El instituto armado asume la investigaci¨®n de los explosivos y las armas del 11-M

La Comisar¨ªa General de Informaci¨®n del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa ha dejado en manos de la Guardia Civil la investigaci¨®n para averiguar el origen exacto de los explosivos utilizados en el 11-M y sobre c¨®mo obtuvo el comando que se suicid¨® en Legan¨¦s (Madrid) los tres fusiles ametralladores y las dos pistolas halladas entre los escombros del piso que los terroristas volaron por los aires.

La polic¨ªa ya sabe que quienes facilitaron los explosivos a los terroristas fueron el ex minero asturiano Jos¨¦ Emilio Su¨¢rez Trashorras y el portero de discoteca marroqu¨ª Raf¨¢ Zuheir, ambos confidentes policiales para asuntos de drogas. Pero el ex minero no ha aclarado el procedimiento, si hubo robo o no, ni de qu¨¦ polvor¨ªn proced¨ªan.

Los investigadores est¨¢n convencidos de que proceden de las explotaciones asturianas pertenecientes a la firma Caolines de Merill¨¦s denominadas Conchita (en Belmonte de Miranda) y Colladas y Anexas (Salas), pero los responsables de ambas minas niegan que hayan sufrido robo alguno. Dado que la Guardia Civil se encarga del control de explosivos, la polic¨ªa ha entregado la investigaci¨®n sobre este particular, ya que incluso hay sospechas de la posible existencia de una red de tr¨¢fico de explosivos. M¨¢s dudas ofrecen las armas, ya que las dos metralletas Sterling de carga lateral son "reliquias" del Ej¨¦rcito brit¨¢nico, y la Czes "es poco moderna". Adem¨¢s, entre los restos del piso de Legan¨¦s se han encontrado "dos culatines" de pistola, ambas pertenecientes, supuestamente, a armas del calibre nueve mil¨ªmetros. Una de las culatas se parece a la del arma que portaba el fan¨¢tico que le¨ªa un texto de amenaza en el v¨ªdeo hallado en Legan¨¦s tras la voladura.