Empacho de anillos

En realidad han premiado las nueve horas de El se?or de los anillos m¨¢s que su ¨²ltima parte, El retorno del rey, que aisladamente es una de las pel¨ªculas m¨¢s incomprensibles que jam¨¢s se hayan visto. "Han dado un Oscar a cada uno de sus falsos finales", brome¨® el presentador Billy Cristal. No se han estrujado la sesera los acad¨¦micos de Hollywood al dejarse llevar por el asombro ante este gran espect¨¢culo visual por encima de la calidad de otras pel¨ªculas nominadas. Pleno total: 11 estatuillas sobre 11 nominaciones. La primera vez que ocurre.

Dado que El se?or de los anillos lo acaparaba todo, el resto era pan comido. ?C¨®mo no premiar Buscando a Nemo como el mejor largometraje de animaci¨®n? ?C¨®mo no destacar la canadiense Las invasiones b¨¢rbaras como la mejor de habla no inglesa? (aunque a¨²n no conocemos en nuestro territorio las dem¨¢s finalistas). Cuando los de Hollywood hacen pi?a no hay quien les pare. Estuvieron firmes en la neutralidad de los discursos. Los ganadores hablaron de sus familiares m¨¢s a¨²n que los espa?oles en los pasados Goya, incluido Tim Robbins, quiz¨¢s por haber sido el primero en subir al escenario. Fue excepci¨®n Sean Penn, que al menos se refiri¨® a la falsedad de las armas de destrucci¨®n masiva, y hasta el propio Billy Cristal, que hizo alusiones a varios temas considerados tab¨², aunque a veces con su dudoso gusto. No falt¨® el homenaje a las fuerzas de ocupaci¨®n en Irak, con el soldado Ryan (Tom Hanks) en primer plano, quiz¨¢s compensando el antimilitarismo de The fog of war, documental ganador sobre el ex secretario de Defensa norteamericano Robert McNamara durante la guerra de Vietnam. "Si la gente pudiera pensar y reflexionar sobre ciertas ideas y preguntas de mi filme, quiz¨¢ he hecho algo bueno. Tengo el sentimiento de que nos estamos hundiendo en un hoyo", declar¨® su director, Errol Morris. Pero los acad¨¦micos estuvieron parcos en todo, incluso en el homenaje al veterano y en ocasiones genial Blake Edwards. Ni se pusieron en pie. S¨®lo lo hicieron ante Sean Penn.

No fue, pues, el cine lo que m¨¢s premiaron, sino el audiovisual. El se?or de los anillos es un espect¨¢culo rotundo, no hay duda, y El retorno del rey su mejor exponente, aunque s¨®lo sus entusiastas saben matizar entre una y otras partes. Otras buenas pel¨ªculas se quedaron a medias o ni siquiera fueron consideradas. No hagan caso: El se?or de los anillos no lo es todo.