Reencuentro de Menese

Nunca se hab¨ªa ido, pero en los ¨²ltimos tiempos la vida profesional de Jos¨¦ Menese fue un tanto irregular por diversos avatares. En Fuenlabrada, el domingo, nos sorprendi¨® con un aspecto estupendo, delgado, rejuvenecido, la voz de sus mejores tiempos y las maneras, tambi¨¦n, de sus mejores tiempos. O sea que cant¨®. Por derecho, obviamente, pues en este cantaor ser¨ªa impensable otra cosa. Con grandeza, como corresponde a quien manej¨® siempre el cante con la rotundidad de un poder expresivo total. Con belleza; sobre todo, con belleza. Hizo un recital extenso y pr¨®digo en estilos que se oyen raramente -cante de trilla, nana, tangos de M¨¢laga, petenera, caracoles, guajira-, m¨¢s esas dos columnas fundamentales de lo jondo que son la sole¨¢ y la siguiriya. Menese, un maestro, ayer como hoy.