El Egipcio preparaba un atentado inmediato en el metro de Par¨ªs

Rabei Osman el Sayed Ahmed, Mohamed el Egipcio, presunto organizador de los atentados del 11 de marzo en Madrid, preparaba un ataque en Par¨ªs, posiblemente para la pr¨®xima semana, cuando fue detenido el lunes en Mil¨¢n. En las conversaciones grabadas por la polic¨ªa italiana, El Egipcio y dos interlocutores, Mourad, que hablaba desde B¨¦lgica, y Yahia, desde Mil¨¢n, se refirieron en diversas ocasiones a una acci¨®n relacionada con el metro parisino para la que ya estaban preparados "145 euros" (la polic¨ªa lo interpreta como 145 kilos de explosivo) y un sistema de tel¨¦fonos m¨®viles para hacerlos estallar.

Mohamed era el contacto en Par¨ªs. En una conversaci¨®n del 29 de mayo, llena de referencias indirectas y palabras en clave, El Egipcio inform¨® a Mourad de que la situaci¨®n estaba "ci?¨¦ndose" y que Mohamed ya estaba "en movimiento" para recibir de un tunecino no identificado "145 euros". Esos "euros" deb¨ªan ser distribuidos entre Mohamed y un "hermano argelino". Mourad anunciaba que part¨ªa hacia Par¨ªs. El Egipcio, que se encaminaba tambi¨¦n hacia la capital francesa, ped¨ªa informaciones y "todo lo necesario sobre la ciudad, la red de metro y los controles policiales". "Todo est¨¢ preparado", afirmaba Mohamed. El 24 de mayo, El Egipcio y Mourad, a¨²n en B¨¦lgica, sostuvieron el siguiente di¨¢logo:

Egipcio. ?Podemos encontrarnos en Francia, si Dios quiere?

Mourad. Si puedes venir dentro de 20 d¨ªas a Francia, nos vemos en Francia, ?dentro de 20 d¨ªas! Si es m¨¢s... Yo, en 15 d¨ªas, habr¨¦ preparado ya todo lo m¨ªo.

E. ?Hay quien lo trae todo?

M. S¨ª, est¨¢ todo.

E. ?Me das los n¨²meros de esas personas?

M. ?Qu¨¦?

E. Los n¨²meros de esas personas.

M. S¨ª, no, la cosa no es dejarlo en el coche o as¨ª... ve directamente, arreglaremos un poco las cosas, ya sabes, las necesidades para un viaje normal.

E. Bien, intenta ir a Par¨ªs para reunirte con nuestro hermano Mohamed, dale todos los mapas necesarios y todos los tel¨¦fonos y los nombres que tenemos aqu¨ª.

M. Para esto hace falta un solo tel¨¦fono.

E. ?No! ?No se puede hablar de esto por tel¨¦fono!

Burlar a la polic¨ªa

En otra conversaci¨®n, el 2 de junio, El Egipcio aclaraba cu¨¢l era esa cosa de la que no se deb¨ªa hablar por tel¨¦fono, referida a la utilizaci¨®n de un solo tel¨¦fono. Explicaba a sus interlocutores c¨®mo activar una serie de tel¨¦fonos celulares a trav¨¦s de Internet, mediante un programa que permit¨ªa enviar un mismo mensaje SMS simult¨¢neamente a una serie de n¨²meros previamente establecidos. Despu¨¦s, El Egipcio se jactaba de burlar a la polic¨ªa.

E. En Alemania la cosa era repetitiva, ven¨ªan [la polic¨ªa] por sorpresa cada mes, dos meses, tres meses, pero les he hecho enloquecer, un d¨ªa me detuvieron y me liberaron enseguida, diciendo "no eres t¨²". Conozco un sistema para cambiar continuamente mis huellas dactilares, nunca son iguales, ellos ten¨ªan esa ley para detenerme cada dos o tres meses, y yo cambiaba continuamente mis huellas (...), ni los servicios americanos pueden encontrarme.

Yahia. C¨®mo, ?te las toman [las huellas] y no les funciona?

E. S¨ª, si quieres te lo ense?o, hoy tengo unas huellas y ma?ana otras, conozco una t¨¦cnica que oculta siempre tus huellas, yo s¨¦ qui¨¦n soy, ellos no saben qui¨¦n soy, eres clandestino pero circulas regularmente.

Y. ?Has estado en Austria?

E. S¨ª, estuve en Austria, hac¨ªa Austria y Alemania antes de trasladarme a Espa?a, tambi¨¦n en Espa?a utilic¨¦ diversas nacionalidades, jordano, egipcio, palestino, sirio... Hasta que mis amigos de T¨¢nger me han dicho "basta, que te descubrir¨¢n".

El Egipcio recomendaba tambi¨¦n una serie de casetes y CDs con rezos, consejos y canciones utilizados para la preparaci¨®n del "martirio" en atentados suicidas.

E. En particular, este casete tiene una voz indescriptible. Se te mete en las venas. Los de Espa?a la aprendieron todos de memoria, te da mucha seguridad y mucha tranquilidad. Elimina el miedo.

Y. Dame, dame una, que me la aprendo.

E. S¨ª, pero debes aprenderla de memoria.