Almuerzo en soledad

Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero almorz¨® en soledad. Por supuesto no le faltaba gente para compartir mesa pero pidi¨® que le dejaran solo. Hab¨ªa estado toda la ma?ana, tras votar con su esposa, Sonsoles Espinosa, en la sede de su partido con sus colaboradores: Jos¨¦ Blanco, Jes¨²s Caldera, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, Carme Chac¨®n, Consuelo Rum¨ª, Trinidad Jim¨¦nez, Diego L¨®pez Garrido, Cristina Narbona, Enrique Mart¨ªnez, entre otros, estuvieron con ¨¦l intercambiando las primeras impresiones. Pero el n¨²cleo de sus conversaciones se centraba siempre en el atentado terrorista. Lleg¨® el mediod¨ªa y Zapatero quiso estar solo y pensar en los escenarios que se abr¨ªan para ¨¦l, para su partido y, sobre todo, para Espa?a, seg¨²n fuera el resultado electoral.

Sus colaboradores aseguran que su obsesi¨®n est¨¢ en que un pa¨ªs para avanzar y progresar necesita estar unido y que el Gobierno tiene que atender los intereses generales. Su reproche a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, durante toda la campa?a, ha sido que el presidente saliente ha enfrentado a sectores, territorios y a los ciudadanos en general. Y pasaron las 10 de la noche y Zapatero vio c¨®mo sus colaboradores le abrazaban, y algunos lloraban. ?l manten¨ªa la calma pero quien le conoce asegura que estaba fuertemente conmovido.

Cuando la victoria estuvo clara pidi¨® que llamaran a su padre, a su hermano Juan y a su esposa, que estaban en otras dependencias. Despu¨¦s de breves momentos de intimidad con su familia se dirigi¨® a los militantes y simpatizantes que estaban agolpados en la sede y llevaban horas coreando "Zapatero, presidente". Entre el gent¨ªo estaba el anterior secretario general, Joaqu¨ªn Almunia, y el ex presidente Felipe Gonz¨¢lez a quien result¨® in¨²til que le pidieran que saliera a la calle con Zapatero a saludar a los cientos de simpatizantes que aguardaban. "Presidente a la primera", dec¨ªan. Es verdad, lo ha conseguido en la primera ocasi¨®n que ha concurrido a unas elecciones, algo que no pudo hacer Aznar ni Gonz¨¢lez. Pero es que esta victoria y esta campa?a se han parecido mucho a las de Gonz¨¢lez en 1982, y Zapatero no ha querido disimularlo ya que ha estado llamando "a provocar un cambio como el del 82".