"La burocracia impedir¨¢ que los f¨¢rmacos lleguen a los pobres"

Emilia Herranz, alcarre?a, es presidenta de M¨¦dicos Sin Fronteras (MSF)-Espa?a (215.000 socios y colaboradores). Ha coordinado tres a?os la campa?a de Acceso a Medicamentos Esenciales, crucial en un mundo donde 14 millones de personas mueren al a?o por enfermedades que en los pa¨ªses ricos tienen tratamiento, como sida, malaria y tuberculosis, diarrea o neumon¨ªa. Su nuevo cargo la obliga a planteamientos no s¨®lo sobre el problema de los f¨¢rmacos, sino tambi¨¦n sobre guerras olvidadas o inmigrantes.

Pregunta. Tras a?os de campa?a de MSF, Interm¨®n Oxfam y otras ONG, hay un acuerdo en la Organizaci¨®n Mundial de Comercio (OMC) para que los f¨¢rmacos lleguen a los pa¨ªses pobres. ?Es el mejor acuerdo?

"En Irak estamos viendo que un ej¨¦rcito no puede hacer ayuda humanitaria"

Respuesta. Nos lo venden como un ¨¦xito, pero a la hora de la verdad la burocracia impedir¨¢ que los f¨¢rmacos lleguen a quienes los necesitan, los pobres. Pongamos un ejemplo al azar: Tanzania, sin medios para fabricar los medicamentos b¨¢sicos que necesita, tendr¨¢ ahora que declararse en emergencia, emitir una licencia obligatoria, es decir un permiso para saltarse la patente de un f¨¢rmaco (que est¨¢ en manos de una multinacional) y acordar importar el producto. El pa¨ªs exportador, digamos India, que s¨ª tiene capacidad de fabricar gen¨¦ricos, tambi¨¦n deber¨¢ emitir licencia obligatoria antes de exportar. Y todo el proceso deber¨¢ pasar por la OMS. Una burocracia terrible para algo absolutamente urgente, de vida o muerte.

P. Las ONG siempre han defendido el acuerdo anterior de la OMC, de 2001, en Doha (Qatar), porque proteg¨ªa el derecho de todos los pa¨ªses a proteger la salud p¨²blica y promover el acceso universal a los medicamentos. ?Se ha retrocedido?

R. La intenci¨®n de los grandes poderes es ¨¦sa. Se pretende minar el ¨¦xito de Doha. La t¨¢ctica es valerse de acuerdos regionales y bilaterales, que en teor¨ªa servir¨ªan para perfeccionar Doha, pero que pueden hacer que la gente pobre se quede sin f¨¢rmacos. Un ejemplo es el anteproyecto para el ?rea de Libre Comercio de las Am¨¦ricas (ALCA), que convertir¨¢ a Latinoam¨¦rica en el patio trasero de EE UU y consagrar¨¢ el imperio de la industria farmac¨¦utica de Washington: se prolongar¨¢ el actual derecho de patentes, ahora de 20 a?os, se limitar¨¢n las circunstancias en que un pa¨ªs pueda proclamar emergencia sanitaria... Todo se lleva con secretismo. MSF quiere alertar a los gobiernos latinoamericanos, y desbloquear la informaci¨®n en Europa. Espa?a, por sus v¨ªnculos con Latinoam¨¦rica, debe pronunciarse.

P. En septiembre la Delegaci¨®n de Gobierno de Ceuta desmantel¨® el campamento donde MSF atend¨ªa a inmigrantes. ?Han tirado ustedes la toalla?

R. El Gobierno nos desaloj¨® en Ceuta, pero nuestro deber es seguir con los inmigrantes. Seguimos a pie de calle, monte o playa, atendi¨¦ndoles como podemos. Nosotros, si la Administraci¨®n funciona adecuadamente en favor de ese colectivo, nos vamos. Pero creemos que los inmigrantes son el grupo m¨¢s vulnerable, y que no s¨®lo hay que brindarles asistencia inmediata sino restablecer su dignidad humana. Cuando montamos el campamento el 4 de septiembre, hab¨ªa casi 400 inmigrantes que no cab¨ªan en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), y cuando nos desalojaron eran ya 600. Llegan continuamente. Ahora les han metido en el CETI, que tiene capacidad para 400.

P.

La ayuda oficial al desarrollo que dan los pa¨ªses ricos desciende, mientras la miseria aumenta. ?Pintan mejor las cosas para la acci¨®n humanitaria?

R. Est¨¢n muy arduas. Ha crecido la confusi¨®n con eso de las presuntas misiones comunitarias de los ej¨¦rcitos. En Irak estamos viendo que un ej¨¦rcito no puede hacer ayuda humanitaria. All¨ª la poblaci¨®n machacada lo que necesita de un ej¨¦rcito es que les proteja y les permita organizarse por s¨ª mismos, y en Irak ni la poblaci¨®n ni las ONG humanitarias tenemos garant¨ªa de eso. Una ONG como la nuestra es independiente de todo Gobierno y su ¨²nico fin es ayudar a la poblaci¨®n. Un ej¨¦rcito nunca ser¨¢ independiente y deber¨¢ siempre obedecer a directrices no precisamente humanitarias. En Afganist¨¢n reina el caos, porque los pa¨ªses ricos se limitan a dar fondos, y se pretende que las ONG callen y acepten si quieren cumplir su labor. Y pensemos en atroces guerras olvidadas, esos conflictos donde la apariencia de luchas tribalistas enmascara una pugna mundial por el control de materias primas: un ejemplo, la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, donde la gente huye de continuo, atrapada en un c¨ªrculo vicioso de violencia y desplazamiento. En esas guerras la poblaci¨®n es directamente utilizada por los beligerantes. Y en esos pa¨ªses, adem¨¢s de la guerra, siguen las enfermedades. Me pregunto por qu¨¦ Espa?a, tan generosa en la postguerra iraqu¨ª, no da nada para la poblaci¨®n congolesa.

P. ?Preferir¨ªa trabajar sobre el terreno que ser presidenta?

R. En MSF hay espacio y tiempo para todo. Yo llevo 11 a?os y cada vez estoy m¨¢s apasionada. Ahora estar¨¦ tres a?os en la junta directiva elegida en asamblea, y el cargo de presidenta es renovable anualmente. Me he movido por el mundo desde finales de los 80, cuando tras ejercer en pueblos de Guadalajara me fui a Guinea Ecuatorial para comprobar si era una ut¨®pica, y all¨ª vi que mi necesidad de justicia ten¨ªa bases bien reales y que precisamente esa realidad exige formarse. Estar sobre el terreno implica peligro: nuestro compa?ero Arjan Erkel lleva m¨¢s de un a?o secuestrado en el C¨¢ucaso, y s¨®lo podemos reclamar constantemente que el Gobierno ruso haga todo cuanto est¨¢ en su mano para lograr su liberaci¨®n.