Tibia acogida a 'Cold mountain' en Berl¨ªn

Es curioso ver un festival de cine desde la barrera. Aunque ¨¦ste de Berl¨ªn tiene ya una experiencia de 53 a?os, bajo la rotunda eficacia organizativa alemana, sorprende apreciar en sus responsables el mismo nerviosismo que tienen los de un festival de inexpertos o de menor calado. Dieter Kosslick, director desde hace tres a?os, tiempo en el que ha encanecido r¨¢pidamente, hace declaraciones en las que proclama su competitividad con el Festival de Cannes, como cualquier otro director hace respecto a su festival m¨¢s cercano. Si para San Sebasti¨¢n es el de Venecia, y para Cannes, los de Sundance y Rotterdam, para Berl¨ªn, desde la noche de los tiempos, su fantasma es el Festival de Cannes, y m¨¢s a¨²n este a?o que le ha arrebatado, entre otras, la pel¨ªcula de Walter Salles sobre el joven Che Guevara, sustracci¨®n que en Berl¨ªn han tratado de compensar programando Viajando con Che

Los actores Jude Law y Ren¨¦e Zellweger dieron plant¨®n a los periodistas

Nicole Kidman, protagonista del filme, ha disculpado su presencia en el festival

El adelanto de las candidaturas de los Oscar ha deslucido las sorpresas del certamen

Guevara, donde el veterano documentalista italiano Gianni Min¨¤ ha seguido el rodaje del filme.

Cuando, a?os atr¨¢s, el festival de Berl¨ªn se celebraba en el mes de julio, daba gusto pasear por las calles de esta bella ciudad, incluso cruzar bajo un sol t¨®rrido al sector socialista en el que parec¨ªa que hac¨ªa siempre m¨¢s fr¨ªo, e incluso ir al cine, ya que los programadores de entonces rebuscaban pel¨ªculas entre cineastas nuevos y rebeldes. Sin embargo, los organizadores alemanes se quejaban de que el Festival de Cannes, siempre en mayo, les hab¨ªa quitado buena parte de las pel¨ªculas que hubiesen querido para ellos. As¨ª que, ni cortos ni perezosos, adelantaron su festival a febrero, pensando que de esa forma lograr¨ªan algunas de las pel¨ªculas previstas para Cannes. Y as¨ª fue en parte, al menos en lo que se refiere a las grandes pel¨ªculas norteamericanas presumiblemente candidatas al Oscar, que suelen comenzar a distribuirse por Europa durante estos primeros meses del a?o. Hasta la pasada edici¨®n era costumbre que las candidaturas a los Oscar se conocieran durante la celebraci¨®n del propio festival de Berl¨ªn, de modo que su programa ten¨ªa el aliciente a?adido de comprobar si se hab¨ªan incluido las pel¨ªculas llamadas importantes.

Pero como este a?o los Oscar han adelantado su fecha, el juego de sorpresas del festival de Berl¨ªn ha quedado algo deslucido. Por ejemplo, la inauguraci¨®n en su secci¨®n oficial con Cold

mountain, de Anthony Minghella, fuera de concurso, tras saberse ya que no est¨¢ nominada a los Oscar a mejor pel¨ªcula ni a mejor director. Probablemente, cuando Dieter Kosslick la seleccion¨® para inaugurar su festival imaginaba algo mejor para ella en la carrera de los Oscar. ?Ha influido esa decepci¨®n en la acogida poco entusiasta que ha tenido la pel¨ªcula, al menos en la proyecci¨®n para la prensa? Se han reconocido muchos de sus m¨¦ritos, como el buen hacer de Jude Law (candidato al Oscar a mejor actor) y de Ren¨¦e Zellweger (candidata al correspondiente a mejor actriz de reparto), y menos, como la propia Academia de Hollywood, el trabajo de Nicole Kidman, que no ha sido nominada y que quiz¨¢s por eso ha disculpado su presencia en Berl¨ªn.

La pel¨ªcula de Anthony Minghella (realizador de filmes como El paciente ingl¨¦s o El talento de Mr.

Ripley) quiere ser un retrato ¨¦pico de la fundaci¨®n de Estados Unidos, centr¨¢ndose en los ¨²ltimos tiempos de la guerra de Secesi¨®n, una guerra "en la que los del sur se juegan la vida para que los amos conserven sus esclavos". Un fresco social en el que la violencia, el dolor y la muerte se contrarrestan con una dulce historia de amor o, mejor dicho, con el sue?o de una historia de amor, la del campesino (Jude Law) que deserta del frente tras ser herido para reunirse con la mujer (Nicole Kidman) que ama aunque apenas la conozca.

En su peligroso regreso a casa, que conforma la mayor parte de las dos horas y media de duraci¨®n de la pel¨ªcula, el joven protagonista va top¨¢ndose con diversos personajes, algunos de ellos en situaci¨®n de peligro, cuyas actitudes y problemas son un grito contra el disparate de cualquier guerra. Mientras tanto, la mujer que le espera tambi¨¦n sufre sus desastres, sobreviviendo en un clima de odio.

Se ha se?alado que ese regreso a casa carece de intensidad dram¨¢tica y que las aventuras del personaje interpretado por Law, casi de western, no tienen emotividad. Esto siempre es subjetivo. Pero algo menos, quiz¨¢s, el que los encuentros del desertor en su largo caminar podr¨ªan tranquilamente alterarse de orden sin que ello afectase al conjunto del filme. Puede que ¨¦sta tambi¨¦n sea la raz¨®n por la que Cold mountain no haya sido nominada al mejor gui¨®n adaptado, sobre la novela de Charles Frazier.

Cold

mountain, en la que tambi¨¦n participan Philip Seymour Hoffman y Brendan Gleeson, es una producci¨®n ambiciosa, tanto que tuvo problemas de financiaci¨®n. La compa?¨ªa MGM se retir¨® del proyecto pocas semanas antes de comenzar el rodaje y Minghella y sus socios tuvieron que buscar otros part¨ªcipes, incluso cambiar los planes de rodaje en Carolina del Norte por las monta?as de Transilvania. Ha surgido as¨ª una coproducci¨®n con el Reino Unido, Italia y Rumania, aunque la pel¨ªcula, de hecho, es netamente estadounidense. Como la mayor parte de las programadas para los pr¨®ximos d¨ªas. Los autores deber¨¢n regresar a su pa¨ªs para involucrarse en la promoci¨®n con vistas a los Oscar, lo cual no justifica el plant¨®n que Jude Law y Ren¨¦e Zellweger dieron a los periodistas en la rueda de prensa, por cierto, tan abarrotada como las calles cercanas, donde cientos de mirones confiaban en ver de cerca a las estrellas. Como en todas partes, vaya.