El gasto social en Espa?a ha bajado del 24% al 19,2% del PIB en una d¨¦cada
Un estudio concluye que crece "a ritmo acelerado" la di ferencia respecto a la media europea
Espa?a va a peor en protecci¨®n social. Cada a?o aumenta la diferencia respecto a la media de la UE. ?nicamente Irlanda destina a este fin menos porcentaje de su Producto Interior Bruto (PIB). En 1993 se consigui¨® el mayor acercamiento de Espa?a a la media de la UE. Ese a?o, Espa?a destin¨® el 24% y la UE el 28,8% del PIB. Los datos de 2000, los ¨²ltimos comparables, muestran la hondura de la brecha: mientras Espa?a dedic¨® el 20,1% del PIB, la media europea fue del 27,3%, seg¨²n recoge el estudio La protecci¨®n social en Espa?a y su desconvergencia con la Uni¨®n Europea, elaborado por dos profesores de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona. En los dos ¨²ltimos a?os ha seguido bajando hasta el 19,2% del PIB.
La diferencia del porcentaje del PIB europeo destinado a protecci¨®n social respecto a Espa?a aument¨® de un 4,8% en 1993 a un 7,2% en 2000. "Espa?a, m¨¢s que converger socialmente, lo que est¨¢ haciendo es alejarse de la media de la UE cada vez m¨¢s y a un ritmo acelerado". ?sta es la idea que repite una y otra vez el catedr¨¢tico de Pol¨ªticas P¨²blicas de la Universidad Pompeu Fabra, Vicen? Navarro, coautor del estudio junto a ?gueda Quiroga, coordinadora del Programa en Pol¨ªticas P¨²blicas y Sociales de la UPF. Navarro explica que el objetivo de acercarse al d¨¦ficit cero ha tenido su v¨ªctima principal en la protecci¨®n social: sanidad, invalidez, vejez, familia, desempleo, vivienda y exclusi¨®n social.
Este catedr¨¢tico lamenta que el Gobierno se regodee de que est¨¢ muy cerca del lograr el d¨¦ficit cero y de asegurar que se vive en una ¨¦poca de bonanza econ¨®mica, y lo haga a costa de disminuir el gasto en protecci¨®n social, donde Espa?a est¨¢ muy lejos de los pa¨ªses que lideran las estad¨ªsticas. "En ocasiones los pol¨ªticos utilizan los problemas de gasto p¨²blico de Francia o Alemania para apuntarse tantos, pero estos pa¨ªses est¨¢n siempre muy por delante de Espa?a en cuanto a servicios sociales", recuerda. Alemania destin¨® en 2000 el 29,5% del PIB a gasto social y Francia el 29,7%. Espa?a s¨®lo el 20,1%, mientras que Suecia, el pa¨ªs que lidera esta estad¨ªstica, emple¨® el 32,3% del PIB. Francia ocupa el segundo lugar y Alemania el tercero. A pesar de sus crisis econ¨®micas, el gasto social tanto de Francia como Alemania no ha disminuido de forma alarmante como ha pasado en Espa?a desde 1993. En Alemania ha crecido y en Francia ha bajado ¨²nicamente un punto porcentual, pasando del 30,7% del PIB en 1993 al 29,7% de 2000.
Navarro desmiente que la disminuci¨®n del gasto social se deba al mayor crecimiento del PIB en Espa?a en comparaci¨®n con otros pa¨ªses de la UE. Para ello utiliza el gasto por habitante, un indicador donde Espa?a
ocupa el pen¨²ltimo lugar, tras Portugal. En esta l¨ªnea, Navarro, mediante un c¨¢lculo que homologa en unidades el distinto poder adquisitivo en pa¨ªses de la UE, muestra que el gasto de Espa?a en el a?o 2000 represent¨® el 60% del que realizaron de media los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea (3.713 unidades frente a 6.155). Del mismo modo, el investigador establece que el crecimiento medio europeo del gasto por habitante fue superior al espa?ol (1.500 unidades frente a 650).
"El crecimiento econ¨®mico va al margen del social en Espa?a. El gasto social no s¨®lo deber¨ªa crecer al mismo ritmo que el crecimiento econ¨®mico, sino por encima de ¨¦ste para igualarse a la media de la UE", dice Navarro. De momento el objetivo est¨¢ lejos de conseguirse. El catedr¨¢tico lamenta que ese crecimiento de la riqueza no repercuta directamente en la mejora de vida de los ciudadanos.
Secuelas de la dictadura
El estudio reconoce que Espa?a part¨ªa con una seria desventaja en protecci¨®n social debida a la fuerte austeridad en este campo durante la dictadura. En 1975, el gasto p¨²blico en protecci¨®n social era s¨®lo un 14% del PIB mientras que la media de la UE era ya de un 22,9%. La llegada de la democracia supuso la creaci¨®n del Estado del Bienestar. Hubo un crecimiento muy significativo en este terreno durante la d¨¦cada de los ochenta, alcanzando su punto m¨¢ximo en 1993 con el 24% del PIB. Desde entonces, las diferencias respecto a la media de la UE no dejan de aumentar. El objetivo de acercarse al d¨¦ficit cero que estableci¨® el Tratado de Maastricht, tuvo sus efectos inmediatos en Espa?a, lamenta Navarro.
En 1993 empez¨® la disminuci¨®n del gasto social, y se agudiz¨® con la llegada del PP al Gobierno, en 1996. Esta disminuci¨®n no parece tener l¨ªmites. En 1996 se destin¨® el 21,9% del PIB, en 1997 fue el 21,2%, en 2000 el 20,1% y en 2002 el 19,2%, precisa Navarro. En los distintos puntos que se incluyen en la protecci¨®n social, Espa?a aparece en la cola de todos ellos, excepto en las prestaciones por desempleo, detalla el informe. Luxemburgueses, daneses, suecos, austriacos y franceses son los ciudadanos a los que sus Gobiernos destinan m¨¢s dinero por habitante.
Los ¨²ltimos de la fila en ayuda a la familia
Espa?a ocupa los ¨²ltimos lugares en todas las estad¨ªsticas del gasto social, pero lo que m¨¢s alarma a Navarro es la escasa ayuda a la familia. Lo resume b¨¢sicamente en dos puntos: servicios domiciliarios y escuelas de infancia para ni?os de 0 a 3 a?os. "La aportaci¨®n del Estado espa?ol en este aspecto es absolutamente rid¨ªcula", precisa. Para Navarro es una gran contradicci¨®n, dada la trascendental importancia que tiene la familia como pilar social. "Nos venden much¨ªsimo la importancia de la familia pero luego no la ayudan", lamenta.
En esta estad¨ªstica, se mire por donde se mire, Espa?a ocupa el ¨²ltimo lugar a bastante distancia del resto de pa¨ªses de la UE. El porcentaje del PIB destinado a mejorar la situaci¨®n de las familias es del 0,5% mientras que la media de la UE es del 2,1% (cuatro veces superior). El pa¨ªs que precede a Espa?a es Italia con el 0,9. Las familias m¨¢s cuidadas son las suecas, con el 3,4% .
En lo que hace referencia a las prestaciones por habitante, la situaci¨®n no mejora. Espa?a dedica cinco veces menos que la media de la UE. Los luxemburgueses son los m¨¢s cuidados en este aspecto (triplican la media europea), seguidos de daneses y suecos.
Navarro afirma que estas ayudas son fundamentales para que las mujeres puedan incorporarse m¨¢s f¨¢cilmente al mercado laboral. "Si hubiese m¨¢s asistencia para las personas mayores dependientes y para los m¨¢s peque?os, tendr¨ªamos ¨ªndices mucho m¨¢s elevados de mujeres trabajadoras, que se podr¨ªan acercar a los a los de Suecia", explica.
Para Navarro es necesario la creaci¨®n de muchas plazas en escuelas infantiles de 0 a 3 a?os con horarios de ocho de la ma?ana a siete de la tarde. S¨®lo el 8% de los menores de 3 a?os tiene plaza p¨²blica en una escuela infantil, lo que dista mucho de pa¨ªses como Dinamarca (44%), Suecia (40%) o Francia (23%). En Espa?a existe un d¨¦ficit de 430.000 plazas, precisa el informe. Tambi¨¦n considera necesario que haya una mayor asistencia en los hogares donde haya personas mayores con dependencia.
En cuanto a gasto en funci¨®n de invalidez o de vejez ocupa el pen¨²ltimo lugar. En ambos casos despu¨¦s de Irlanda.
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