El PP destituye a un jefe de bomberos por un acto de indisciplina

El concejal de Seguridad, Pedro Calvo, ha destituido a un subinspector del cuerpo de bomberos, Joaqu¨ªn S¨¢ez, por desobedecer una orden de la edil de Arganzuela, quien requiri¨® la presencia de un cami¨®n de bomberos que "echara espuma" para amenizar las fiestas del distrito. S¨¢ez se neg¨® alegando "la situaci¨®n de conflicto" que vive el cuerpo, y advirtiendo de que esa situaci¨®n les conmina a atender s¨®lo "emergencias". El relevo fue denunciado ayer por IU y confirmado por Calvo, que se defendi¨® con el argumento de que el subinspector tom¨® la decisi¨®n sin contar con sus superiores.

Los bomberos de la capital llevan semanas en guerra latente o abierta contra el gobierno municipal, del PP. A sus tradicionales reivindicaciones de mejoras laborales se sum¨® este verano la protesta contra la decisi¨®n del Ayuntamiento de obligarles a hacer guardias extraordinarias ante la escasez de plantilla durante las vacaciones. Esa protesta ha desembocado en la "apertura de expedientes a los bomberos que se han negado a trabajar en su d¨ªa de libranza", seg¨²n denunci¨® ayer el concejal de IU Julio Misiego, quien augur¨® un "oto?o caliente" para el gobierno municipal.

Misiego afirm¨® tambi¨¦n que el subinspector de extinci¨®n de incendios del cuerpo, Joaqu¨ªn S¨¢ez Murcia, fue relevado en agosto de forma fulminante porque "se neg¨® a llevar un cami¨®n para echar espuma durante las fiestas de un barrio de Arganzuela, como le hab¨ªa pedido la concejal del distrito, Eva Dur¨¢n". "El subinspector aleg¨® que la plantilla estaba ese mes bajo m¨ªnimos y que, si el Ayuntamiento les hab¨ªa obligado a hacer guardias extraordinarias, al menos no deb¨ªa exigir su presencia para algo tan poco importante como amenizar unas fiestas, porque eso restar¨ªa personal en una eventual emergencia", agreg¨® el edil de IU.

"Sin comentarios"

La orden de destituci¨®n la asumi¨® el concejal de Seguridad y Servicios a la Comunidad, Pedro Calvo, responsable m¨¢ximo del cuerpo de bomberos. Preguntado por las razones de la destituci¨®n, Calvo prefiri¨® primero "no hacer comentarios", aunque despu¨¦s matiz¨® que "cuando a alguien se le releva de su cargo es porque no hace bien su trabajo, o porque hay quien lo hacer mejor que ¨¦l".

Fuentes de la concejal¨ªa precisaron m¨¢s tarde que la destituci¨®n era inevitable porque S¨¢ez "contest¨® personalmente el 20 de agosto, por carta, a la concejal" dici¨¦ndole que no pensaba obedecer a su petici¨®n, alegando la "situaci¨®n de conflicto" que vive el cuerpo y se?alando que eso les lleva a atender ¨²nicamente emergencias. "Para empezar, esa situaci¨®n de conflicto no existe, y adem¨¢s, ning¨²n subinspector puede tomar esa decisi¨®n por su cuenta, sin consultar ni siquiera con sus superiores", indicaron estas fuentes. Los superiores de S¨¢ez Murcia son el director del servicio de bomberos, Pedro Gallardo, y el inspector jefe, Juan Redondo.

Calvo afirm¨®, sin embargo, en conferencia de prensa que en la orden de relevo no se precisa el motivo, "porque cuando se destituye a un cargo de esa categor¨ªa no es necesario aclarar la raz¨®n". Se neg¨® a explicar si el despido era una forma de castigar la indisciplina de S¨¢ez y asegur¨® que la presencia del cami¨®n de bomberos en las fiestas de la Melonera de Arganzuela, que se celebraron a mediados de septiembre, no era necesaria s¨®lo para garantizar la diversi¨®n, sino "por motivos de seguridad, porque en esos festejos hay fuegos artificiales".

Joaqu¨ªn S¨¢ez Murcia, que estaba de vacaciones cuando Pedro Calvo orden¨® su destituci¨®n y que deber¨¢ reincorporarse el pr¨®ximo 1 de octubre a otro puesto en el cuerpo de bomberos, no quiso hacer ninguna declaraci¨®n hasta no recibir la notificaci¨®n oficial de cese.

La desobediencia del subinspector y la implacable reacci¨®n del gobierno municipal constituyen el ¨²ltimo cap¨ªtulo del conflicto abierto este verano entre los bomberos y el equipo del PP. El pasado 8 de julio, el Ayuntamiento estableci¨® en una nota la obligatoriedad de las guardias extraordinarias en caso de que no se presentasen los voluntarios suficientes para cubrir las bajas estivales. Los sindicatos UGT, CC OO y CSIT amenazaron con un plante, y en los primeros d¨ªas de agosto grupos de bomberos impidieron a sus compa?eros entrar en los parques para cumplir con las guardias.

El Ayuntamiento se acogi¨®, para elaborar esa circular, a una sentencia del Tribunal Superior de Justicia que, en 1988, estableci¨® la obligatoriedad de las guardias extras cuando sea necesario para salvaguardar el "inter¨¦s p¨²blico".