La falta de controladores en la sede de Torrej¨®n provoca cancelaciones y retrasos

M¨¢s de 60 vuelos fueron cancelados ayer y decenas sufrieron retrasos de horas por la ausencia de suficientes controladores a¨¦reos de Torrej¨®n de Ardoz en Madrid, uno de los centros neur¨¢lgicos del tr¨¢fico a¨¦reo en Espa?a. A las siete de la tarde, el caos estaba servido: m¨¢s de 50 vuelos cancelados y decenas muy retrasados. Los aeropuertos m¨¢s problem¨¢ticos fueron Barajas (Madrid) y El Prat (Barcelona), donde el 70% y el 44% de los vuelos, respectivamente, se vieron afectados. Al final, los controladores decidieron cumplir el acuerdo de horas extra alcanzado con AENA y se volv¨ªa a la normalidad.

Discrepancias internas en el sindicato USCA fueron la posible raz¨®n del caos a¨¦reo

La sorpresa por la huelga de los controladores de la sede de Torrej¨®n de Ardoz (Madrid) fue la misma para Aeropuertos Espa?oles de Navegaci¨®n A¨¦rea (AENA) y para la Uni¨®n Sindical de Controladores A¨¦reos (USCA).

Ninguno de los portavoces de ambas partes pudo explicar por qu¨¦, de forma independiente, los trabajadores de la sede madrile?a hab¨ªan optado por no cumplir el preacuerdo suscrito por el colectivo de controladores con AENA un d¨ªa antes, de cubrir las necesidades del servicio haciendo horas extras voluntarias mientras se llegaba a un nuevo pacto para el presente a?o en relaci¨®n a lo que los controladores conocen como "la ampliaci¨®n de jornada", es decir, las horas extras que realizan por falta de personal.

Seg¨²n USCA y AENA, de los m¨¢s de 300 controladores que trabajan en el centro de Torrej¨®n, la mitad no acudieron a cubrir su servicio haciendo horas extras voluntariamente, tal y como se hab¨ªa acordado con car¨¢cter general para todas las dependencias.

Fuentes de USCA, aseguraban ayer que "alguien", aludiendo a alguno de sus propios delegados sindicales en Madrid, "inform¨® mal a los trabajadores de Torrej¨®n sobre las negociaciones que se estaban manteniendo con AENA" con el fin de actualizar el acuerdo de ampliaci¨®n de jornada, que caduc¨® el pasado 31 de diciembre.

Seg¨²n AENA, el primer convenio colectivo de control, firmado en 1999, incorpor¨® el Estatuto de los Controladores de 1992 que fijaba la jornada laboral en 1.200 horas.

Esta jornada es insuficiente, con los aproximadamente 1.800 controladores que operan en Espa?a, para cubrir la demanda cada vez mayor, por el crecimiento del tr¨¢fico a¨¦reo.

Por eso se suscribieron sucesivos acuerdos de ampliaci¨®n de jornada laboral entre AENA y el colectivo de controladores, el ¨²ltimo de los cuales ten¨ªa vigencia en los a?os 2000-2003.

"Debieron decirles [a los controladores de Torrej¨®n] que se hab¨ªan roto las negociaciones, y la huelga ha sido su reacci¨®n. Pero eso es falso, s¨®lo hemos aplazado la negociaci¨®n hasta el 8 de enero, por eso las restantes 43 dependencias de control de Espa?a han seguido cumpliendo el preacuerdo existente", explic¨® un sindicalista que asisti¨® a la negociaci¨®n con AENA en un hotel de Madrid el pasado viernes.

Seg¨²n insinuaron las mismas fuentes, "todo proviene del malestar de uno de los delegados sindicales de Madrid al no ver reflejadas las reivindicaciones locales de su sede en la negociaci¨®n".

De ser as¨ª, la raz¨®n del caos generado durante toda la jornada de ayer, que concluy¨® con un balance final de un 60% de los vuelos con retrasos y una media de 73 minutos de demora, habr¨ªa sido la divisi¨®n de opiniones interna del sindicato USCA.

Los retrasos y las cancelaciones afectaron principalmente al aeropuerto de Barajas (Madrid) -19 cancelaciones de vuelos y el 70% de los previstos con retrasos- y el de El Prat (Barcelona) -16 cancelaciones y el 50% de los vuelos previstos retrasados-.

A ¨²ltima hora de la tarde, tras una larga reuni¨®n del gabinete de crisis de AENA en Barajas, la situaci¨®n se resolvi¨® al incorporarse progresivamente los controladores a sus puestos.

A¨²n as¨ª, en Barajas el mostrador de Iberia era un drama. La frase m¨¢s repetida por los viajeros era: "No puedo quedarme aqu¨ª esta noche sin nada". Y las azafatas se limitaban a decir que las cancelaciones, los retrasos y las consecuencias de los mismos (p¨¦rdidas de vuelos al hacer escalas, etc¨¦tera) "se deben a razones ajenas a la compa?¨ªa" de modo que la aerol¨ªnea no asume los gastos de alojamiento ni de manutenci¨®n. "Vaya usted al responsable de esto que es AENA y reclame all¨ª", zanjaban.

Una vez m¨¢s, el mareo de viajeros cansados, indignados, desesperados, resignados... fue la t¨®nica de la jornada.