El recinto de la Cartuja, el recinto hist¨®rico y la ciudad
La Oficina del Plan de Sevilla no hab¨ªa respondido p¨²blicamente al editorial de un peri¨®dico local ni a los argumentos del Parque Tecnol¨®gico Cartuja 93 y de su C¨ªrculo de Empresarios acerca de c¨®mo se llevar¨¢ a efecto la propuesta de integraci¨®n urban¨ªstica del recinto de la Expo del 92 a la ciudad. El editorial dec¨ªa: "La Cartuja se dise?¨® para la Muestra Universal como una ciudad jard¨ªn que en principio iba a tener una proporci¨®n de 80% de zonas verdes por 20% de zonas edificadas". He aqu¨ª finalmente, la respuesta del Ayuntamiento: aumento de 2.000 plazas de aparcamiento, 58.000 metros cuadrados de edificabilidad para beneficiar a Cartuja 93 y 80.000 para vivienda dentro del recinto de la Expo.
Desde luego los interesados han aceptado la introducci¨®n de viviendas pero, no frente al centro y adem¨¢s piden que para vincular el recinto tecnol¨®gico con el recinto hist¨®rico se construyan dos puentes m¨¢s. La ciudad se planifica negociando.
"Plantear el debate sobre la Isla de la Cartuja bajo el dilema de viviendas s¨ª, viviendas no, o suplantar la discusi¨®n sobre la funci¨®n de la Isla de la Cartuja bajo el debate sobre Cartuja 93, es distorsionar el plano en el que deben formularse las diversas posiciones, dice el director del Plan quien pide opiniones sobre el verdadero problema: "la funci¨®n que debe desempe?ar la Isla de la Cartuja en la ciudad. As¨ª, traslada la discusi¨®n desde lo particular (ciudad privada-empresarial) a lo general (ciudad de la civilidad). Hace referencia a la inter-relaci¨®n funcional del todo (Sevilla post-metropolitana) con sus partes y la relaci¨®n entre estas, (por ejemplo Cartuja-Centro, etc.)
Es parad¨®jico pensar que mientras el recinto tecnol¨®gico de la Cartuja, con apenas doce a?os de historia, razonablemente se "apuesta por transformarlo en un ¨¢mbito urbano (con residentes) capaz de sostener una calidad de vida ciudadana, donde sea posible desarrollar un sentimiento de territorialidad compartida" y con ello, incorporarlo plenamente a la ciudad; en cambio, sin ninguna explicaci¨®n, se tolere el vaciamiento residencial del milenario recinto hist¨®rico, por ejemplo entre otros, del Barrio Santa Cruz que soporta la "moderna privatizaci¨®n" de sus espacios p¨²blicos: pago por el ingreso al Patio de los Naranjos, cancelas en algunos adarves, veladores en sus calles y plazas; saturaci¨®n del uso lucrativo: tiendas, restaurantes y apartamentos de alto estanding de uso ocasional; debido a lo cual la funci¨®n del centro se est¨¢ descontextualizando, el equipamiento de la "ciudad local" se est¨¢ transfiriendo al equipamiento de la "ciudad global", convirtiendo as¨ª al Barrio Santa Cruz en un Barrio/Parque Tem¨¢tico dedicado a los turistas, que simpatiza a sus empresarios, embelesa a los turistas y no disgusta/incomoda a los sevillanos; ?o s¨ª?.
En Espa?a, despu¨¦s de haber adoptado los criterios de la "gentrificaci¨®n" (expulsi¨®n del barrio, de sus vecinos de toda la vida), se est¨¢ comenzando a trasladar desde USA sin pudor, una t¨¦cnica moderna de privatizaci¨®n de la ciudad de los ciudadanos; se trata de gestionar los centros hist¨®ricos con t¨¦cnicas de marketing como si fueran una gran superficie comercial (sin residentes) al aire libre, porque finalmente -se proclama- todos los transe¨²ntes son "compradores".
Actualmente, el Parque Tecnol¨®gico de la Cartuja tiene mucha actividad econ¨®mica pero poca vida y carece de residentes; ese es el factor de vitalidad que resulta conveniente introducir. Para que no le pase al Barrio Santa Cruz lo que hoy a la Cartuja, es impostergable imponer un ¨ªndice que relacione el n¨²mero de metros cuadrados destinados a viviendas (para j¨®venes) con los metros cuadrados destinados a tiendas para s¨ª hacer posible la continuidad de la vida en este hermoso barrio sevillano.
La t¨¦cnica urban¨ªstica puede concretar un modelo de crecimiento pero no un modelo de ciudad porque ¨¦ste, m¨¢s all¨¢ de disquisiciones te¨®ricas y de las determinaciones urban¨ªsticas, supone la participaci¨®n protag¨®nica de la sociedad (vecinos) ya que, de su grado de implicaci¨®n democr¨¢tica depender¨¢ la calidad de la ordenaci¨®n del espacio, uno de los factores importantes de la calidad de vida.
Los crecimientos modernos de Sevilla han respondido a modelos urban¨ªsticos (planes) pero, incluso cuando se han concretado en un producto t¨¦cnicamente correcto, cual es el caso de algunos pol¨ªgonos residenciales, no han conseguido plasmar autom¨¢ticamente un modelo de ciudad agradable, con una m¨ªnima calidad est¨¦tica y una opci¨®n de proximidad vecinal e identidad ciudadana; sus espacios p¨²blicos matizados son abstractos, no orientan ni tienen un significado simb¨®lico que diferencie, identifique y cohesione a su poblaci¨®n, como sucede en el centro hist¨®rico. Fueron proyectados, producidos en cadena y levantados al margen de un modelo urbano, sin contar con la participaci¨®n de los ciudadanos que los iban a "vivir" ni con la implicaci¨®n de los vecinos de Sevilla. Todo ello adem¨¢s, como resultado del sometimiento de la ciudad a los principios de la Carta de Atenas. Menos mal, los tiempos han cambiado.
La participaci¨®n ciudadana no surge por generaci¨®n espont¨¢nea ni al amparo de opiniones autorizadas, ni bajo el est¨ªmulo electoral ni a la sombra de la militancia pol¨ªtica ni es cabal cuando, despu¨¦s de las consultas coyunturales no adquiere continuidad. El tipo y la calidad de la participaci¨®n ciudadana, en parte obedece a la experiencia acumulada sometida a manipulaciones, llena de frustraciones, de promesas incumplidas; al mismo tiempo se hace realidad en el d¨ªa a d¨ªa y adquiere voluminosa entidad cuando los ciudadanos constatan: la eficiencia de los servicios p¨²blicos, la respuesta concreta a sus demandas, el buen juicio (sentido com¨²n), la credibilidad de sus dirigentes y la garant¨ªa de una transparente democracia. Sin lugar a dudas, la participaci¨®n ciudadana es una asignatura pendiente de los ciudadanos pero, m¨¢s todav¨ªa de los t¨¦cnicos y de los pol¨ªticos.
Sevilla
Jorge Benavides Solis es profesor Titular de la ETSA.
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