Cuesti¨®n de confianza
A lo largo del mes de septiembre, las perspectivas sobre la pronta recuperaci¨®n de la econom¨ªa internacional parecen haberse enfriado. El mejor indicador de ello es la nueva orientaci¨®n a la baja de los tipos de inter¨¦s a largo plazo tras la remontada del verano y la paralela correcci¨®n de las cotizaciones burs¨¢tiles. La depreciaci¨®n del d¨®lar, explicada por las dudas de los inversores sobre la sostenibilidad del grandioso d¨¦ficit norteamericano por cuenta corriente, tambi¨¦n es un s¨ªntoma de esta situaci¨®n incierta.
Lo curioso es que estas incertidumbres surgen con m¨¢s fuerza precisamente en el momento y en el lugar -Estados Unidos- en que la econom¨ªa est¨¢ lanzada. Las previsiones de crecimiento del PIB en ese pa¨ªs para el tercer trimestre apuntan nada menos que a una tasa del orden del 5%, pero, a pesar de ello, los indicadores de confianza han sufrido una ca¨ªda notable. Los consumidores no acaban de ver clara una recuperaci¨®n en la que se sigue destruyendo empleo y los empresarios no acaban de verlo claro mientras se mantenga esta incertidumbre. Es una especie de c¨ªrculo vicioso, del que es dif¨ªcil salir, pues el origen de esta situaci¨®n -los desequilibrios financieros norteamericanos- van a seguir ah¨ª por mucho tiempo.
Las perspectivas sobre la pronta recuperaci¨®n de la econom¨ªa mundial parecen haberse enfriado
?C¨®mo afecta todo esto a los consumidores y empresarios europeos y, m¨¢s concretamente, a los espa?oles? En los gr¨¢ficos adjuntos se presenta la evoluci¨®n de los indicadores de confianza m¨¢s representativos, elaborados por la Comisi¨®n Europea a partir de encuestas de opiniones diversas, entre ellas la Encuesta de Coyuntura Industrial del Ministerio de Ciencia y Tecnolog¨ªa espa?ol. El izquierdo muestra el correspondiente a los consumidores. Como se ve, desde el a?o 2000 hasta el primer trimestre de este a?o este indicador no ha dejado de caer, pero ha experimentado una recuperaci¨®n clara en Espa?a, aunque titubeante si observamos los datos mensuales, en los dos ¨²ltimos trimestres. Esta recuperaci¨®n se produce tambi¨¦n en el conjunto de pa¨ªses de la zona del euro, si bien a partir del tercer trimestre y de forma m¨¢s t¨ªmida. El gr¨¢fico central se refiere a la confianza del comercio minorista. Este indicador, al contrario que el de los consumidores, no muestra s¨ªntomas claros de mejora, lo que parece una inconsistencia con la evoluci¨®n del anterior, si bien puede estar afectado por problem¨¢ticas propias del sector, adem¨¢s de la evoluci¨®n del consumo. En la zona del euro vemos una fuerte ca¨ªda en la primera mitad del a?o en curso, que parece estabilizarse en el tercer trimestre.
Por ¨²ltimo, el Indicador de Clima Industrial muestra una mejora notable durante 2002, m¨¢s pronunciada en Espa?a, de forma que se ha abierto una brecha considerable respecto al nivel medio de la zona del euro. No obstante, en los dos ¨²ltimos trimestres, y al contrario de la evoluci¨®n de la confianza de los consumidores, el indicador se ha dado la vuelta, lo que se puede explicar por la mayor exposici¨®n de los empresarios al contexto internacional.
En resumen, todos esperamos que la econom¨ªa norteamericana consolide su recuperaci¨®n y que la europea inicie la suya en los ¨²ltimos meses de este a?o, lo que ayudar¨ªa a consolidar la ya iniciada en Espa?a, pero, como muestran los indicadores de confianza, sobre todo los de los empresarios, esto es algo que sigue sometido a una elevada incertidumbre.
?ngel Laborda es director de coyuntura de la Fundaci¨®n de las Cajas de Ahorros Confederadas para la Investigaci¨®n Econ¨®mica y Social (FUNCAS).
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