Cinco muertos en el hundimiento parcial de una terminal en un aeropuerto de Par¨ªs

A las 6.57, en el aeropuerto Charles de Gaulle de Par¨ªs, mientras los polic¨ªas estaban acordonando una zona del flamante -inaugurado hace menos de un a?o- muelle de embarque, su estructura de hormig¨®n cedi¨®, se hundi¨® y arrastr¨® en su ca¨ªda toneladas de acero y cristal al tiempo que una pasarela que conduc¨ªa a un avi¨®n estacionado. Dos horas m¨¢s tarde, el prefecto de la regi¨®n, Michel Sapin, hac¨ªa p¨²blico "un balance de cinco personas muertas y cuatro heridas, una de ellas muy grave", una cifra relativamente moderada vista la importancia del hundimiento.

"Afortunadamente, el tr¨¢fico a¨¦reo no era muy intenso. S¨®lo estaban en el muelle tres aparatos, uno procedente de Newark, otro de Johanesburgo y un tercero con destino a Praga", dijo Sapin. Los ministros de Transportes y del Interior, desplazados hasta el lugar del drama, no contemplaron en ning¨²n momento que el hundimiento pudiera ser debido a un atentado.

Si los polic¨ªas hab¨ªan empezado a acordonar la zona cuando se produjo el accidente se debe a que hab¨ªan constatado fisuras en el techo del muelle y detectado polvillo de cemento que se desprend¨ªa de ellas. "Es demasiado pronto para saber qu¨¦ ha ocurrido o para delimitar responsabilidades, pero es la estructura de la b¨®veda lo primero que ha ca¨ªdo", precis¨® Hubert de Mesnil, director general de Aeropuertos de Par¨ªs (ADP).

El muelle de embarque protagonista del drama tiene 650 metros de longitud -son 30 los que se han hundido- y la forma de un t¨²nel oval con grandes superficies acristaladas. Est¨¢ pensado para acoger a 10 millones de pasajeros al a?o, admite 17 aviones simult¨¢neamente, entre ellos dos Airbus A380, es decir, de 550 plazas. Su construcci¨®n cost¨® 750 millones de euros y no estaba terminado. El edificio estaba reservado en la pr¨¢ctica a las compa?¨ªas integrantes del llamado Sky Team (AeroM¨¦xico, Alitalia, CSA, Delta Airlines, Korean Airlines y Air France) y juega un papel determinante en la expansi¨®n de Air France y su voluntad de convertir su aeropuerto en el primero de Europa. Mientras 200 personas, entre bomberos, t¨¦cnicos, m¨¦dicos y enfermeras trabajaban en el rescate y atenci¨®n de las v¨ªctimas, se abr¨ªa una investigaci¨®n judicial que ocupar¨¢ a varias decenas de jueces y polic¨ªas.

El 10 de junio de 2003, la comisi¨®n de seguridad no dio el visto bueno para la entrada en funcionamiento de la terminal y el muelle de embarque. Los expertos estimaron que las fijaciones de ciertas luces no ofrec¨ªan garant¨ªas, mientras los sindicatos denunciaban las presiones de ADP y Air France -gran inversor en la obra, con 50 millones de euros- para precipitar la apertura. Una semana m¨¢s tarde, el muelle de embarque era abierto al p¨²blico.

La terminal hundida es una de las seis con que cuenta un aeropuerto por el que pasan cada a?o casi 50 millones de personas y por el que llegan el 20% de las importaciones francesas y parten el 30% de sus exportaciones. En Roissy-Charles de Gaulle trabajan 75.000 personas y el aeropuerto est¨¢ muy bien comunicado, pues dispone de dos autopistas, metro y estaci¨®n de tren de alta velocidad. En sus hoteles duermen 27 millones de clientes al a?o. Cuenta con cuatro pistas, mientras espera poder inaugurar otra m¨¢s. Si su extensi¨®n es llevada hasta el final, el aeropuerto podr¨ªa absorber hasta 80 millones de pasajeros al a?o.