Seguimiento masivo de la huelga de vigilantes de parqu¨ªmetros

Los cerca de 500 vigilantes que se encargan de custodiar las zonas de aparcamiento regulado de Madrid secundaron ayer masivamente el paro convocado por los sindicatos para mejorar sus condiciones laborales. Los automovilistas, por tanto, pudieron aparcar en los lugares pintados de verde (reservados para residentes) y de azul (reservados para visitantes) sin tener que pagar y sin miedo a ser multados.

Por lo general, los vigilantes de los parqu¨ªmetros patrullan las zonas reservadas con una eficacia rese?able: el automovilista que aparca sin el correspondiente ticket de pago recibe la sanci¨®n a los pocos minutos. No en vano, estos vigilantes se pasean por su ¨¢rea asignada inspeccionando cada coche.

Ayer no fue as¨ª: en el barrio de Ibiza no se vio en toda la ma?ana un solo vigilante. En esta zona, que, por lo general, tiene por la ma?ana plazas libres de aparcamiento, ayer no se encontraba ni un hueco vac¨ªo. La causa hab¨ªa que buscarla en la ausencia de controladores y en que la impunidad se hab¨ªa ense?oreado de nuevo con la ciudad: por todas partes hab¨ªa coches mal aparcados, ocupando zonas verdes y azules sin el distintivo adecuado.

Igual ocurri¨® en otras zonas de la capital, a juzgar por los datos de los sindicatos. Seg¨²n UGT y CCOO, los vigilantes de los parqu¨ªmetros han seguido la huelga casi totalmente (un 98%). Los sindicatos reclaman una mejora en las condiciones laborales. Un vigilante de parqu¨ªmetros cobra al mes unos 600 euros. "Y con eso nadie puede vivir en Madrid", comenta un l¨ªder sindical.Emilio Lardero, de UGT, anunci¨® ayer que la falta de acuerdo entre los trabajadores y la patronal (formada por una uni¨®n temporal de tres empresas: Eysa, Dormier y Setex-Sufi) empujar¨¢ a los vigilantes a convocar nuevos paros para el 24 y 25 de marzo. "No hay ni intentos de aproximaci¨®n por parte de la patronal, que se niega a hablar", a?adi¨® el sindicalista.

Lardero asegura que en otras ciudades que cuentan con el sistema de aparcamiento regulado, como Barcelona, Valencia o Pamplona, existe un convenio colectivo que regula las condiciones laborales de los trabajadores. "Pero aqu¨ª no", a?ade Lardero.

Los trabajadores reclaman que su sueldo mensual alcance los 1.000 euros. "No lo pedimos ahora, de inmediato, sino que se prometa esa subida y se vaya haciendo progresivamente. Pero lo que ofrece la empresa es, exclusivamente, una subida de 18 euros al mes. Es decir, un salario de 618 euros al mes, y con eso tampoco se puede vivir en un ciudad como Madrid", a?adi¨® el representante sindical.

Los vigilantes de los parqu¨ªmetros ponen al d¨ªa cerca de 7.200 denuncias. La multa por haber estacionado indebidamente llega a 42 euros. El Ayuntamiento, al a?o, ingresa, gracias a estas sanciones, 19 millones de euros. Las empresas, por su parte, reciben cada a?o de parte del Ayuntamiento 12,5 millones de euros. En la capital existen actualmente 42.000 plazas de aparcamiento en la calle dependientes de las normas de los parqu¨ªmetros: bien reservadas a los residentes, bien sujetas a una tarifa.

"Sensible"

Un portavoz de la Concejal¨ªa de Seguridad asegura que el Ayuntamiento "es sensible" a las reivindicaciones de los trabajadores, pero que son las empresas "quienes deben negociar con los empleados". Ahora bien, el Ayuntamiento tiene previsto "descontar" del pago a las empresas la jornada en que el servicio no se ha realizado "m¨¢s una penalizaci¨®n".

Los trabajadores, adem¨¢s de los paros previstos para los d¨ªas 24 y 25 de marzo, "no descartan", en palabras de Lardero, "convocar huelgas que lleguen a durar semanas". Si estos paros se prolongan, el Ayuntamiento, seg¨²n especific¨® el portavoz de la Concejal¨ªa de Seguridad, "puede llegar hasta a rescindir el contrato con estas empresas". "En ese caso", prosigui¨®, "se har¨ªa un nuevo concurso para que todas las empresas puedan participar".

Entre los automovilistas, ayer hab¨ªa de todo: desde los que se quejaban porque, sin parqu¨ªmetros, era mucho m¨¢s dif¨ªcil encontrar un aparcamiento, aunque fuera pagando, a los que est¨¢n de acuerdo con la huelga, sobre todo porque as¨ª no tienen que abonar ning¨²n tipo de tarifa por encontrar un hueco donde dejar el coche.