Las discogr¨¢ficas EMI y Time Warner retoman su fusi¨®n

La discogr¨¢fica brit¨¢nica EMI y la estadounidense Time Warner negocian su fusi¨®n para crear el segundo grupo discogr¨¢fico mundial tras Universal. La operaci¨®n, en la que la compa?¨ªa londinense actuar¨ªa como compradora, est¨¢ evaluada en 1.300 millones de euros. Las discusiones reeditan las habidas hace tres a?os, no consumadas entonces ante las objeciones a la fusi¨®n que planteaba la Comisi¨®n Europea.

EMI, que cuenta entre su cartera de artistas con Rolling Stones, Norah Jones y Janet Jackson, y Time Warner Music (presidida por Roger Ames) con Madonna, Eric Clapton, Linkin Park, con el 13% y el 11,8% de la facturaci¨®n mundial en 2002, respectivamente, van a reeditar su intento de fusi¨®n para desbancar a Universal como segunda discogr¨¢fica mundial.

"Las discusiones se hallan en un estadio preliminar y no hay garant¨ªas de que vayan a concluir en un acuerdo aceptable para ambas partes", indic¨® EMI en un comunicado difundido en Londres, confirmando diversas informaciones publicadas el pasado fin de semana que daban cuenta del nuevo acercamiento de la brit¨¢nica a la estadounidense.

Fuentes del Ejecutivo comunitario, que ya rechaz¨® la fusi¨®n en el primer intento, manifestaron ayer que habr¨¢ que analizar los t¨¦rminos de la eventual uni¨®n y ver si han cambiado las condiciones que en 2000 produjeron su rechazo.

La discogr¨¢fica de Londres subrayaba tambi¨¦n que "las negociaciones no tienen car¨¢cter exclusivo", en alusi¨®n a las mantenidas con el grupo alem¨¢n Bertelsmann, cuyo sello BMG (Christina Aguilera y Santana) es el quinto de los cinco grandes, con el 8,2% de la facturaci¨®n, de un sector encabezado con el 23,5% por Universal (Sting, U2) seguido de Sony (Bob Dylan, Michael Jackson), con el 14,7%. Esta tanda de negociaciones a dos bandas, con EMI en el papel m¨¢s agresivo, se produce en un ambiente de depresi¨®n del negocio en todo el mundo, con ca¨ªdas promedio en la facturaci¨®n de los ¨²ltimos a?os en torno al 10% a consecuencia de la pirater¨ªa y las copias privadas.

Esta circunstancia negativa podr¨ªa contribuir decisivamente a salvar las hipot¨¦ticas objeciones de la Comisi¨®n Europea a la fusi¨®n entre la discogr¨¢fica londinense y la neoyorquina.

Hace tres a?os, ambas firmas abandonaron el plan antes de elevarlo al an¨¢lisis de la Comisi¨®n por las objeciones apuntadas por Bruselas a la creaci¨®n por EMI/Time Warner de una posici¨®n dominante colectiva en los distintos mercados europeos, donde algunos c¨¢lculos estimaban que el 85% del sector quedar¨ªa controlado por lo que ser¨ªan cuatro grandes.

Analistas del sector consideran inevitable ¨¦sta u otras fusiones para hacer frente a la crisis y estiman como factible que a medio plazo el sector discogr¨¢fico quede reducido a tres grandes majors de proporciones semejantes, tras la hipot¨¦tica absorci¨®n de la descolgada BMG por uno de los otros grandes. Favorece las perspectivas de la fusi¨®n de las discogr¨¢ficas una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE, que el a?o pasado rechaz¨® la decisi¨®n de la Comisi¨®n de no autorizar la fusi¨®n de dos grandes turoperadores porque de ir adelante se crear¨ªa un r¨¦gimen de oligopolio en el continente. El Tribunal acept¨® el principio de que el oligopolio perjudica a los consumidores, pero consider¨® que la Comisi¨®n no hab¨ªa probado suficientemente que se fuera a producir tal oligopolio negativo.

Otro factor que favorece a los pretendientes es que son complementarias, con la neoyorquina fuerte en su lado del Atl¨¢ntico y d¨¦bil en Europa y lo contrario en el caso de EMI.Adem¨¢s, la fusi¨®n es una v¨ªa para aliviar las dificultades financieras que sufren las discogr¨¢ficas, que han tenido que recurrir a dr¨¢sticos ajustes de gastos y plantillas.