Llamazares convoca una asamblea extraordinaria para reformular "sin l¨ªmites" el proyecto de IU

La primera consecuencia del peor resultado de la historia de Izquierda Unida ser¨¢ una batalla interna. El coordinador general, Gaspar Llamazares, ha decidido convocar una asamblea extraordinaria en diciembre o enero para reformular "sin l¨ªmites" el proyecto. Ayer se reuni¨® con la mayor¨ªa que le apoya para preparar los cambios que sin duda abrir¨¢n una batalla con el sector cr¨ªtico. La idea es continuar en la senda de las reformas hacia el ecosocialismo que las resistencias del sector liderado por Francisco Frutos frenaron el a?o pasado. ?ste dijo ayer: "Esta direcci¨®n no est¨¢ capacitada para encauzar la pol¨ªtica de IU".

El modelo para la heterog¨¦nea mayor¨ªa que ha permitido a Llamazares seguir al frente de la federaci¨®n es Iniciativa per Catalunya. Es precisamente en esta comunidad aut¨®noma donde la coalici¨®n IU-ICV ha tenido los mejores resultados de toda Espa?a en las europeas. El ¨²nico lugar donde, de hecho, ha crecido en porcentaje de forma significativa respecto a las generales. En el resto de Espa?a, salvo Arag¨®n, la federaci¨®n ha ca¨ªdo respecto a las generales, y ha perdido m¨¢s de la mitad de sus votantes.

Llamazares ya trat¨® de impulsar estos cambios en la pasada asamblea ordinaria, en diciembre de 2003. De hecho, intent¨® incluso modificar el nombre de la federaci¨®n para pasar a llamarse Izquierda Verde. Pero el sector liderado por Francisco Frutos no se lo permiti¨®.

Ambos dirigentes pactaron entonces una unidad que no era real. Enseguida volvieron los enfrentamientos, y despu¨¦s de las ¨²ltimas generales Frutos lleg¨® a decir que el coordinador general "deber¨ªa coger una maleta y marcharse a su pueblo".

El centro del debate ideol¨®gico no se coloca, como anta?o, en la relaci¨®n con el PSOE. Tanto Llamazares como Frutos est¨¢n b¨¢sicamente de acuerdo en que no se puede volver a la ¨¦poca de enfrentamiento abierto, que durante un tiempo dio buenos resultados electorales, pero que acab¨® con una tr¨¢gica divisi¨®n en 1997, con la expulsi¨®n de Nueva Izquierda y la ruptura con Iniciativa. Desde entonces, IU no ha dejado de perder apoyos en todas las elecciones. Frutos no puede estar en contra de los pactos con el PSOE, porque ¨¦l firm¨® con Joaqu¨ªn Almunia en 2000 un acuerdo para acudir juntos a las elecciones.

El debate se sit¨²a en el modelo organizativo, en la fuerza que tengan las distintas federaciones y, sobre todo, en la presencia del PCE, partido hegem¨®nico dentro de la federaci¨®n. En la direcci¨®n de esta hist¨®rica formaci¨®n se han colocado los que m¨¢s critican a Llamazares. Junto a ellos se sit¨²a la Corriente Roja, el ala izquierda de la formaci¨®n, que estaba a punto de abandonarla pero ahora aguantar¨¢ hasta la Asamblea extraordinaria. Frutos podr¨ªa aliarse con este sector, como sucedi¨® en la designaci¨®n del candidato para las europeas, y dar as¨ª la batalla contra la mayor¨ªa creada por Llamazares.

El coordinador general reuni¨® primero a la Comisi¨®n Permanente para anunciar esa convocatoria de una asamblea extraordinaria. Y luego, por la tarde, llam¨® a los coordinadores y representantes afines de las federaciones m¨¢s importantes, que son sus avales principales, para preparar una batalla que ambos sectores ven como inevitable. Todos coincidieron en que hay que profundizar esos cambios que quedaron pendientes en la asamblea del pasado noviembre. Llamazares, en su resumen de esta reuni¨®n, habl¨® de la "necesaria refundaci¨®n de Izquierda Unida". Pero enseguida, conocedor de los problemas que crea ese t¨¦rmino, dijo: "Si la palabra no gusta, ponemos otra, que sea renovaci¨®n a fondo o cualquier otra, pero esto hay que cambiarlo".

Una de las grandes preocupaciones es la imagen oscura y antigua que tiene la federaci¨®n. Las asambleas locales, seg¨²n reconoce la direcci¨®n, se han transformado en unos ¨®rganos que a veces sirven s¨®lo "para ajustar las cuentas peri¨®dicamente" y que no animan a entrar a nuevos militantes. Por eso Llamazares propone que se hagan asambleas no s¨®lo locales, sino tambi¨¦n por sectores o grupos de inter¨¦s, para que la gente pueda participar seg¨²n su profesi¨®n o ¨¢mbito de actuaci¨®n espec¨ªfico. Tambi¨¦n as¨ª se podr¨ªa encauzar, dice, el caudal de conocidos representantes de la cultura, como los que han apoyado a la federaci¨®n en los ¨²ltimos d¨ªas, aunque con escasa repercusi¨®n electoral.

La mayor¨ªa que lidera Llamazares tambi¨¦n atribuy¨® una parte de la culpa a la actitud de Frutos, que ha optado por el enfrentamiento a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n con el coordinador general, al que ha descalificado en varias ocasiones.

El secretario general del PCE continu¨® ayer con su tono duro en una entrevista en Onda Cero. "Cuando no se quiere hacer caso de los signos de la pol¨ªtica, se fracasa. Esta direcci¨®n no est¨¢ capacitada para encauzar de nuevo la pol¨ªtica de IU. No he hablado con Gaspar Llamazares desde despu¨¦s de las elecciones del 14 de marzo. Cuando uno no es capaz de analizar los errores que comete, ni los fracasos que tiene, no hay nada que decir. No tengo por qu¨¦ estar todo el d¨ªa quem¨¢ndome la sangre en discusiones que no tiene ning¨²n sentido, ni en hablar con personas que no quieren escuchar".

Respecto a la pol¨¦mica sobre la presencia del PCE en IU, Frutos se limit¨® a se?alar: "No est¨¢ en el horizonte que el PCE comience una andadura independiente. IU es un proyecto interesante que puede relanzarse".