"El PP no cala ni en Andaluc¨ªa ni en Catalu?a"
Se calcula que son unos 800.000 los andaluces de nacimiento que viven en Catalu?a. La mayor¨ªa emigr¨® en las d¨¦cadas de 1960 y 1970. Tanto ellos como sus hijos siguen vinculados, de una u otra manera, a su tierra de origen, donde muchos tienen familia y amigos, y a la que viajan a menudo. Por eso, no es de extra?ar que, en general, se sientan concernidos por las elecciones auton¨®micas. Aunque no votan, Andaluc¨ªa tambi¨¦n es su casa y les preocupa su futuro. El canal Andaluc¨ªa TV, la oferta por sat¨¦lite de Canal Sur -que reciben en sus hogares a trav¨¦s de Digital +- y la prensa local, que leen en Internet, son las ventanas a las que suelen asomarse para seguir con detalle el desarrollo de la campa?a. Algunos de de ellos se han prestado a explicar a EL PA?S c¨®mo la perciben a 1.000 kil¨®metros de distancia.
"El PP ha extendido el 'caso Carod' a todas partes; tambi¨¦n a Andaluc¨ªa"
Jos¨¦ Mar¨ªa Reyes es uno de ellos. Catedr¨¢tico de Literatura espa?ola en la Universidad de Barcelona, naci¨® hace 51 a?os en Lora del R¨ªo (Sevilla). Lleva en la capital catalana desde 1974, pero en Andaluc¨ªa siguen su madre y sus hermanos. ?l regresa un par de veces al a?o, a descansar junto al mar de Lepe, donde, dice, posee "una casita". Reyes opina que la coincidencia entre las elecciones generales y las auton¨®micas desvirt¨²a la campa?a andaluza. "Entiendo que pol¨ªticamente es una buena decisi¨®n del presidente Manuel Chaves, porque de esta manera se aprovecha el tir¨®n de los socialistas, pero si se separaran ambos procesos pol¨ªticos, estoy convencido de que la campa?a de las auton¨®micas tendr¨ªa un mayor peso dentro de la conciencia de los andaluces. Ahora, acaban votando a Zapatero, o sea al PSOE, o a Rajoy, o sea al PP", comenta.
La confluencia de ambos procesos provoca, a su juicio y al de los consultados, que la campa?a de las generales acabe imponiendo la agenda a las andaluzas. "Se tratan asuntos relacionados con el Gobierno central, cuando deber¨ªa hablarse m¨¢s de los d¨¦ficit internos", analiza Reyes. Javier Berrocal piensa de manera parecida. Cordob¨¦s de 32 a?os, lleg¨® a Barcelona hace cinco y medio. Es operador de c¨¢mara y obtuvo el Goya al mejor cortometraje documental, en la ¨²ltima edici¨®n de los premios, por Los ni?os del Nepal. "Cuestiones como el terrorismo y las luchas pol¨ªticas generales entre PSOE y PP han centrado hasta ahora la campa?a, cuando los problemas estrictamente andaluces se est¨¢n tocando tangencialmente", lamenta Berrocal.
Jos¨¦ Manuel P¨¦rez Tornero es profesor de Ciencias de la Comunicaci¨®n en la Universidad Aut¨®noma de Barcelona, este almeriense de 49 a?os vino a Barcelona a estudiar la carrera en 1972 y aqu¨ª se qued¨®. En Andaluc¨ªa vive su familia y tiene grandes amigos, con los que, seg¨²n cuenta, suele discutir "amistosamente" de pol¨ªtica. "El PP", afirma, "ha extendido el caso Carod a todas partes". "El terrorismo, lo indican todos los sondeos sociol¨®gicos, no es un tema que interese a los ciudadanos en primer lugar y, sin embargo, el discurso pol¨ªtico del PP lo est¨¢ amplificando en todas partes". Llu¨ªs Cabrera coincide: "El PP andaluz basa su campa?a en id¨¦nticos postulados que el partido a nivel general. Sus dirigentes critican, por ejemplo, al tripartito catal¨¢n. Su modelo de pa¨ªs es unitario, ni siquiera est¨¢n c¨®modos en un Estado auton¨®mico, y, en este sentido, les ha ido muy bien que estallara el caso Carod para sus intereses". Cabrera naci¨® hace 49 a?os en Arbuniel, provincia de Ja¨¦n, un pueblecito de la sierra Magina. Emigr¨® a Barcelona con su familia con s¨®lo 9 a?os y actualmente preside la Fundaci¨®n Taller de M¨²sics, un prestigioso centro dedicado a la formaci¨®n y promoci¨®n del flamenco y el jazz con sello discogr¨¢fico propio. Ha reformado la casa de su abuela, en Arbuniel, donde pasa temporadas. "All¨ª", describe, "me reencuentro con los sabores, los colores y los silencios de mi infancia".El profesor P¨¦rez Tornero est¨¢ casi seguro de que el PP andaluz no sacar¨¢ r¨¦ditos de la instrumentalizaci¨®n que est¨¢ haciendo del tripartito catal¨¢n. "Esta equiparaci¨®n de la izquierda con el independentismo que le interesa difundir al PP no creo que vaya a cuajar en Andaluc¨ªa, al menos entre los votantes progresistas. La derecha es otra cosa, claro", apunta. Augura adem¨¢s que ni en asuntos en los que el PP se ha empe?ado a enfrentar a Andaluc¨ªa con Catalu?a los andaluces se van a dejar enga?ar. "Est¨¢ claro que ni en Catalu?a ni Andaluc¨ªa penetra el PP".
Todos los entrevistados dan por segura, como las encuestas, una abultada victoria socialista. "Intuyo que puede haber un desplome del PP, y eso da emoci¨®n a los resultados. Tambi¨¦n ser¨¢ sugerente su lectura a nivel general, al estar la candidata popular, Te¨®fila Mart¨ªnez, alineada claramente con Rodrigo Rato", indica Javier Berrocal. El catedr¨¢tico de Literatura Jos¨¦ Mar¨ªa Reyes cree que el resultado de Andaluc¨ªa no va a modificar sustancialmente el "panorama pol¨ªtico actual". "La andaluza", considera, "es una sociedad bastante tradicional, le dan cierto miedo los cambios, y en algunos aspectos ha condicionado extraordinariamente su desarrollo".
"La idea del futuro de Andaluc¨ªa", aventura, "pasa porque desde el poder se potencie una especie de clase media. En el programa de Chaves ya se contempla el fomento de las peque?as y medianas empresas, y eso me parece muy bien. Andaluc¨ªa podr¨ªa ser puntera, porque tiene recursos para ello, pero el Gobierno debe impulsar un salto a la modernidad de verdad. Esa segunda modernizaci¨®n de la que habla Chaves es, en mi opini¨®n, el buen camino. Aunque me gustar¨ªa que estuviera apoyada por IU".
Los entrevistados coinciden en que el futuro Gobierno andaluz deber¨ªa seguir luchando para erradicar los t¨®picos y tambi¨¦n la imagen folclorista que suele darse. "Con Andaluc¨ªa se ha hecho mucha demagogia y hay que rebatir de una vez que los andaluces vivan de subsidios", dice Cabrera.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.