Villaviciosa quiere instalar c¨¢maras para vigilar una lujosa urbanizaci¨®n

El Ayuntamiento de Villaviciosa de Od¨®n, gobernado por el PP, va a pedir a la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT) que le permita instalar c¨¢maras de videovigilancia en la lujosa urbanizaci¨®n El Bosque. Una solicitud similar fue rechazada el a?o pasado por otra instituci¨®n, la Delegaci¨®n del Gobierno, tras un informe desfavorable de la Comisi¨®n de Garant¨ªas de la Videovigilancia de la Comunidad de Madrid, seg¨²n informaron fuentes municipales. Ahora, la petici¨®n no se va a presentar ante la Delegaci¨®n del Gobierno, sino ante la DGT.

Los vecinos quieren instalar un sistema de seguridad a trav¨¦s de la grabaci¨®n de las matr¨ªculas de los veh¨ªculos que entran en esta lujosa colonia y con c¨¢maras en puntos estrat¨¦gicos. El gobierno municipal reconoce que la zona es segura, ya que cuenta con vigilantes privados y se ha reforzado la presencia de la Polic¨ªa Local. Adem¨¢s, el futuro cuartel de la Guardia Civil estar¨¢ instalado en las inmediaciones de esa urbanizaci¨®n. Por ello, la solicitud no se presenta alegando motivos de seguridad ciudadana, sino de seguridad vial.

La Ley de Videovigilancia de 4 de agosto de 1997 establece serias restricciones a la instalaci¨®n de c¨¢maras en la v¨ªa p¨²blica para grabar o controlar la circulaci¨®n de viandantes. Respeta al m¨¢ximo la intimidad de las personas y rechaza que la captaci¨®n de im¨¢genes pueda incluir zonas privadas, como domicilios. Adem¨¢s, obliga a los organismos p¨²blicos a informar a la gente de manera clara y permanente de la existencia de dichas videoc¨¢maras fijas.

La Comisi¨®n de Garant¨ªas de la Videovigilancia, comit¨¦ que vela por el correcto cumplimiento de dicha ley y que encabeza el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), rechaz¨® en su reuni¨®n del 23 de marzo de 2003 la solicitud del Ayuntamiento de Villaviciosa de Od¨®n para poner c¨¢maras en la urbanizaci¨®n El Bosque. Este organismo trat¨® esta petici¨®n en dos ocasiones (28 de noviembre de 2002 y 20 de marzo de 2003) y las rechaz¨® al comprobar que pod¨ªa afectar a la intimidad de los particulares que vivieran en la zona.

Ahora, el Ayuntamiento pretende retomar el proyecto y solicitar a la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico que autorice las c¨¢maras de vigilancia. En este caso, justificar¨¢ su demanda en la necesidad de controlar el tr¨¢fico.

La Florida

El cauce reglamentario utilizado por los vecinos y el Ayuntamiento de Villaviciosa contrasta con la postura adoptada por los 300 propietarios de chal¨¦s de la urbanizaci¨®n La Florida, en el distrito de Moncloa-Aravaca de la capital, que en agosto de 2003 instalaron, sin contar con los permisos correspondientes, varias c¨¢maras en las calles de acceso a la colonia. Quer¨ªan evitar, seg¨²n aseguraron entonces, los robos que sufr¨ªan desde hac¨ªa tiempo.

S¨®lo despu¨¦s de cuatro meses, el pasado noviembre, el Ayuntamiento de Madrid oblig¨® a los propietarios de esta elitista urbanizaci¨®n a desmontar todas las c¨¢maras que hubieran colocado, ya que ello infring¨ªa la ley que protege la intimidad de las personas y la que regula el tratamiento automatizado de datos de car¨¢cter personal (la Lortad), adem¨¢s de vulnerar la Ley de Videovigilancia.

Por otra parte, la Comisi¨®n de Garant¨ªas de la Videovigilancia -la misma que deneg¨® la autorizaci¨®n a la urbanizaci¨®n El Bosque de Villaviciosa- ha renovado el permiso de funcionamiento de las c¨¢maras que vigilan el Museo de Esculturas al Aire Libre instalado en el paseo de la Castellana de Madrid.

La ley de 1997 obliga a justificar y renovar anualmente los permisos de instalaci¨®n de c¨¢maras en la v¨ªa p¨²blica. En su reuni¨®n del pasado 30 de marzo, los miembros de la comisi¨®n renovaron esa autorizaci¨®n. El sistema de seguridad del museo de la Castellana consta de 10 c¨¢maras controladas de d¨ªa y noche por un polic¨ªa municipal. Las im¨¢genes son visionadas en unos monitores instalados en un local montado bajo el puente de Eduardo Dato, donde est¨¢n colocadas las esculturas. El objetivo es impedir ataques a las 17 obras que componen el museo. ?sta fue la primera instalaci¨®n autorizada en la regi¨®n al amparo de la Ley de Videovigilancia de 1997. Ocho placas informativas con la inscripci¨®n "Museo al Aire Libre de la Castellana. Videovigilancia por la Polic¨ªa Municipal" avisan a los viandantes que pasan por el Museo al Aire Libre de que est¨¢n transitando por una zona vigilada por c¨¢maras.

Dos casos m¨¢s

Desde su creaci¨®n, la Comisi¨®n de Garant¨ªas de Videovigilancia ha estudiado cuatro casos. Adem¨¢s de la urbanizaci¨®n El Bosque de Villaviciosa de Od¨®n y del Museo de Escultura al Aire Libre de la capital, rechaz¨® en cuatro ocasiones, entre 1999 y 2000, la colocaci¨®n de 12 c¨¢maras en la Gran V¨ªa de Majadahonda, la arteria principal de la localidad, en la que hay numerosos comercios.

Los jueces y la Delegaci¨®n del Gobierno en Madrid se?alaron que s¨®lo autorizar¨ªan una c¨¢mara que enfocara directamente a la Casa Consistorial. Pero para ello pon¨ªan determinadas condiciones: que s¨®lo grabara a determinadas horas, que se identificase claramente a "la persona o grupos de personas que van a manejar y controlar el equipo de videovigilancia" y que el Ayuntamiento "informara al p¨²blico de manera clara y permanente de la existencia de las videoc¨¢maras fijas". Al final, como no cumpl¨ªa todos los requisitos, la petici¨®n fue desestimada por la comisi¨®n el 22 de junio de 2000.

El cuarto caso estudiado fue el de las c¨¢maras de control del tr¨¢fico que coloc¨® el Ayuntamiento de Alcobendas en 1999. La comisi¨®n consider¨® entonces que no le correspond¨ªa emitir un informe, ya que la ley recoge que, en materia de circulaci¨®n vial, el permiso es competencia de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico. Este organismo s¨ª autoriz¨® finalmente las c¨¢maras.