Un tribunal suspende la sanci¨®n a un guardia civil que abandon¨® su puesto

El Tribunal Militar Territorial de Sevilla ha suspendido la pena de tres meses y un d¨ªa de prisi¨®n a un guardia civil de Hu¨¦scar (Granada) por ausentarse de su puesto durante 25 minutos para hacer unas gestiones. El Tribunal justifica esta medida, in¨¦dita en la justicia castrense, por la extinci¨®n de su relaci¨®n con el Ej¨¦rcito. Debido a la denuncia, el guardia sufri¨® una depresi¨®n que provoc¨® su retiro.

Jer¨®nimo Cano Ramos prestaba servicio a las puertas del puesto de la Guardia Civil de Hu¨¦scar (Granada) cuando pidi¨® a otros dos agentes que vigilaran la entrada al cuartelillo mientras ¨¦l se desplazaba al centro del pueblo para hacer unas gestiones. El agente abandon¨® su puesto sin pedir permiso a sus mandos y permaneci¨® ausente 25 minutos. Nada m¨¢s regresar, Cano inform¨® al comandante de su breve ausencia. Pero el mando llev¨® su caso a la justicia militar.

A ra¨ªz de la denuncia, el agente cay¨® en una depresi¨®n que le mantuvo apartado del servicio. El Tribunal M¨¦dico Militar de Sevilla declar¨® su "inutilidad permanente para el servicio por insuficiencia de condiciones psicof¨ªsicas" (el equivalente a la incapacidad permanente para quienes no son militares). El Ministerio de Defensa ratific¨® esa incapacidad y le concedi¨® su paso a retiro el 17 de noviembre de 2003.

Pero su caso, como el de otros agentes del cuerpo, sigui¨® abierto en el Tribunal Militar. El fiscal le imput¨® un delito de abandono del servicio de armas que los magistrados ratificaron. Cano fue condenado a tres meses y un d¨ªa de prisi¨®n, y a la suspensi¨®n de cargo p¨²blico y del derecho al sufragio pasivo. A pesar de estar retirado, tendr¨ªa que cumplir su pena en una prisi¨®n militar. El ya ex agente solicit¨® que se suspendiera la condena.

Sin relaci¨®n laboral

El Tribunal accede a esa petici¨®n, porque considera que Cano ya no tiene relaci¨®n laboral con el Ej¨¦rcito. "El reo cometi¨® su delito siendo militar pero ya no lo es en el momento de procederse a la ejecuci¨®n, pues ha pasado a la situaci¨®n de retirado", razona el auto que le permitir¨¢ no tener que ir a prisi¨®n.

Francisco Ruiz Baena, abogado de la Asociaci¨®n Profesional de Guardias Civiles (AUGC), considera que el auto es "ins¨®lito", ya que en la justicia militar no existe la suspensi¨®n de condena que, en la v¨ªa penal ordinaria, evita ir a la c¨¢rcel a quien cometa su primer delito y est¨¦ condenado a una pena inferior a dos a?os. Hasta ahora, el dejar de pertenecer al Ej¨¦rcito tampoco exim¨ªa de ir a la c¨¢rcel por una falta cometida cuando se era militar.

En enero, otros dos guardias civiles fueron condenados por el mismo delito que se le imput¨® a Cano. La agente Asunci¨®n L¨®pez Arias dej¨® su puesto para felicitar las Navidades a unos compa?eros. Vicente Salvador est¨¢ ingresado en la prisi¨®n militar de Alcal¨¢-Meco desde el pasado 29 de enero, donde permanecer¨¢ hasta finales de marzo. El agente no acudi¨® a su puesto durante dos d¨ªas pero avis¨® con antelaci¨®n a sus mandos y aport¨® la baja m¨¦dica tras su enfermedad.

La AUGC reivindica que no se aplique la justicia castrense a los guardias por sus faltas de servicio.