La econom¨ªa iraqu¨ª agoniza
El paro, la inflaci¨®n, la deuda y los sabotajes a la industria del petr¨®leo atenazan la fr¨¢gil situaci¨®n del pa¨ªs
"Las instituciones econ¨®micas iraqu¨ªes trabajan en la actualidad sin ninguna capacidad. No tienen ning¨²n tipo de autonom¨ªa y nuestra econom¨ªa est¨¢, seg¨²n los par¨¢metros de un Estado moderno, absolutamente muerta", se lamenta Ali Sadi Arrami, decano de la Facultad de Econ¨®micas de la Universidad de Bagdad, quien asegura que el Gobierno estadounidense manej¨® desde el principio par¨¢metros demasiado optimistas sobre la situaci¨®n iraqu¨ª, incluyendo el monto de las inversiones necesarias para reconstruir el pa¨ªs.
El Banco Mundial y Naciones Unidas han calculado en 55.000 millones de d¨®lares las necesidades de Irak para su reconstrucci¨®n, adem¨¢s de los 20.000 millones que EE UU va a destinar al mismo prop¨®sito. La producci¨®n petrol¨ªfera no ha logrado superar el mill¨®n de barriles diario, a pesar de los anuncios de que se iba a intentar llegar al mill¨®n y medio. En verano las exportaciones fueron de hecho casi inexistentes y las expectativas de ingresos por este concepto para el pr¨®ximo a?o se han rebajado de 15.000 millones de d¨®lares a 12.000 millones. Problemas de sabotajes, principalmente en los oleoductos, pero tambi¨¦n fallos en las infraestructuras, han privado al pa¨ªs de una de sus principales fuentes de ingresos. Adem¨¢s, seg¨²n la resoluci¨®n 981 del Consejo de Seguridad de la ONU, el 30% de los beneficios de esa cifra debe servir al pago de reparaciones por la primera guerra del Golfo. Y en cualquier caso, el Consejo Provisional -formado por 24 miembros iraqu¨ªes, nombrados por EE UU- no controla el 70% restante de esos ingresos, priv¨¢ndole as¨ª de cualquier poder efectivo en la vida del pa¨ªs. "Por lo menos estamos intentando que queden liberados 1.700 millones de d¨®lares en cuentas congeladas en el extranjero y nuestro representante en el Consejo de Gobierno cree que lo conseguiremos pronto", dice Latif al Saadi, del Comit¨¦ Central del Partido Comunista Iraqu¨ª.
Para Sadi Arrami, no basta con una inyecci¨®n de capital, por muy grande que sea ¨¦sta, para reactivar la vida econ¨®mica del pa¨ªs. "Irak tiene grandes deudas y las pol¨ªticas econ¨®micas del anterior r¨¦gimen se han fundamentado en una planificaci¨®n desastrosa que ha creado una situaci¨®n de inflaci¨®n, desempleo, pobreza y corrupci¨®n administrativa". Seg¨²n los ¨²ltimos datos disponibles, la deuda externa de Irak era, en 1996, de 21.912 millones de d¨®lares y la inflaci¨®n (referida a 1997) alcanzaba el 45%. En la actualidad es imposible establecer una cifra realista para ambos par¨¢metros, aunque puede bastar como ejemplo que numerosos productos de primera necesidad han duplicado o triplicado su precio.
Los economistas iraqu¨ªes advierten adem¨¢s que el capital extranjero se va a encontrar con un inconveniente muy dif¨ªcil de superar a corto plazo. "Las guerras perdidas, el largo embargo y la situaci¨®n desastrosa han provocado que muchas personas se hayan acostumbrado a subsistir, pero no a prosperar. Es triste decirlo, pero muchos iraqu¨ªes simplemente no quieren ya trabajar", asegura Arrami. Con cerca de 26 millones de habitantes -de los que el 76,8% vive en las ciudades- y una poblaci¨®n activa en 1998 de seis millones de personas, el desempleo en el Irak de la posguerra alcanza, seg¨²n los expertos, el 60% o el 70%. Muchas empresas estatales han logrado, gracias a los fondos enviados directamente desde Washington, por lo menos pagar a sus empleados salarios de subsistencia en d¨®lares aunque no trabajen. Por ejemplo, la compa?¨ªa Iraqui Airways, cuyos aviones se desmoronan al sol en las pistas de los aeropuertos iraqu¨ªes, paga 150 d¨®lares a sus empleados, quienes no desarrollan labor alguna.
"Es necesario seguir una pol¨ªtica econ¨®mica realista", opina Said Fayed, un economista bagdad¨ª que sobrevive a duras penas llevando la contabilidad de numerosos negocios. "Hay que corregir de inmediato la relaci¨®n que han tenido los trabajadores con el Estado, pero a la vez es necesario intentar distribuir los ingresos de forma justa. Este pa¨ªs nada en petr¨®leo, pero mucha gente ni siquiera puede comprarse unos zapatos". Son las paradojas que provoca el petr¨®leo las que enervan a los iraqu¨ªes. Primero fueron las interminables colas en las gasolineras por falta de combustible. Ahora, con el invierno a las puertas, el Centro Log¨ªstico de Naciones Unidas en Bagdad ha anunciado que no hay suficientes reservas de queroseno y fuel, combustibles que alimentan calefacciones y, sobre todo, generadores de electricidad. Como ejemplo basta citar que una estaci¨®n de servicio recibe al d¨ªa 36.000 litros de estos combustibles cuando deber¨ªa recibir al menos 88.000. Tanto economistas como propietarios de gasolineras y consumidores est¨¢n convencidos de que grandes cantidades de productos derivados del petr¨®leo est¨¢n saliendo de contrabando hacia los pa¨ªses vecinos, debido a su bajo coste.
"Los economistas que han llegado con los estadounidenses quieren seguir la l¨ªnea de las privatizaciones, pero no creo que eso tenga ¨¦xito. Provocar¨¢ m¨¢s paro, inflaci¨®n y fuga de capitales", afirma el decano de Econ¨®micas.
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