La muerte de Umberto Agnelli reabre la incertidumbre en Fiat

Umberto Agnelli, presidente de Fiat, falleci¨® ayer de madrugada en Tur¨ªn, a los 69 a?os, v¨ªctima de un c¨¢ncer. El a?o pasado, la misma enfermedad hab¨ªa acabado con Gianni, su hermano mayor, patriarca durante d¨¦cadas de la m¨¢s c¨¦lebre familia industrial italiana. El c¨¢ncer mat¨® tambi¨¦n en 1997 a Giovanni Alberto, hijo de Gianni y heredero del imperio automovil¨ªstico. La desaparici¨®n de Umberto dej¨® en el aire el futuro de Fiat, que parec¨ªa empezar a superar una crisis profund¨ªsima, y el de la propia familia, marcada por las tragedias. Todas las miradas se dirigieron hacia John Elkann, nieto de Gianni, de 27 a?os.

El linfoma de Umberto Agnelli era conocido desde que fue diagnosticado, dos meses atr¨¢s, pero nadie esperaba un desenlace tan inmediato. Su presencia resultaba todav¨ªa imprescindible. El segund¨®n de los Agnelli, que a mediados de los setenta tuvo que ceder el puesto de consejero delegado de Fiat a Cesare Romiti por presi¨®n del todopoderoso Enrico Cuccia, patr¨®n de Mediobanca, dedic¨® su exilio a trabajar con ¨¦xito en otros negocios familiares (la financiera Ifi, Ferrari, Maserati, el diario La

Stampa, la Juventus de Tur¨ªn) y regres¨® en 2003 para sustituir en la presidencia a su reci¨¦n fallecido hermano. Fiat estaba en la ruina. Hab¨ªa perdido 4.200 millones de euros en 2002 y depend¨ªa de un matrimonio con General Motors que se frustr¨®. En el pasado ejercicio, sin embargo, Umberto redujo los n¨²meros rojos a 1.900 millones. Y se esperaba cerrar las cuentas de 2004 cerca del equilibrio.

Umberto hac¨ªa falta para pilotar Fiat hasta 2005, un a?o crucial porque parte de la deuda bancaria de la sociedad (la deuda financiera neta asciende a 4.400 millones de euros) se convertir¨¢ en acciones y las entidades acreedoras se har¨¢n con la mayor¨ªa del capital. Pero Umberto, al que la familia vel¨® en privado, ya no estar¨¢. A diferencia del multitudinario funeral del Avvocato Gianni Agnelli, despedido el 24 de enero de 2003 por decenas de miles de turineses en una jornada de dolor ciudadano, el de Umberto ser¨¢ discreto, como deseaba. La familia rechaz¨® incluso las coronas de flores. Aconsej¨®, en su lugar, donaciones a las asociaciones de lucha contra el c¨¢ncer.

Los hermanos Agnelli quedaron hu¨¦rfanos muy pronto. En 1935 muri¨® el padre, Eduardo, en accidente a¨¦reo. En 1945 muri¨® la madre, Virginia, en accidente automovil¨ªstico. El infortunio se ceb¨® tambi¨¦n con sus primog¨¦nitos varones. Giovanni Alberto, hijo de Umberto y heredero designado, falleci¨® por un raro c¨¢ncer de est¨®mago en 1997, con apenas 33 a?os. El hijo mayor de Gianni, Edoardo, un joven enfrentado a la familia, de ideas anticapitalistas y admirador del ayatol¨¢ Jomeini, se suicid¨® en 2000 arroj¨¢ndose desde un puente a una autopista.

Gianni y Umberto decidieron que el sucesor hab¨ªa de ser John Elkann, nieto del Avvocato, nacido en Nueva York en 1976, hijo de Margherita Agnelli y del escritor Alain Elkann. Gianni no quiso que el muchacho estudiara en Oxford y le mantuvo en Tur¨ªn, donde se licenci¨® en Ingenier¨ªa y donde el abuelo le ten¨ªa siempre cerca: navegaban juntos, volaban juntos en el avi¨®n privado para seguir los desplazamientos de la Juve y hablaban continuamente del negocio automovil¨ªstico. Como Gianni, que en su juventud trabaj¨® de inc¨®gnito en Detroit, John, apodado Jaki, fue enviado en secreto a factor¨ªas brit¨¢nicas, brasile?as y polacas, y vio de cerca los entresijos de la industria. A los 22 a?os ingres¨® en el consejo de administraci¨®n de Fiat. Su t¨ªo, el rebelde Edoardo, coment¨® antes de matarse que la entrada de Jaki en el sanedr¨ªn familiar se parec¨ªa "al gesto con el que Cal¨ªgula nombr¨® senador a su caballo".

Pero Yaki es a¨²n muy joven, quiz¨¢ demasiado. Las grandes accionistas supervivientes, su madre Margherita y las ancianas hermanas de Gianni y Umberto, podr¨ªan optar por un presidente de transici¨®n, como Giuseppe Morchio, actual consejero delegado, o Franz Grande Stevens, el abogado de la familia. Tambi¨¦n podr¨ªan optar por Gabriele Galateri di Genola, el m¨¢s estrecho colaborador de Umberto, hoy presidente de Mediobanca. Las bolsas, en cualquier caso, mostraron ayer una reacci¨®n emocional de respeto por el fallecimiento y confianza en el criterio de la familia: las acciones de Fiat subieron un 2,26%, en una jornada de p¨¦rdidas generalizadas.