El drama de los rehenes desata una crisis de popularidad en el Gobierno japon¨¦s

El primer ministro japon¨¦s, Junichiro Koizumi, se enfrenta a una de las situaciones m¨¢s delicadas que ha vivido desde que accedi¨® al poder hace tres a?os. A pesar del fuerte rechazo de gran parte de la poblaci¨®n, el a?o pasado logr¨® sacar adelante una ley que le permiti¨® enviar 1.100 soldados a Irak en misiones humanitarias, de los cuales han llegado 550. Ahora se encuentra con que tres civiles japoneses se encuentran secuestrados por un grupo que amenaza con ejecutarlos si Jap¨®n no retira sus tropas. El Gobierno se niega ya que a su juicio trabajan para reconstruir el pa¨ªs.

El vicepresidente estadounidense, Dick Cheney, de visita en Tokio, salud¨® ayer la decisi¨®n japonesa y prometi¨® "hacer todo lo posible para ayudar" a resolver la crisis. "Apoyamos incondicionalmente la posici¨®n que ha tomado el primer ministro con respecto al problema de los secuestrados japoneses", dijo Cheney, que inici¨® el s¨¢bado una gira asi¨¢tica de una semana, que incluye tambi¨¦n China y Corea del Sur.

Durante la reuni¨®n que mantuvieron los dos dirigentes, el vicepresidente estadounidense agradeci¨® el despliegue de las Fuerzas de Autodefensa en la ciudad de Samawah, en el sur de Irak, donde los soldados japoneses est¨¢n llevando a cabo labores de reconstrucci¨®n. Cheney record¨® que Washington "aprecia especialmente" la cooperaci¨®n de Tokio en la llamada guerra contra el terror y calific¨® la relaci¨®n entre los dos pa¨ªses de "totalmente crucial". Koizumi, por su parte, reiter¨® su compromiso de seguir colaborando con Estados Unidos. Los militares japoneses comenzaron a llegar a Samawah en enero para llevar a cabo proyectos de purificaci¨®n de agua y reparaci¨®n de escuelas y otras infraestructuras. Se trata de la primera vez que Jap¨®n env¨ªa tropas a una zona en la que existen combates desde que las Fuerzas de Autodefensa fueron creadas hace medio siglo.

El primer ministro dijo, no obstante, que la participaci¨®n de la comunidad internacional, incluida la ONU, es esencial en el proceso de reconstrucci¨®n de Irak. A lo que Cheney respondi¨® que Estados Unidos colaborar¨¢ con los dem¨¢s pa¨ªses, as¨ª como con Naciones Unidas, para efectuar el traspaso de poder al Gobierno provisional iraqu¨ª el 30 de junio, una fecha que, seg¨²n dijo, la Administraci¨®n de Bush est¨¢ decidida a cumplir, a pesar del incremento de violencia que se ha registrado en Irak las ¨²ltimas semanas. Cheney advirti¨® de que espera que la Coalici¨®n se vea sometida a una "presi¨®n m¨¢xima" durante este tiempo, con objeto de torpedear el proceso.

Las familias de los tres japoneses (Noriaki Imai, de 18 a?os, un escritor independiente; Soichiro Koriyama, de 32, fot¨®grafo de prensa, y Nahoko Takato, de 34, un voluntario que trabaja con ni?os) han pedido ayuda a cinco partidos pol¨ªticos japoneses, tanto del Gobierno como de la oposici¨®n, para que se acepten las exigencias de los secuestradores. Algunos parientes han acudido tambi¨¦n a programas de televisi¨®n. Koizumi ha rechazado reunirse con las familias debido a "la gravedad" de la situaci¨®n.

Los secuestros ponen de manifiesto la dificultad con la que se encuentra el primer ministro para caminar entre el apoyo incondicional a la invasi¨®n estadounidense de Irak y el compromiso japon¨¦s, desde la II Guerra Mundial, de no inmiscuirse en conflictos extranjeros.

El secuestro de extranjeros tambi¨¦n protagonizar¨¢ la visita que hoy inicia Cheney a Pek¨ªn, ya que entre los retenidos en los ¨²ltimos d¨ªas ha habido siete ciudadanos chinos.