La crisis constitucional complicar¨¢ el debate presupuestario de la UE
Chirac preconiza una Europa a dos velocidades mientras aumenta el euroescepticismo franc¨¦s
El aborto de la Constituci¨®n europea provocar¨¢ una coincidencia que la Comisi¨®n de Bruselas intentaba evitar: las discusiones del presupuesto comunitario para el periodo 2006-2013 comenzar¨¢n al mimo tiempo que los intentos de reanimar el proyecto constitucional. "Las agendas se convierten en paralelas", reconoci¨® ayer Michel Barnier, el comisario encargado de la pol¨ªtica regional europea, responsable de 32.000 millones de euros anuales.
Cuando se hable al mismo tiempo de perspectivas financieras y del reparto del poder en la UE, la crisis se ver¨¢ servida en toda su amplitud. El lanzamiento de las discusiones presupuestarias explica la repentina actualidad de la Europa de las dos velocidades, sugerida por Jacques Chirac y admitida por Gerhard Schr?der a los pocos minutos del naufragio constitucional. La tentaci¨®n de los contribuyentes netos para reducir su aportaci¨®n es poderosa. "?C¨®mo se puede esgrimir el veto y pedir dinero a los alemanes?", se pregunta un diplom¨¢tico en Par¨ªs, en referencia a la actitud polaca de haberse estrenado en la UE amenazando con bloquear el proyecto de Constituci¨®n. Criterios de poblaci¨®n al margen, el sistema de Niza iguala pr¨¢cticamente la capacidad de bloqueo de Espa?a, receptor neto de fondos comunitarios, con el de Alemania, el principal contribuyente.
La crisis de confianza entre los Estados se mezcla con el euroescepticismo creciente de los ciudadanos. De paso, la "intransigencia" espa?ola ha servido de pretexto a Par¨ªs para aplazar la vigencia de un plan pol¨ªtico que consagra el fin de la paridad franco-alemana. "Espa?a dinamita Bruselas", titulaba ayer el Journal de Dimanche, uno de los pocos diarios franceses que se publican en domingo.
A cuatro meses de unas elecciones regionales de alto riesgo para el Gobierno franc¨¦s -toda la oposici¨®n est¨¢ decidida a considerarlas como un plebiscito sobre el Ejecutivo-, Chirac gana tiempo, consciente de la tibieza actual del europe¨ªsmo franc¨¦s. Los l¨ªderes socialista, Fran?ois Hollande, y centrista, Fran?ois Bayrou, han saludado el naufragio constitucional apoyando la idea de una Europa m¨¢s profunda entre socios decididos a avanzar, antes que volver al Tratado de Niza. Sectores considerables de los partidos socialista y comunista, Los Verdes y la extrema izquierda denuncian el proyecto constitucional como "la consagraci¨®n del liberalismo", mientras la extrema derecha echa pestes de Europa; de modo que Chirac no pod¨ªa venderle a su opini¨®n p¨²blica un retroceso m¨¢s.
En los ¨²ltimos meses, coincidiendo con el debate constitucional, la mayor¨ªa de los medios de comunicaci¨®n franceses han presentado a "Bruselas" como la fuente de todo mal. "Bruselas" se opon¨ªa a la ayuda con que el Estado franc¨¦s quer¨ªa salvar de la quiebra al grupo industrial Alstom; "Bruselas" quer¨ªa sancionar a Francia por violar el Pacto de Estabilidad; "Bruselas" es s¨®lo "una oficina", en expresi¨®n del propio primer ministro, Jean-Pierre Raffarin. En suma: en la segunda econom¨ªa de Europa, las instituciones de la UE no est¨¢n en su mejor momento de popularidad.
"Grupos pioneros"
Entre tantas desconfianzas, el fracaso de la Constituci¨®n justifica a Chirac para lanzarse a la aventura de montar "grupos pioneros". Todo eso puede avanzar mucho m¨¢s y a ello va a dedicarse el eje franco-alem¨¢n. El coste de los platos rotos corre a cargo de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, principalmente. Hasta los franceses m¨¢s tolerantes hacia el vecino del sur aceptan la explicaci¨®n de que Espa?a se ha "separado" del n¨²cleo fuerte europeo porque tiene un jefe de Gobierno "intratable". Una de las personalidades francesas probadamente europe¨ªstas argumentaba hace unos d¨ªas, en privado: "?Pero qui¨¦n se opone a la Constituci¨®n europea: Espa?a o Aznar?".
[El Partido Popular Europeo (PPE) propuso ayer celebrar una "cumbre extraordinaria" en febrero, a fin de ofrecer "una se?al clara" sobre el futuro de Europa, informa Efe].
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