Para entender la cuesti¨®n vasca

?ste es un libro ¨²til, como dice su t¨ªtulo, para que lectores interesados encuentren respuestas claras a las preguntas que suelen plantearse a prop¨®sito de Euskadi: cu¨¢les son hoy los rasgos de la singularidad vasca, si es tan excepcional su cultura en relaci¨®n a la de los territorios vecinos, en qu¨¦ consisti¨® el r¨¦gimen foral, por qu¨¦ arraig¨® el nacionalismo, el papel del franquismo en su legitimaci¨®n, si ETA es una expresi¨®n del conflicto vaso o el conflicto vasco mismo. Pero tambi¨¦n es un libro ¨²til como recopilaci¨®n de argumentos de quienes defienden, frente a ETA, el derecho de todos los habitantes de Euskadi a su libertad, y frente a los nacionalistas, su derecho a no serlo sin que ello les convierta en ciudadanos de segunda. Es, por tanto, una especie de hoja de ruta para orientarse en el laberinto vasco sin dejarse despistar por los t¨®picos que desde su fundaci¨®n combate el colectivo ?Basta ya!

El libro supone tambi¨¦n, en cuanto reconstrucci¨®n ordenada de causas y efectos, una defensa del papel jugado por las asociaciones c¨ªvicas nacidas al calor de la movilizaci¨®n de Ermua en 1997 en el cambio de actitudes que ha permitido: disputar al radicalismo abertzale el control de la calle; afirmar la existencia de una comunidad no nacionalista cuyos intereses deb¨ªan ser tenidos en cuenta; dar visibilidad social a las v¨ªctimas del terrorismo. El impulso de esas asociaciones ha influido en otras de signo pacifista o cristiano, y todas ellas en los partidos e instituciones, contribuyendo a crear las condiciones para que la derrota policial de ETA se convierta en derrota pol¨ªtica. Si esa perspectiva es hoy m¨¢s veros¨ªmil se debe a que no todos se han limitado a esperar y ver. ?Basta ya! ha puesto en evidencia a quienes tomaron prudente distancia, con argumentos inveros¨ªmiles, al comprobar que ETA ya no atacaba s¨®lo a polic¨ªas y guardias, sino tambi¨¦n a profesores, jueces o periodistas, entre otros; y no se lo han perdonado.

Es una obra combativa, pero no sectaria. La parte hist¨®rica, especialmente la relativa al sistema foral -limpieza de sangre, los vascos como espa?oles primitivos, la hidalgu¨ªa universal-, es tal vez la de m¨¢s inter¨¦s. La coexistencia de interpretaciones tradicionalistas y liberales de la foralidad, la batalla por imponer la igualdad jur¨ªdica, la rivalidad entre Vizcaya y Guip¨²zcoa, la identificaci¨®n entre singularidad y privilegio, la continuidad entre proyectos ancestrales de limpieza ¨¦tnica y planes posmodernos de eliminaci¨®n de discrepantes, son algunos de los asuntos planteados. Es un acierto pedag¨®gico haber intercalado en el texto relatos, documentos, testimonios, datos cuantitativos que ilustran la argumentaci¨®n con detalles significativos.

La existencia de m¨¢s de 40.000 personas amenazadas y de unas 1.500 con alguna forma de protecci¨®n policial por haber ejercido el derecho a discrepar, los efectos electorales del ¨¦xodo de ciudadanos vascos motivado por la extorsi¨®n y el clima de intimidaci¨®n, el proyecto abertzale de censo por adscripci¨®n, que permitir¨ªa depurarlo de oponentes, el ventajismo nacionalista del plan Ibarretxe, la larga impunidad de las mutas de acoso que ha convertido en quimera el principio de igualdad ante la ley son algunas de las realidades inc¨®modas que denuncia el libro; pero tampoco reh¨²ye otras que tambi¨¦n lo son para los demasiado convencidos de su verdad, como la guerra sucia y su papel en la reproducci¨®n generacional del terrorismo. Una obra, por todo ello, muy recomendable para no perder de vista realidades que quienes se benefician de ellas quisieran hacer olvidar.