Indignado

Les escribo esta carta para compartir con sus lectores mi indignaci¨®n con la reciente situaci¨®n en la Fundaci¨®n Jim¨¦nez D¨ªaz. Tuve un hijo internado en el hospital y la oportunidad de contemplar, indefenso, el lamentable estado del mismo. Toneladas de basura por los pasillos. Basura tra¨ªda de fuera y esparcida por el suelo y las habitaciones, ascensores pintados, paredes pintadas, cristales rotos...

Y no es s¨®lo el aspecto f¨ªsico, entiendo que los peligros para la salud originados por esta falta de higiene en un ¨¢mbito hospitalario deben ser enormes. No podemos admitir que ¨¦ste sea el resultado del ejercicio del derecho a la huelga de unos trabajadores.

No entro a valorar la situaci¨®n de los mismos, que me inspira profundo respeto y no conozco en detalle.

Pero me crea profundo rechazo que, bajo la bandera de los dos sindicatos m¨¢s importantes de este pa¨ªs, y amparados por un derecho constitucional y gritos de democracia y progresismo, se amparen y acepten actos de vandalismo y delincuencia. Este tipo de delincuencia empieza a ser una rutina.

Creo que es necesario un profundo cambio y sugiero que esta situaci¨®n sirva de ejemplo para aprender lo que no debe ser una huelga.