Las ITV dividen al sector de la automoci¨®n
Importadores y concesionarios arremeten contra la falta de competencia en la inspecci¨®n de veh¨ªculos
En Espa?a, un 25% de los veh¨ªculos que est¨¢n obligados a hacerlo, no pasan la inspecci¨®n t¨¦cnica de veh¨ªculos (ITV), el ¨²nico sistema que vigila el mantenimiento t¨¦cnico del parque automovil¨ªstico, uno de los m¨¢s viejos de la Uni¨®n Europea, ya que el 35,4% de los coches tienen m¨¢s de diez a?os de antig¨¹edad. El a?o pasado debieran haber pasado la ITV un total de 9,4 millones de veh¨ªculos y s¨®lo lo hicieron 7,4 millones.
Con el norte com¨²n de mejorar la seguridad vial, los distintos grupos econ¨®micos del sector de la automoci¨®n se han dividido sobre el actual modelo de la inspecci¨®n en Espa?a, un mercado que mueve 250 millones de euros y que controlan 42 empresas ajenas al sector y que ejercen esta labor por concesi¨®n de los gobiernos de las comunidades aut¨®nomas.
Importadores (aglutinados en Aniacam) y concesionarios (en Faconauto) est¨¢n en contra del actual sistema, mientras que fabricantes, talleres y empresas concesionarias independientes del sector que lo pasan creen que es el modelo adecuado.
Ha abierto el fuego Germ¨¢n L¨®pez Madrid, presidente de Aniacam, la asociaci¨®n que aglutina a los importadores de veh¨ªculos. Tras criticar el escaso grado de competencia en el mercado espa?ol, pide que los poderes p¨²blicos acometan "la liberalizaci¨®n plena de las ITV, lo que evitar¨ªa numerosas molestias a los usuarios, aumentar¨ªa la competencia y eliminar¨ªa muchos autom¨®viles en mal uso que hoy no acuden a la inspecci¨®n".
El sector de las estaciones de ITV lo componen 42 empresas privadas ajenas a los fabricantes, a los concesionarios y a los importadores. En 2003, facturaron 250 millones de euros y realizaron su trabajo en 221 centros repartidos por el territorio espa?ol. Grupos como Agbar, FCC, Abengoa y Atisae cuentan con una fuerte presencia en este campo.
Para L¨®pez Madrid, el modelo que hay que seguir en Espa?a es el alem¨¢n, que cuenta con 1.000 puntos de ITV (el triple que en Espa?a) y otros 35.000 talleres certificados que permiten al cliente pasar la inspecci¨®n en el acto y que mejora la conciencia sobre la seguridad vial, verdadero leiv motiv de su precupaci¨®n.
Blas Vives, secretario general de Faconauto, que aglutina a los concesionarios, dice que en la actualidad no m¨¢s de cuatro grupos empresariales controlan el 60% del mercado, mientras que los concesionarios y los talleres se hallan fuera de este negocio donde hay escasa competencia, con unos precios muy parecidos, con una media de 35 euros.
Luis Rivas, secretario general de la patronal de las estaciones de ITV, Aeca, sale al paso de estas acusaciones. "Sabemos que hay una corriente de opini¨®n en nuestra contra en parte del sector de automoci¨®n. Creo que el actual sistema de concesiones es el mejor para dar calidad a las inspecciones y el ¨²nico que mantiene la fiabilidad por ser empresas independientes del sector", dice Rivas. A su juicio, la inspecci¨®n de veh¨ªculos en competencia feroz puede perder la calidad y eso es muy delicado para la seguridad, adem¨¢s de que no se cubrir¨ªa el servicio en las ¨¢reas menos rentables. De hecho, recuerda Rivas que hay comunidades como Extremadura y Asturias que hacen directamente la inspecci¨®n por ser un tema delicado. A su juicio, ser¨ªa un grave error que un empresario del sector de coches pudiera tener una estaci¨®n de ITV porque se producir¨ªa un conflicto de intereses. Carlos Mataix, director t¨¦cnico de la patronal Anfac, considera que en la actual situaci¨®n, apenas se producen reclamaciones, aunque esta asociaci¨®n considera que es absurdo que el decreto de 2003 abra la posibilidad de que los talleres inspeccionen y excluya a los concesionarios.
En Espa?a, desde 1981, los coches est¨¢n obligados a pasar la inspecci¨®n. La insuficiencia de la red de estaciones creada por el Ministerio de Industria llev¨® a una nueva modificaci¨®n en 1985 para agilizar la construcci¨®n de estaciones de ITV y dar entrada al capital privado que acced¨ªa a este servicio a trav¨¦s de la concesi¨®n administrativa. Asimismo, se traspasaron las funciones y servicios a las comunidades aut¨®nomas.
En 2000, con el PP en el Gobierno, un real-decreto ley ordenaba la liberalizaci¨®n de las ITV mediante la sustituci¨®n del r¨¦gimen de concesiones por el de autorizaci¨®n. La obtenci¨®n de autorizaci¨®n se conseguir¨ªa si el aspirante acreditaba una instalaci¨®n, cuyos requisitos t¨¦cnicos los fijar¨ªa un real decreto ley que se publicar¨ªa en cuatro meses.
Sin embargo, pasaron tres a?os sin fijarse esas condiciones. En 2003 un real decreto invalidaba de facto la liberalizaci¨®n aprobada en 2000 al introducir una serie de requisitos t¨¦cnicos que deben cumplir los particulares aspirantes a una estaci¨®n de inspecci¨®n.
Uno de esos obst¨¢culos, quiz¨¢ el principal, se produce al reconocer a las comunidades aut¨®nomas el poder de suspender las autorizaciones hasta que finalice el plazo de las concesiones actuales (la mayor¨ªa de ellas entre 2008 y 2010). Es decir, la situaci¨®n anterior de concesi¨®n se prorroga de hecho.
Para Germ¨¢n L¨®pez Madrid, es inadmisible que una norma de rango inferior (el real decreto de 2003) haya vaciado de contenido a la de 2000 (real-decreto ley) y que el resultado en la pr¨¢ctica sea que exista muy poca red, muy poca competencia en el sector y que varios grupos de empresas controlen una buena parte del mismo.
Por su parte, la Confederaci¨®n Espa?ola de Talleres de Reparaci¨®n de Autom¨®viles y Afines (Cetraa) est¨¢n de acuerdo en una mayor liberalizaci¨®n y echan de menos una mayor colaboraci¨®n de ellos con las estaciones de ITV aunque consideran que el nivel de seguridad y calidad de las inspecciones en Espa?a es similar al europeo.
Para los consumidores de la Asociaci¨®n de Automovilistas Europeos (AEA), cuanta m¨¢s liberalizaci¨®n, mejor, pero no ven bien que puedan pasar la inspecci¨®n los concesionarios y talleres. Mientras, para la OCU y la CEACU, lo importante es que se d¨¦ buen servicio y se inspeccione con rigor. El hecho de que se liberalice m¨¢s no lo garantiza, dicen, y se inclinan m¨¢s por el r¨¦gimen de concesi¨®n administrativa.
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