EE UU consolida su pol¨ªtica iraqu¨ª con el apoyo del G-8 y la ONU

El resultado de la cumbre del G-8 (EE UU, Reino Unido, Alemania, Jap¨®n, Francia, Italia y Canad¨¢) m¨¢s Rusia, que comienza hoy a trav¨¦s de reuniones bilaterales entre las delegaciones, ya est¨¢ escrito. La Administraci¨®n de Bush ha plasmado con ¨¦xito su plan para conseguir, a trav¨¦s de la nueva resoluci¨®n de la ONU, que incluye a Espa?a, y de los documentos ya pactados en el G-8, revestir de apoyo pol¨ªtico su presencia en Irak e insuflar nueva vida para su iniciativa del Gran Oriente Pr¨®ximo, que ahora cambiar¨¢ su nombre por el del Amplio Oriente Pr¨®ximo y Norte de ?frica.

La organizaci¨®n del G-8 funciona como una maquinaria, aunque nadie es perfecto. Cada medio de comunicaci¨®n ha pagado 350 d¨®lares, despu¨¦s de una rebaja desde los 700 solicitados por la empresa subcontratista, por una mesa de trabajo, una silla y la conexi¨®n con Internet, pero ayer el sistema se vino abajo durante largo rato. La que s¨ª est¨¢ engrasada es la pol¨ªtica de comunicaci¨®n. Ejemplo: el periodista pide por correo electr¨®nico hablar con un elevad¨ªsimo asesor de Bush para Oriente Pr¨®ximo, y poco despu¨¦s recibe una diligente llamada de su secretaria, quien le anuncia que el encuentro se celebrar¨¢ a las 10.15, hora local.

A la Casa Blanca lo que le ha quitado el sue?o, y por lo que ahora su inquilino respira m¨¢s tranquilo, es el apoyo que est¨¢ recibiendo para capear la situaci¨®n en Irak y Oriente Pr¨®ximo. Y tiene sus leg¨ªtimas razones. Bush est¨¢ en plena campa?a electoral y su tal¨®n de Aquiles est¨¢ en dicha regi¨®n. Jim Wilkinson, asesor del presidente Bush y consejero para medios de comunicaci¨®n en asuntos de Seguridad Nacional, no tiene inconveniente en admitir su objetivo en esta reuni¨®n. "?Los temas claves? Obviamente, la iniciativa del Amplio Oriente Pr¨®ximo. En noviembre de 2003, el presidente Bush anunci¨® su estrategia de libertad, democracia y prosperidad en la amplia regi¨®n de Oriente Pr¨®ximo. Esperamos que el presidente y sus socios se re¨²nan con los l¨ªderes del Oriente Pr¨®ximo para lanzar un nuevo programa de asociaci¨®n".

Los llamados l¨ªderes de la regi¨®n que acuden al exclusivo balneario de Sea Island, una diminuta isla pegada a la costa del estado sure?o de Georgia, son Afganist¨¢n, Argelia, Bahrein, Jordania, Turqu¨ªa y Yemen. Ni el presidente egipcio, Hosni Mubarak, ni el rey de Marruecos, Mohamed VI, dos invitados especiales, estar¨¢n presentes. Un tercero que s¨ª quer¨ªa participar, el emirato de Qatar, ha sido declarado naci¨®n non

grata, al parecer porque su cadena de televisi¨®n, Al Yazira, est¨¢ en la lista negra de la Administraci¨®n de Bush.

Pero la gran sorpresa que Bush ha preparado ser¨¢ la presentaci¨®n en sociedad del designado presidente interino de Irak, Gazi al Yauar, quien lleg¨® la noche del martes a Sea Island en el m¨¢s riguroso secreto. Al Yauar, un hombre educado en Estados Unidos, es el s¨ªmbolo de la pol¨ªtica norteamericana.

El alto cargo de la Administraci¨®n de Bush, arquitecto de la pol¨ªtica en Oriente Pr¨®ximo, que acepta hablar con EL PA?S bajo condici¨®n de que no se reproduzca su nombre, explica que Al Yauar expresa el "cumplimiento de las promesas del presidente Bush sobre la transferencia de soberan¨ªa a los iraqu¨ªes", y, por ello, "su presencia aqu¨ª es m¨¢s que simb¨®lica". A juicio de este asesor, la designaci¨®n del nuevo Gobierno iraqu¨ª formaba parte de la estrategia de Bush desde el comienzo. "Pero no fue percibida como tal por los dem¨¢s aliados. Ahora se ha abierto una nueva etapa. Por ello, convergen dos procesos: la resoluci¨®n de la ONU, que ser¨¢ aprobada hoy , y el apoyo del G-8 al programa de fomento de la democracia y de las reformas pol¨ªticas y econ¨®mica en Oriente Pr¨®ximo", explica. Piensa que "con la que ha ca¨ªdo, Abu Ghraib incluido, nos dec¨ªan que nuestra pol¨ªtica iba a encallar, pero la reacci¨®n de los aliados ha sido la mejor que nadie pod¨ªa imaginar".

Ganar la paz

Hay funcionarios del Departamento de Estado que ahora vienen a reconocer, sotto

voce, que Francia ha demostrado estas semanas no tener sed de venganza, y evocan aquella frase del entonces canciller Dominique de Villepin, que arranc¨® inusuales aplausos en el Consejo de Seguridad de la ONU durante la recta final hacia la invasi¨®n de Irak, cuando dijo que EE UU podr¨ªa ganar, solo, la guerra, pero que nunca lograr¨ªa, solo, ganar la paz.

Los asesores de Bush han tomado buena nota de que el Gobierno espa?ol de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero ha apoyado la nueva resoluci¨®n de la ONU, que, como se?alan todas las televisiones, "legaliza el mando militar norteamericano sobre la fuerza multinacional". El alto cargo, que mantuvo un di¨¢logo con este peri¨®dico, se?al¨®: "El apoyo de Espa?a, precisamente, es tambi¨¦n el reflejo de esta nueva fase pol¨ªtica que se ha abierto. Tanto si se est¨¢ de acuerdo o en contra de la pol¨ªtica del nuevo Gobierno espa?ol, la situaci¨®n hoy es diferente. Hay un Gobierno interino, se traspasar¨¢ el poder y hay apoyo internacional". ?Tiene sed de venganza la Administraci¨®n de Bush por la retirada de las tropas espa?olas. "Hemos sentido una decepci¨®n. Sobre todo por el lenguaje tan suelto de los nuevos gobernantes. Pero ahora estamos en otra situaci¨®n".