Los rebeldes de Hait¨ª amenazan con tomar la capital en unos d¨ªas
La polic¨ªa de Aristide prepara la defensa de Puerto Pr¨ªncipe ante el avance de las milicias
Las barricadas y machetes de los chimeres, y los polic¨ªas del Gobierno de Jean Bertrand Aristide a¨²n enteros, aguardan en la capital de Hait¨ª al comandante insurrecto Guy Phillipe, quien, despu¨¦s de asaltar Cabo Haitiano, prometi¨® tomar Puerto Pr¨ªncipe "en dos o tres d¨ªas" y ocupar todo el territorio nacional en quince. La oposici¨®n pol¨ªtica rechaz¨® la violencia miliciana, pero en ella conf¨ªa para derrumbar la presidencia del ex sacerdote, cuyo mandato termina en el a?o 2006. La agrupaci¨®n antigubernamental exigi¨® ayer su renuncia el 18 de marzo.
La anarqu¨ªa imperaba ayer en Cabo Haitiano, hacia cuya reconquista marchan refuerzos oficiales, mientras leales de Aristide eran detenidos all¨ª por los rebeldes, que registraban casa por casa en su b¨¢rbara persecuci¨®n. Estados Unidos despach¨® 50 marines para proteger su embajada y que ayer llegaron al aeropuerto, en tanto que Francia, colonizadora de Hait¨ª, y Alemania pidieron a sus nacionales que abandonen el pa¨ªs. No obstante, la conquista de la capital no ser¨¢ empresa f¨¢cil si las dotaciones policiales y las partidas civiles que controlan sus accesos, muchos con pistolas y armas largas, mantienen el tipo y el aviso del comandante Philippe no es baladronada. "Dios nos envi¨® a Aristide", dec¨ªa uno.
Los agentes apenas presentaron batalla durante la arremetida del domingo contra la segunda ciudad del pa¨ªs, que concluy¨® con m¨¢s 10 muertos, ni la poblaci¨®n del enclave portuario norte?o cerr¨® filas contra la soldadesca ocupante, secundada por turbas que saquearon e incendiaron. "S¨®lo algunos se enfrentaron a machetazos con nosotros", admiti¨® Louis Jodel Chamblain, que dirigi¨® los escuadrones de la muerte de la dictadura del general Raoul Cedras (1991-94).
El hostigamiento para desmoralizar a los polic¨ªas prosigui¨® ayer con la incursi¨®n de un grupo armado contra puesto situado en una colina que circunda Puerto Pr¨ªncipe. Los agentes huyeron. "No tengan miedo". El 19 de febrero, Aristide pidi¨® a los polic¨ªas que "utilizar¨¢n el arma de la inteligencia, uni¨¦ndose al pueblo". La recomendaci¨®n fue in¨²til porque el pueblo de las localidades tomadas no se moviliz¨® en su defensa y los agentes se dieron a la fuga.
El cuerpo de polic¨ªa est¨¢ integrado por 5.000 hombres, la mayor¨ªa acantonados en la capital. No hay cifras ciertas sobre el n¨²mero de miembros del Frente de Resistencia para la Liberaci¨®n y la Reconstrucci¨®n de Hait¨ª, algunos cientos, seg¨²n algunas estimaciones, que irrumpe a bordo de todos terrenos en golpes de mano de perfil castrense. Phillipe fue comisario de Cabo Haitiano y se acompa?a de ex militares de Cedr¨¢s. El Ej¨¦rcito fue abolido en el a?o 1995. Esa soldadesca controla total o parcialmente cinco de las nueve provincias de Hait¨ª.
Las gestiones diplom¨¢ticas prosiguen sin apenas avances porque fue ignorada la ¨²ltima propuesta de EE UU, Canad¨¢, la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA) y los pa¨ªses del CARICOM (Comunidad del Caribe): respetar la presidencia de Aristide hasta el final (termina en 2006), pero recortando sus poderes al nombrar un primer ministro independiente que forme Gobierno y prepare nuevas elecciones. El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, se pidi¨® ayer a la oposici¨®n que reflexionen durante 24 horas, sobre este nuevo plan: el mandato de Aristide podr¨¢ ser interrumpido si incumple sus compromisos.
"Jam¨¢s cumpli¨® su palabra y no tiene legitimidad, salvo la que le otorga la comunidad internacional", dijo ayer en conferencia de prensa Evans Paul, dirigente de Convergencia Democr¨¢tica y Grupo de los 184, que agrupa a la oposici¨®n. "La propuesta de paz le arranca todos los dientes, pero sigue siendo tenaz y peligroso incluso con las enc¨ªas infectadas".
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