Barcelona invertir¨¢ 435 millones de euros en la promoci¨®n de vivienda protegida

El futuro no est¨¢ claro. El mercado de la vivienda puede seguir como est¨¢ y tambi¨¦n pinchar en cualquier momento. Las dos cosas, afirm¨® ayer Joan Clos, alcalde de Barcelona, ser¨ªan malas. La intenci¨®n del municipio es incidir, a trav¨¦s de inversiones municipales y de otras administraciones, de forma que llegue al mercado una importante cantidad de pisos protegidos que atempere el precio de la vivienda libre. Barcelona destinar¨¢ 435 millones en cuatro a?os, con lo que garantiza 10.000 viviendas protegidas, pero el objetivo es que se construyan 37.000 hasta 2010.

Hay dos factores relacionados, dijo Clos, con la evoluci¨®n al alza del precio de la vivienda: el tipo de inter¨¦s y el coste del suelo. Un cambio al alza de los tipos hipotecarios ser¨ªa catastr¨®fico para la econom¨ªa de no pocas familias y, tambi¨¦n, para el sector de la construcci¨®n. La soluci¨®n es incidir en el mercado libre atemperando precios. Y eso se consigue, dijo, facilitando y promocionando la construcci¨®n y rehabilitaci¨®n de vivienda protegida. La pol¨ªtica de vivienda municipal desde ahora hasta 2010 tendr¨¢, asegur¨®, tres ejes: la rehabilitaci¨®n, el fomento del alquiler y facilitar el acceso a los sectores m¨¢s desprotegidos.

La perspectiva pol¨ªtica est¨¢ a favor de que se logre el objetivo de moderar los precios, no tanto la econ¨®mica. El equipo municipal, justific¨® el primer teniente de alcalde, Xavier Casas, ha trabajado en dos hip¨®tesis. En la mejor de ellas, la ciudad gana 100.000 viviendas, de las que 37.000 tienen alg¨²n tipo de protecci¨®n; en el caso menos optimista, el crecimiento se limita a 65.000 viviendas, de las que tienen protecci¨®n 19.000.

Multiplicar por cinco

Los gobiernos central y aut¨®nomo deber¨ªan multiplicar las partidas para rehabilitaci¨®n. Pero no de un modo m¨¢s o menos t¨ªmido, dijo Casas, sino multiplicando la cifra por cinco, como poco. Casas habl¨® de una inversi¨®n necesaria de 300 millones de euros, frente a los 40 millones previstos. Como primera providencia, el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido destinar una partida de 435 millones a promover vivienda p¨²blica protegida durante el periodo 2004-2007. Esta cantidad, que supone un incremento del 85% respecto a lo invertido en vivienda en la pasada legislatura municipal, garantiza la construcci¨®n de unas 10.000 viviendas protegidas o asequibles. Por "asequibles" el Ayuntamiento entiende con protecciones de otros tipos: sea al alquiler o con la recuperaci¨®n de las viviendas de precio tasado.

La actuaci¨®n sobre n¨²cleos urbanos consolidados, rehabilitando edificios e incluso barrios completos, busca limitar el consumo insostenible, dijo Clos, de terreno. La pol¨ªtica de rehabilitaci¨®n, a juicio del alcalde, choca con los intereses de los sectores financiero y constructor, que prefieren concentrarse en la vivienda de nueva construcci¨®n.

Con todo, el Ayuntamiento barcelon¨¦s entiende que el plan presentado ayer debe coordinarse con los que se lleven a cabo en el resto de municipios del ¨¢rea metropolitana, ya que una pol¨ªtica de vivienda que pretenda resolver los problemas no puede desarrollarse sin tener en cuenta la realidad metropolitana.

Asimismo, Clos y Casas reclamaron modificaciones en la legislaci¨®n vigente, tanto en lo referente a las ayudas fiscales como en lo relativo a las indemnizaciones por expropiaci¨®n de suelo. En este segundo caso, Clos puso de manifiesto el absurdo de que haya que pagar a precio de vivienda libre el suelo expropiado para construir pisos protegidos.

En el primer caso, explic¨® Casas, las ayudas fiscales suponen en Espa?a unos 3.000 millones de euros anuales, casi 10 veces los 350 millones de euros destinados a ayudas directas. Una parte importante de estas viviendas son segundas residencias declaradas como primeras para aprovechar las deducciones fiscales. En Barcelona hay un censo de 757.298 viviendas, pero s¨®lo 594.451 son residencia principal y de ellas el 68% son de propiedad y el 28,5% de alquiler. En el conjunto del ¨¢rea metropolitana hay 1.368.760 viviendas, de las que el 75,7% son de propiedad. El alquiler cae al 20,9%. Si se toma toda Catalu?a como referente, el porcentaje de alquiler baja hasta el 16,6%. El n¨²mero de segundas residencias declaradas sube hasta casi el mill¨®n: 998.299.

El mercado de alquiler es a¨²n menor en el conjunto de Espa?a: el 14%. Y sobre todo, es m¨ªnima la incidencia del alquiler social. Espa?a, donde este tipo de vivienda es s¨®lo del 2%, ocupa el ¨²ltimo lugar en la UE, lejos de pa¨ªses como Francia (17%), Reino Unido (21%), Suecia (22%), Alemania (26%) u Holanda (35%). No menos preocupante es la situaci¨®n de las viviendas nuevas de protecci¨®n en toda Catalu?a. En el periodo 2000-2003, el 22,2% de las 18.638 viviendas construidas en Barcelona era de protecci¨®n; en Catalu?a, sobre 257.539, la protecci¨®n ca¨ªa al 8,6%.