?Es prescindible Aimar?
Los t¨¦cnicos del Valencia defienden al as y dicen que ser¨¢ clave en el final del torneo
Ocho victorias consecutivas del Valencia sin el concurso de Pablo Aimar han abierto el debate sobre el peso real del as argentino en el equipo. Algunos incluso llegaron a afirmar que es un jugador prescindible para ese Valencia-apisonadora que barr¨ªa sin ¨¦l al Deportivo, el Celta, el Mallorca, el Racing, el Murcia, el Zaragoza y, dos veces, al Girondins de Burdeos en la Copa de la UEFA. Adem¨¢s, la irrupci¨®n de Angulo como segundo delantero y su inmenso poder¨ªo f¨ªsico tambi¨¦n contribuyeron a que el Valencia se colocara como l¨ªder y se olvidara de su flamante media punta argentino, envuelto en una lesi¨®n tras otra casi desde el comienzo de la segunda vuelta.
Ahora bien, llegado el final del campeonato, el Valencia s¨®lo ha empatado de manera ag¨®nica los tres ¨²ltimos partidos, sin apenas ideas ofensivas, y Aimar parece definitivamente recuperado de su lesi¨®n de pubis. Listo para enfrentarse el domingo al Betis en Mestalla. ?Lo necesita su entrenador, Rafa Ben¨ªtez?
"Nos dar¨¢ claridad en el ¨²ltimo pase, aceleraci¨®n y desaceleraci¨®n", dice el ayudante de Ben¨ªtez
"Por supuesto que s¨ª", responde el ayudante de Ben¨ªtez en el Valencia, Antonio L¨®pez; "nos vendr¨¢ muy bien para aportarnos esa energ¨ªa que empieza a faltarle al equipo. Sobre todo, la claridad en el ¨²ltimo pase y lo que supone para los rivales, mucho m¨¢s pendientes de ¨¦l que de cualquier otro jugador. Los adversarios juegan normalmente en funci¨®n de Aimar y eso nos beneficia. Pablo, adem¨¢s, nos proporciona aceleraci¨®n y desaceleraci¨®n en el transcurso del partido".
"Me molesta que, porque ganemos, se diga que no hace falta Aimar", abunda L¨®pez, "como si con ¨¦l no hubi¨¦ramos ganado". Entre otras cosas, la Liga conquistada por el cuadro valenciano hace dos temporadas, con un arre¨®n final tanto de Aimar como de Baraja que result¨® determinante. Un Baraja que lleg¨® muy fresco a esa ¨²ltima parte de la Liga debido a una largu¨ªsima lesi¨®n de rodilla. "A Aimar hay que valorarlo tanto futbol¨ªstica como humanamente", a?ade L¨®pez, que fue seleccionador de Bolivia y t¨¦cnico del Lleida y el Sporting de Gij¨®n.
No es ning¨²n secreto, sin embargo, que, futbol¨ªsticamente, Aimar no es del todo feliz en el Valencia. Le falta contacto con el bal¨®n. "No tenemos mucho la pelota ni intentamos un juego vistoso (...). Jugamos m¨¢s atr¨¢s y nos quedan 50 metros para llegar al arco", se ha lamentado t¨ªmidamente el argentino, quien, tras una estupenda primera vuelta, apenas ha podido disputar dos partidos consecutivos en la segunda. Ha sumado cuatro tantos y seis pases de gol en tan s¨®lo nueve encuentros completos.
A sus 24 a?os de edad, Aimar a?ora los tiempos del River Plate, en los que todo el juego pasaba por sus pies. "En Argentina tocaba much¨ªsimos m¨¢s balones, como le pasaba a Riquelme, que estaba a 60 metros de la pelota y se giraban para pas¨¢rsela", explica Aimar, que lleg¨® en diciembre de 2000 al club de Mestalla, que pag¨® por ¨¦l unos 24 millones de euros.
Tras recibir el domingo al Betis, el Valencia tendr¨¢ dos visitas seguidas comprometidas -al Sevilla y el Villarreal, ambos luchando por alcanzar un puesto en la pr¨®xima Copa de la UEFA-, para acabar el campeonato en Mestalla ante el Albacete.
Entre medias, la vuelta de las semifinales de la Copa de la UEFA, precisamente ante el Villarreal, en Mestalla, el 6 de mayo. La ida fue un empate sin goles.
"Somos duros de pelar. Lucharemos hasta el ¨²ltimo aliento", advierte L¨®pez, que apuesta por Aimar para que el Valencia consiga la que ser¨ªa la sexta Liga de su historia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.