Magia finlandesa

La fascinaci¨®n por el fr¨ªo la llev¨® a plantarse con su familia en Finlandia, a "mucho bajo cero" y fuera de temporada tur¨ªstica. Lo mejor fue que all¨¢ Pap¨¢ Noel est¨¢ de guardia permanente y la nieve augura Navidad en pleno abril. El resto nos lo cuenta esta actriz, pocos d¨ªas antes de estrenar su ¨²ltima pel¨ªcula, El principio de Arqu¨ªmedes.

Ya sabemos el d¨®nde y el cu¨¢ndo. H¨¢blenos de con qui¨¦n viaj¨® a Finlandia.

Con toda mi familia. ?ramos un grupo de 20 que inclu¨ªa padres, hermanos y sobrinos de entre cuatro y 11 a?os. Llegamos a Helsinki y estaba todo helado, pero pateamos las calles donde el dorado de las c¨²pulas contrastaba con el blanco de la nieve. Aquella cultura es tan distinta a la nuestra que nos pareci¨® un lugar ex¨®tico.

Pero su destino era Rovaniemi, al norte del pa¨ªs.

S¨ª, fuimos hasta all¨ª en avi¨®n. El pueblecito es del estilo del de la serie Doctor en Alaska. ?bamos forrados de ropa, s¨®lo se nos ve¨ªan los ojos, pero hac¨ªa sol y todo estaba precioso. El plan era montar en trineos y disfrutar del bosque y de los r¨ªos helados, para terminar asando salchichas en una hoguera. Era emocionante ver el avance de los trineos cargados de ni?os.

Estampa navide?a

habemus.

Claro, los m¨¢s peque?os preguntaban que por qu¨¦ era Navidad. Pero lo mejor fue contemplar la aurora boreal. El cielo se iba poniendo de colores: verde, azul, rosa, en espirales que se enroscaban sobre s¨ª mismas. Pura magia.

Supongo que catar¨ªa los vahos de la consabida sauna.

S¨ª, pero no pude tirarme despu¨¦s al r¨ªo helado, que es lo suyo. Tambi¨¦n prob¨¦ la comida de all¨¢, especialmente el salm¨®n, que era delicioso. Pero segu¨ªamos siendo t¨ªpicamente espa?oles cuando, por ejemplo, par¨¢bamos el furg¨®n en medio de la carretera congelada para tomarnos unos bocadillos con cerveza.

Muy ca?¨ª. ?Alg¨²n consejo para los viajeros que no conozcan Finlandia?

Que si van a Helsinki no dejen de tomar el tren que sale de all¨ª rumbo a San Petersburgo. La entrada en Rusia es un espect¨¢culo, por el cambio que se aprecia y da idea de las diferencias socioecon¨®micas. Y San Petersburgo es un lugar tan bello y decadente...