Los cr¨ªticos intentan forzar un debate sobre la guerra

El congreso laborista puede dar marcha atr¨¢s hoy en su decisi¨®n inicial de no debatir en el plenario la situaci¨®n en Irak. Tras las protestas desatadas despu¨¦s de descartarse Irak como uno de los cuatro temas de actualidad a debatir, el Comit¨¦ de Disposiciones del Congreso podr¨ªa acordar hoy la celebraci¨®n de un debate de urgencia y la votaci¨®n de una resoluci¨®n.

La normativa congresual de los laboristas establece que en cada congreso se debatan s¨®lo cuatro temas de actualidad, de los que surge una resoluci¨®n de los congresistas. El domingo por la noche, los delegados votaron esa lista y decidieron que se debatiera sobre la crisis de la industria manufacturera, los derechos de los empleados, las pensiones y la sanidad. Son cuatro temas muy pr¨®ximos a los sindicatos, cuyos representantes votaron pr¨¢cticamente en bloque. Los delegados de las circunscripciones electorales, tradicionalmente m¨¢s sensibles a temas puramente pol¨ªticos, no votaron de forma coordinada, por lo que la crisis de Irak se qued¨® fuera del programa.

La exclusi¨®n del debate p¨²blico del tema m¨¢s pol¨¦mico del a?o fue considerado "un esc¨¢ndalo" por la izquierda laborista, que ve¨ªa en ello una maniobra del Gobierno para evitar lo que podr¨ªa acabar siendo una humillaci¨®n para Tony Blair. Ante el grueso de la marejada pol¨ªtica y la posibilidad de que la protesta pudiera provocar un bloqueo del orden del d¨ªa del congreso, se abri¨® el lunes por la noche la posibilidad de un debate de urgencia. La decisi¨®n ser¨¢ tomada hoy por un comit¨¦ de siete miembros.

Creciente distancia

La lista de cuatro debates aprobados revela la creciente distancia entre el Gobierno y los sindicatos. El debate sobre las pensiones puede acabar en una importante derrota para el Gobierno, porque los sindicatos apoyan una resoluci¨®n por la que el congreso exigir¨ªa una contribuci¨®n obligatoria de las empresas para complementar las pensiones de sus empleados.

El debate sobre la sanidad p¨²blica se centrar¨¢ en los pol¨¦micos hospitales-fundaci¨®n, por los que el Gobierno quiere privatizar la gesti¨®n de los hospitales m¨¢s eficientes, aunque manteniendo el principio de la sanidad gratuita. El ministro del Tesoro, Gordon Brown, ya ha recortado algunas de las ambiciones del primer ministro en esta reforma, al poner l¨ªmites a la capacidad de endeudamiento de esas fundaciones.

Brown intent¨® el lunes poner sordina a los otros dos debates, referidos a los derechos de los empleados y a la crisis de la industria manufacturera, al anunciar la toma de medidas en ambos sectores. El canciller del Exchequer reconoci¨® que no era admisible que los trabajadores pudieran enterarse de que han perdido su empleo mediante un simple mensaje de texto en su tel¨¦fono m¨®vil.