Los cirujanos de Dallas consiguen la separaci¨®n de los siameses egipcios
El equipo de especialistas intenta ahora recomponer los cr¨¢neos de los dos hermanos
El macroequipo m¨¦dico del Hospital Infantil de Dallas (Tejas, EE UU), anunci¨® anoche que hab¨ªa logrado separar con ¨¦xito a Ahmed y Mohamed Ibrahim, los hermanos siameses egipcios de dos a?os de edad que estaban unidos por la parte superior del cr¨¢neo, tras 26 horas de intervenci¨®n quir¨²rgica. Los ni?os no sufrieron p¨¦rdidas de sangre importantes, ni tampoco problemas pulmonares o neurol¨®gicos. Un equipo de cirujanos craneales y faciales trata ahora de recomponer los cr¨¢neos de los siameses, utilizando la piel de sus propias cabezas, que ya hab¨ªa sido expandida durante el a?o de preparaci¨®n para la intervenci¨®n, y tambi¨¦n con piel tomada de las piernas de los hermanos.
Poco antes de la confirmaci¨®n de que la separaci¨®n hab¨ªa procedido con ¨¦xito, el jefe de la unidad de cuidados intensivos del hospital tejano, Jim Thomas, hab¨ªa declarado con gesto optimista que Ahmed y Mohamed estaban "a una distancia muy corta de empezar a vivir vidas independientes".
"Todo ha ido seg¨²n los planes quir¨²rgicos", dijo Thomas. "No ha habido sorpresas y no ha surgido ninguna de las complicaciones potenciales que hab¨ªan previsto los cirujanos". Para recomponer los cr¨¢neos de los ni?os, los especialistas utilizar¨¢n ahora la piel de sus propias cabezas y tambi¨¦n de sus piernas, que se expandi¨® con unos injertos realizados cinco meses antes de la operaci¨®n.
Los cirujanos lograron la separaci¨®n de las venas principales en la cavidad craneal, que estaban unidas por tejidos compartidos. Thomas ya hab¨ªa asegurado en un descanso de la intervenci¨®n: "Si esta fase culmina con ¨¦xito, podemos iniciar la separaci¨®n f¨ªsica de los siameses". Por entonces, los m¨¦dicos insist¨ªan en que el m¨¢s m¨ªnimo fallo en la separaci¨®n de los vasos sangu¨ªneos pod¨ªa provocar da?os cerebrales irreparables al menos en uno de los dos ni?os.
Una veintena de cirujanos participaron en la operaci¨®n. Otros 40 especialistas asisten a los m¨¦dicos en el quir¨®fano. Thomas traslad¨® a los medios de comunicaci¨®n un mensaje conciso del doctor Dale Swift, el neurocirujano que dirige la intervenci¨®n, desde el quir¨®fano: "Todo va bien. No ha habido problemas".
S¨®lo hubo un peque?o inconveniente en la aplicaci¨®n de la anestesia a uno de los ni?os por un bloqueo pulmonar, que se resolvi¨® sin dificultad. Los m¨¦dicos cuentan que se tard¨® dos horas s¨®lo para determinar cu¨¢l era la mejor posici¨®n para colocar a los ni?os sobre la mesa circular de operaci¨®n, dise?ada espec¨ªficamente para esta intervenci¨®n.
Una vez culminada la distribuci¨®n del sistema circulatorio y la separaci¨®n del cerebro de los siameses, varios equipos de cirujanos craneofaciales tratar¨¢n de reparar los da?os en la parte superior de los cr¨¢neos, que se cubrir¨¢n con tejidos extra¨ªdos de sus propios cuerpos.
S¨®lo 2 de cada 100 ni?os siameses unidos por alguna parte de su cuerpo nacen unidos por la cabeza. Un caso tan at¨ªpico se registra s¨®lo en uno de cada 2,5 millones de nacimientos. La complejidad del cerebro y sus vasos sangu¨ªneos hacen que estos casos sean particularmente dif¨ªciles de tratar quir¨²rgicamente.
Ahmed y Mohamed Ibrahim, nacidos hace algo m¨¢s de dos a?os al sur de El Cairo, llevan m¨¢s de un a?o sometidos a ex¨¢menes m¨¦dicos que han permitido confiar en el ¨¦xito de la operaci¨®n a la que ahora est¨¢n siendo sometidos, a pesar de que el ¨²ltimo caso similar, el de las j¨®venes iran¨ªes operadas en Singapur, provoc¨® la muerte de las dos.
Thomas explic¨® ayer que lo m¨¢s complicado hab¨ªa sido estabilizar la vena que evacuaba la sangre del cerebro de uno de los ni?os, puesto que en vez de regresar a su sistema circulatorio pasaba al de su hermano, informa Efe.
El gran temor de los m¨¦dicos era que, si no se consegu¨ªa estabilizar los sistemas circulatorios de los dos siameses, Ahmed y Mohamed pod¨ªan morir, a lo que se sumaba adem¨¢s el hecho de que los ni?os hab¨ªan compartido parte de la superficie cerebral, que los m¨¦dicos confiaban en poder dividir sin causar graves da?os.
Kennet Salyer, uno de los responsables de la operaci¨®n, advirti¨® antes de entrar en el quir¨®fano del alto riesgo de muerte y de da?os cerebrales que afrontaban los ni?os, pero consider¨® que era un riesgo calculado, teniendo en cuenta los beneficios potenciales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.