªa no est¨¢ claro. Al margen de los debates en el auditorio, en el piso flotante deb¨ªa ir una de las tres grandes exposiciones, que finalmente recalar¨¢ en otro edificio. ?Es muy diferente trabajar as¨ª o hacerlo para la Tate Modern donde tuvieron claro desde un principio que quer¨ªan establecer un di¨¢logo con las obras y los artistas?
R. Es muy diferente. Cuando no hay contenidos, te los inventas t¨². En ese sentido le hablaba de dramatizaci¨®n, de lugar de encuentro de la ciudadan¨ªa con el mar. ?ste para m¨ª es el contenido del edificio.
P. Se ha criticado que la reforma del Bes¨°s rompe con la trama de Ildefons Cerd¨¤.
R. No en nuestro caso. La libertad aqu¨ª ha consistido en que el edificio levite, pero respetando la trama.
P. Esta obra est¨¢ destinada a convertirse en s¨ªmbolo del F¨°rum. ?Necesitan las ciudades simbolizaciones arquitect¨®nicas fuertes?
R. Barcelona siempre las ha tenido: la Sagrada Familia, la Pedrera. Y no me parece mal que siga teni¨¦ndolas en edificios como los de Richard Mayer [Macba] o de Jean Nouvel [Torre Agbar, en construcci¨®n].
P. Esa singularizaci¨®n, no obstante, ha contrastado con una contenci¨®n muy barcelonesa, el p¨¢nico al rid¨ªculo. Los Juegos Ol¨ªmpicos, arquitect¨®nicamente, fueron muy discretos.
R. Es cierto, como tambi¨¦n lo es que esta ciudad ama la excitaci¨®n del estilo.
P. ?No le incomoda el edificio logotipo? Su obra se est¨¢ convirtiendo en el logotipo del F¨°rum.
R. Ya, pero lo que manda de este edificio, a mi modo de ver, es la funci¨®n que cumple de lugar de encuentro. Por eso es un edificio horizontal, proyectado para la discusi¨®n, y no vertical, que remite a contenidos impuestos desde arriba. En otros casos s¨ª manda el logotipo. En la d¨¦cada de 1990 hicimos diferentes obras [un teatro en Blois, la f¨¢brica de caramelos Ricola en Mulhouse, ambos en Francia] en las que utilizamos serigraf¨ªas en las fachadas para anunciar lo que se produc¨ªa dentro. Con el logotipo hay que convivir.
Babelia
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